INFORMACIÓN DIGITAL DEL SIGLO XXI

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD PRIVADA DR. RAFAEL BELLOSO CHACÍN

VICERECTORADO ACADÉMICO

DECANATO DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO

MAESTRÍA EN CIENCIA DE LA COMUNICACIÓN

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UNIVERSIDAD

Privada

Dr. Rafael Belloso Chacín

            INFORMACIÓN DIGITAL DEL SIGLO XXI

                                           Autor: Lcda. Karen Silva

                       C.I 21443257

E-mail: silvakaren97@gmail.com

Maracaibo, Octubre 2015

Ensayo

La información digital no es más que una codificación con el formato de un ordenador, suele decirse que consiste en series de ceros y unos, cada vez que decimos que está procesando una serie de estos números los estamos “humanizando”, la realidad es que solamente estas registrando cambios en señales que pueden adoptar.

Ahora bien, actualmente se puede obtener información digital en la web, anteriormente se le llamaba información electrónica, cuando en el siglo XX llego el internet y las www haciendo que todo a en su entorno diera el  cambio, la sociedad aun no asimilado las consecuencias de esta transformación que se revela como una de las tres grandes revolución en la manera en que la humanidad crece, protege, defiende y promueve el conocimiento.

Por consiguiente, se debe preguntar cuales es la diferencia concreta en la información digital con relación a las otras clases de información o a las otros tipos de soportes, se debe plantear a la interrogante ¿Cuáles son las propiedades de la información digital con la analógica?

De modo que, si llegamos a una conclusión a la pregunta se deberá considerar la documentación, en esta existe tres razones que se debe tomar en cuenta para la información digital del siglo XXI, como es la computabilidad, virtualidad y capacidad.

Pues bien, para la información digital es tan obvio la computabilidad y muchas veces pasa desapercibida, cuando se dice que algo fue computable es porque fue procesado en un ordenador siguiendo un programa o un algoritmo preciso, existe un hecho que merece la atención en un ordenador toda morfología de la información (texto, imagen, sonido) está representado de una misma forma mediante ceros y unos, este simplemente hecho tiene interesantes consecuencias a la hora del proceso informativo con el objetivo documental, es decir su recuperación.

De ahí que, se tiene la primera consecuencia de donde deriva la computabilidad de la información digital, cuando se encuentra se puede buscar en una serie de operaciones o descubrimiento que sería imposible realizar con otra naturaleza analógica.

De forma que, las posibilidades de la computabilidad no termina, por si toda morfología de la información puede representar de la misma formar entonces las barreras para compartir un mismo medio o un mismo soporte de morfología desaparecen.

En ese caso, el papel puede tener texto e imagen estática, pero no tendrá sonido o imagen en movimiento, por su parte los videos puede tener ambas, los soportes digital son el único que puede tener todas las morfología de la información, indicaría que si la web es un predominante textual.

Y bien, se debe hablar también de la hipertextualidad como también la posibilidad de enlazar entre si documentos siguiendo cualquier tipo de lógica o una relación de semejanza entre ideas, entre otros; por otro lado, Hasta la era de internet, decir de algo que es virtual significaba decir que tenía existencia aparente. Pero la Red ha cambiado este sentido y ahora se entiende como “liberado de algunas de las limitaciones propias de lo analógico”; además sugiere que algo existe de otra manera, en forma de bits, pero existe.

Mientras que, Negroponte (1995)  uno de los autores en señalar, de forma muy contundente y acertada, algunas de las consecuencias que se derivan del hecho de que una información esté registrada mediante bits y no a través de átomos; es decir, que sea digital en vez de analógica. Explicaba, por ejemplo, que cuando el usuario de una biblioteca toma un libro deja un hueco en la estantería y ya nadie más puede leerlo. En cambio, cuando alguien accede a un documento digital sigue estando disponible para todos los demás usuarios. La virtualidad propia de la información digital.

Por eso, el valor de un artículo en el mercado tiende a aproximarse al gasto de producir una unidad adicional de ese producto, y en internet ese coste es cero, no es extraño que prolifere la información y los servicios de información gratuitos. Tal como evoluciona internet, es cierto que tal vez esa gratuidad desaparecerá de algunos sectores concretos, pero aparecerá en otros nuevos.

De esta manera, esta visión global de lo digital, mostrar otra faceta de la virtualidad. La fragilidad de este soporte es otro de los problemas derivados de esta característica. Los documentos analógicos poseen lo que se llama “impacto directo”, es decir, no necesitan un aparato para ser leídos. En cambio la información digital requiere aparatos informáticos que con los años quedan obsoletos o simplemente desaparecen del mercado.

Por consiguiente, un documento digital se degrada de modo “catastrófico”. Un simple bit erróneo en un archivo de cientos de páginas o una pequeña mota de polvo que entre en contacto con la superficie de un soporte magnético, puede hacer totalmente imposible su lectura, al menos con los medios con los que cuenta un ciudadano normal.

En resumen, la virtualidad hace difícil en ocasiones determinar los límites de un documento digital. Mientras los analógicos son claramente objetos discretos y tienen límites bien definidos, no sucede siempre lo mismo con los documentos digitales. El lenguaje propio de la www, el html, se basa precisamente en una filosofía de documentos distribuidos. Una página web puede constar no solamente de decenas o de cientos de archivos distintos y separados, situados incluso en ordenadores distintos, sino que parte del contexto que le da sentido está constituido por archivos externos de hojas de estilo o es un elemento de un conjunto de marcos.

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