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COMO AYUDAR A LOS NIÑOS A APRENDER


Enviado por   •  7 de Marzo de 2014  •  2.345 Palabras (10 Páginas)  •  209 Visitas

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A los niños les encanta aprender. Para ellos, aprender es tan natural como el respirar—absorben todo que sucede a su alrededor. Aprenden a través del juego, a través del comportamiento de otros y a través de experimentar ellos mismos. Definitivamente, asistir a la escuela, donde encontrarán muchas experiencias nuevas, muchos niños y la oportunidad de dominar habilidades importantes como leer y matemáticas, debería ser algo divertido y emocionante para todo niño.

Para poder aprender, un niño necesita sentirse seguro y apreciado

Su mente no funciona bien a menos que se cumplan las condiciones fundamentales de ser bienvenido y apreciado. En la escuela, necesita saber que su profesor le estima y lo considera especial. Necesita saber que en la escuela no se van a reír de él y que nadie le va a amedrentar ni humillar. Necesita que se le anime, que se espere mucho de él y que haya mucha diversión. El juego, que es el lenguaje y ocupación de los niños, sigue siendo muy importante durante la edad escolar. Entre más se les permita que jueguen junto a sus actividades de aprendizaje, más pronto desarrollará habilidades y captará nueva información. En casa, todo niño necesita de afecto, bondad y cierta cantidad de atención individual de parte de sus padres, aunque sólo sean 5 minutos antes de ir a dormir o durante un viaje en coche.

Existen varias ideas básicas sobre cómo ayudar a los niños con el aprendizaje que no son bien entendidas en nuestra cultura. De hecho, no son bien entendidas en la mayoría de las culturas. Para que en las escuelas se fomente el aprendizaje y que los padres lo apoyen, necesitamos asegurarnos que las necesidades de los niños se cubran tanto en casa como en la escuela. Enseguida enumero algunos conceptos clave que no son bien entendidos todavía:

 Los niños necesitan sentirse amados, o por lo menos comprendidos y respetados, para que sus mentes tengan la claridad necesaria para aprender.

 Los niños necesitan grandes cantidades de afecto y cercanía física. La cercanía abastece a su autoconfianza y libera sus mentes de las dudas en cuanto a su capacidad. Los niños que se sienten inseguros de su capacidades no se pueden concentrar para aprender.

 Los niños aprenden mejor a través del juego y actividades prácticas. No hay mejor maestro que la práctica. Necesitamos aulas en donde los niños realicen actividades juntos, practiquen y se enseñen unos a otros lo que van aprendiendo. En particular, el juego libre sin fines de competencia ni reglas es un gran promotor del intelecto, la imaginación y la autoconfianza en los niños. Saltar sobre las camas en casa, perseguirse corriendo, jugar luchas y almohadazos (en lo que los niños ganan, por supuesto), son la clase de juegos que fortalecen el espíritu en los niños y les proveen de suficiente diversión para que se mantengan optimistas aun cuando lo que viven en la escuela no les inspire. Cuando la vida se siente como una faena cansada y aburrida, el aprendizaje simplemente no se da. El juego libre es muy importante porque mantiene viva en el niño la chispa de esperanza e interés.

 Los niños necesitan la libertad de cometer errores y hacer preguntas sin temor a ser avergonzados o humillados. Las “fallas” y los errores enseñan tan bien como los éxitos, siempre y cuando se respete al niño.

 El profundo sentido de justicia de los niños exige que ellos y otros sean tratados con justicia y consideración. Justicia para ellos significa que se fijen límites, pero sin ira, que se establezan reglas, pero sin humillaciones, que se enfrenten los problemas, pero sin atacar a las personas por tenerlos.

 Cuando un niño no puede concentrarse o aprender, por lo general hay un asunto emocional que bloquea su progreso. ¡Uno se siente mal cuando no puede pensar! Uno siente temor por dentro cuando no puede hacer lo que se espera de uno y uno no sabe qué hacer al respecto. Esto es lo que le sucede al niño cuando no puede escribir el relato que se le pide, aprenderse de memoria las tablas, ni concentrarse para hacer su tarea. El niño se siente mal, a menudo temeroso y muy solo.

 Cuando vemos a nuestro niño atorado de frustración con el aprendizaje, por lo general nos enfurecemos. Los problemas de nuestro niño nos hacen sentir exhaustos y vencidos. Asumimos algo parecido a: “¡Para esta edad, ya debería de poder hacer sus tareas solo! ¿Por qué necesita que YO le ayude?” Ansiamos que sus problemas desaparezcan para nosotros poder descansar.

 Lo que ayuda inmensamente es algo que se nos ha enseñado a evitar a toda costa. Si usted puede sentarse a su lado mientras el niño llora a rienda suelta por su frustración con la escuela, o hace un berrinche por no querer hacer la tarea, su niño se liberará de los sentimientos que le mantienen paralizado. El desahogo emocional le ayuda a los niños a enfocar su atención y recuperar el optimismo por el aprendizaje. Su niño no sonará “razonable” mientras que llora enfurecido. Parecerá completamente convencido de los sentimientos terribles que ahora exprese. Pero asombrosamente, el llanto y la oportunidad de poder decirle a usted lo mal que se siente por dentro tienen un profundo efecto curativo. Por lo mismo, no trate de discutir ni razonar con él y limítese a hacerle sentir su cercanía para que pueda deshacerse de sus “fantasmas” por medio de lágrimas y expresiones pesimistas y furiosas. Esto no dura para siempre y entre más pueda llorar, más mejoría verá usted en su capacidad para concentrarse y creer en si mismo.

 Las escuelas no están diseñadas para ayudar a los niños con las tensiones que les impiden aprender y llevarse bien con los demás. Ayudarles con esto es trabajo para nosotros los padres. No es un trabajo fácil y es algo que nunca se hizo por nosotros. No parece correcto dejar que un niño llore y llore sin remediar algo para que deje de hacerlo, sin mandarlo a su cuarto hasta que se calle, o forzarle a que recupere su compostura. Trate de escucharle. El escuchar sana. Vea si puede escuchar el llanto o berrinche de principio a fin sin tratar de “arreglar” sus sentimientos o resolver el problema y usted verá lo mucho que esto ayuda a limpiar la mente de su niño y a que sienta más cercanía y confianza con usted.

 La gran necesidad que tienen los niños de atención individual cuando tratan de aprender, es natural. Es el ambiente escolar donde tantos niños compiten por la atención de un solo adulto lo que va contra natura. Las necesidades de los niños se sienten como una gran molestia para padres y maestros no porque lo niños estén

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