Cocian Mexicana

Más de tres mil personas abarrotaron ayer el parque de Santa Catalina para disfrutar de la oferta de Cine+Food

L. Q. D. Comerse un dulce de tomate de La Aldea, un quiche de cebolla de Gáldar, un queso de Arucas, el pan de puño de Ingenio, un cuscús, un oniguiri o arenque al estilo sueco mientras los navi ocupan el patio de butacas intentando esquivar los peligros de los bosques de Pandora; disfrutar de snacks, chocolatinas y helados siguiendo las aventuras de unas cobayas muy especiales; y saborear cócteles originales viendo la atropellada relación de la actriz Cameron Díaz con el actor Ashton Kutcher.

Ese maridaje entre el paladar y la vista, en definitiva entre la gastronomía y el séptimo arte, sólo se podía dar cita en Cine+Food, la nueva propuesta para el verano que ayer comenzó en el parque Santa Catalina con la asistencia de más de tres mil personas, si bien la organización esperaba superar la cifra de seis mil asistentes. No cabe duda de que Cine+Food ha tenido muy buena acogida de público, en su primer día, que espera repetir hasta el próximo domingo.

Niños y mayores con caras expectantes asistieron a la proyección de G-Force, en la que los más pequeños contemplaron embobados las pesquisas de las cobayas espías más famosas del cine, mientras disfrutaban de papas fritas, helados, chocolatinas, zumos y yogures.

Una hora más tarde la claqueta cinematográfica dio el pistoletazo de salida y empezó a rodar con el menú culinario que Cine+Food propuso para estos cuatro días: unos 80 platos de países como Finlandia, Suecia, Italia, Holanda, Alemania, Marruecos, Irán, Líbano, China, Vietnam, Tailandia, Japón, Indonesia, India, México, Uruguay, Venezuela, Cuba y Canarias, representados por restaurantes de la capital grancanaria. La idea es poder degustar cuatro platos de cada nacionalidad a 3 euros la tapa y 6 la ración, y comérselo sentado en las mesas de madera inspiradas en las ferias de la cerveza de los países del norte de Europa, o bien llevarse la comida a la silla y desde allí seguir viendo la película.

El área de gastronomía abrió a las 20.00 hasta las 2.00 horas, con la posibilidad de probar delicias de diferentes países a 3 y 6 euros. Los restaurantes participantes son: Clandestino, Kyoto, El Novillo Precoz, Los Cedros, Como en mi tierra, Sol y Son, Teherán, Paparazzi, Café Oriente, Orient Garden, Taj Mahal, Casa Isaías, Restaurante Batavia, Los Milagros y Nabil. Eran muchos los que se acercaron al stand de Canarias con Vero Reyes y Matías García al frente, para degustar garbanzos, dulce de tomate de La Aldea, queso de Arucas, las papitas arrugadas con mojo cochino, quiche de cebolla de Gáldar y, por supuesto, no faltaron los ceretos de pan de puño de Ingenio. Calderos, cocinilla, manteles a cuadros, bordados y réplicas de cuadros de Néstor Álamo, Santiago Santana y Jorge Oramas decoraban con estilo uno de las casetas más solicitadas.

Pero la trama del filme no iba de llenar el estómago de buenos manjares, sino que las cámaras siguieron rodando con Avatar, el último éxito de James Cameron. Y quién mejor para presentar el filme que los personajes azules de la película. Los navi se mezclaron entre el público, les repartieron folletos, les buscaron butaca. Eso sí, sin hablar en su incomprensible idioma.

Tras la exitosa cinta, y tras unos momentos musicales dedicados a músicas del mundo seleccionados por PD Neketan, la noche siguió con Algo pasa en Las Vegas, una disparatada comedia con Cameron Díaz y Ashton Kutcher, en la que los más buenos de boca aprovecharon para seguir disfrutando gastronómicamente, y los demás aprovecharon para tomar algo que ayudara con el sofocante calor de la noche de agosto.

Los amantes del buen cine podrán ver hoy Up, Hazme reír y Guerra de vinos. ¡Acción!

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