EL EFECTO TEQUILA

“EL EFECTO TEQUILA”

Para poder hablar de la crisis económica conocida como “El efecto Tequila” o “el error de diciembre como lo llamo Salinas” es necesario remontarnos a finales de la década de los setenta, cuando se dio una abrupta devaluación del peso mexicano ésta marcaba claramente que el modelo proteccionista del gobierno se estaba agotando.

Después, los gobierno de José López Portillo, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, todos pertenecientes al mismo partido político PRI, que estuvo en el poder desde 1929, los cuales llevaron a nuestro país hacia una apertura comercial sin la necesaria preparación tecnológica, científica, así como la deficiente infraestructura con la que se contaba y que llevó al país a caer en varias crisis económicas: 1976, 1982 y 1994.

El gobierno de Carlos Salinas de Gortari de clara orientación neoliberal dio especial atención a la atracción de inversión extranjera, durante su administración se privatizó la Banca Nacional (la que había sido nacionalizada apenas hacía 12 años por el presidente López Portillo). Su política se baso en una apertura comercial indiscriminada, una atracción de capital extranjero especulativo y sobre todo en una contención de los salarios de la población que en quince años habían perdido ya alrededor de 70% de su poder adquisitivo.

Además la política económica de Salinas impulsó una lucha contra la inflación debido a que se consideraba un obstáculo para que la estrategia exportadora del gobierno pudiera instalarse. En diciembre de 1987 se anuncio una política de ingresos con disciplina en el orden fiscal. Se pretendía reducir la inflación sin afectar el crecimiento económico.

Gracias a sus políticas de control (de demandas salariales así como los precios de garantía de los agricultores) logró controlar la inflación pues la inflación descendió de 160% en 1987, a 7% en 1994, el producto interno bruto (PIB) creció. No obstante que la inflación bajo, el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos creció desmedidamente. Lamentablemente esta tendencia de la balanza de pagos fue lo que llevó al país a la crisis pues el gobierno abusó del manejo del tipo de cambio y de la política comercial para reducir la inflación. El tipo de cambio bajo estricto control hasta el grado de que el peso mexicano se encontraba sobrevaluado.

Cabe destacar que otro factor importante que en el periodo de Salinas se generó una acelerada apertura al comercio internacional en detrimento de la producción nacional.

Por otro lado, no obstante que existía un déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos, el nivel de las reservas internacionales de nuestro país había estado en crecimiento desde 1988. Esto debido a una acelerada expansión de la inversión (financiada por el flujo de inversiones de compañías extranjeras, préstamos del sector privado y repatriación de capitales) se acumularon 16 mil millones de dólares de reservas.

El gobierno de Salinas renegoció la deuda externa en 1990 lo que trajó como consecuencia una creciente entrada de capitales que en 1993 llegó a 33,308 mdd. (4,389 mdd. en inversión extranjera directa, 18,203 mdd. en renta fija y 10,717 mdd. en renta variable). Esto motivo que la economía mexicana empezara a depender fuertemente de los flujos de capital colocados en activos financieros (principal inversión extranjera) y cuando estos recursos se trasladaron al mercado de capitales (con plazas más cortas y en áreas gubernamentales) y esto a su vez propició que tanto la estabilidad cambiara así como las condiciones macroeconómicas dependieran de la permanencia de esos capitales especulativos.

Como parte del fenómeno analizado es necesario considerar la recesión económica de Estados Unidos a principios de los 90´s que impuso tasas muy bajas de interés como estrategia para combatir la recesión en ese país, lo que dio origen a que millones de dólares fueran enviados a México pues en nuestro país obtenían intereses más altos. Posteriormente cuando en Estados Unidos estas tasas volvieran a subir estos capitales regresaron nuevamente a EE.UU, lo que dio como resultado la salida de grandes capitales y con ello se presento el consecuente déficit en la cuenta corriente, que en el corto plazo daría como resultado que nuestro país agotara sus reservas de divisas.

Al inicio de 1994 la economía mexicana presentaba una situación crítica pues como ya se mencionó líneas arriba, la situación de la balanza de pagos mostraba un déficit muy grave y a esto se le agregó una, también muy grave inestabilidad política propiciada por surgimiento del EZLN en Chiapas y el magnicidio del candidato del PRI Luis Donaldo Colosio y otros asesinatos políticos; estos eventos socavaron la confianza de los inversionistas internacionales.

Sin embargo por obvias razones políticas, pues el país se encontraba en plena campaña electoral, el gobierno de Salinas no tomó ninguna medida preventiva por lo que esto condujo a una nueva

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