EL ESTADO Y SUS RESPONSABILIDADES ÉTICAS EN SALUD

A modo de introducción para hablar del estado y sus responsabilidades éticas en salud, es necesario mencionar los precedentes que originaron esta serie de deberes y obligaciones. Tomare como antecedente histórico a partir de la revolución francesa y el perfeccionamiento de los derechos fundamentales del hombre en 1789, fue a partir de ese evento que empezó a existir una serie de cambios mundiales, en donde se señaló necesario incluir dentro de una constitución y de manera legal este tipo de “garantías”.

Fue México pionero en incluir estas garantías en su constitución política de 1917, misma que aún es vigente en nuestro país. Es de suma importancia conocer los derechos con los que contamos y como estos se encuentran protegidos constitucionalmente para que no se violenten de forma arbitraria por ninguna persona, estos derechos fomentan el equilibrio social y la superación de nuestra sociedad, para ello se creó un orden jurídico que permite el libre desenvolvimiento de los individuos.

Dentro de la constitución mexicana los términos: garantías y derechos son equivalentes. Las garantías nos dan seguridad y protección dentro de un Estado de derecho.

Lo que realmente nos interesa conocer de esto son las garantías individuales, ya que en ellas se aborda el tema de salud, estas se encuentran comprendidas en los artículos 1° a 29° del capítulo 1, del título primero, y conforman el cuerpo principal de nuestra Constitución .

“Art. 4º El varón y la mujer son iguales ante la ley. Toda persona tiene el derecho a la protección de la salud. Toda familia tiene derecho a disfrutar de una vivienda digna y decorosa. Es deber de los padres preservar el derecho de los menores a la satisfacción de sus necesidades y a la salud física y mental. La composición de México es pluricultural basada en sus pueblos indígenas.”

Este articulo nos menciona a que” toda persona tiene derecho a la protección de la salud”. Pero las responsabilidades del estado en este aspecto son reflejadas en la Ley general de salud, que abordare a continuación.

La ley General de Salud (LSG) establece las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud, aplica en toda la república y sus disposiciones son de orden público e interés social.

Abarcan diferentes aspectos sanitarios, así como derechos y obligaciones tanto de los prestadores de servicios, gobierno, y usuarios o beneficiarios:

Acerca del sistema Nacional de Salud, quienes lo componen y que le compete; la prestación de los servicios de salud, de la protección social en salud, los recursos humanos para los servicios de la salud; la investigación, información y promoción de la salud, la prevención y control de enfermedades y accidentes, asistencia social, prevención de invalidez y rehabilitación de inválidos, acción extraordinaria en materia de salubridad general, programas contra las adicciones, control sanitario de productos y servicios y de su importación y exportación, publicidad, donación, trasplantes y pérdida de la vida, sanidad internacional, vigilancia sanitaria, medidas de seguridad, sanciones y delitos. Cada uno de estos temas y problemáticas sociales los desglosa, dictando lo que se debe cumplir de acuerdo a esta ley.

Sin embargo debemos preguntarnos, ¿Por qué la bioética entra en este tema? ¿O que es lo que la bioética aporta?

En primer lugar cabe hacer la distinción entre salud pública y salud, siendo la primera todo lo que atañe al mantenimiento de condiciones mínimas e indispensables para garantizar el estado sanitario de la población (promoción, prevención, asistencia y rehabilitación) y que es responsabilidad del estado, y la segunda que refiere a las condiciones personales de cada individuo respecto a su bien más preciado y que garantiza el derecho a la vida. Este es un derecho natural, inherente a la condición humana, por lo que el derecho a la salud también lo es . Es por ello que no es ajeno de reconocerse, el estado siendo una estructura social lo reconoce y toma parte en sus responsabilidades, no debe dictar si este será otorgado o no, por ser persona se atribuye inmediatamente. La Organización Mundial de la salud destaco que este derecho abarca todos los ámbitos de la vida de las personas, y es responsabilidad de todos defenderla, y que alcance a la mayor cantidad de individuos.

La OMS define a la salud como el completo equilibrio físico mental y social, y no la ausencia de la enfermedad, desde este punto podría decirse que la salud es inalcanzable, debido a las diferencias sociales, económicas que existen en nuestro país y nos da el panorama tan amplio que debe abarcar una legislación sanitaria.

La salud como indicador social nos da el resultado de que una población sana es más productiva y por lo consecuente más exitosa, en nuestro país la forma de enfermar y morir está dada por dos contrastes: por un lado las enfermedades transmisibles (de tercer mundo) y por el otro las enfermedades crónico-degenerativas (de primer mundo), así como el envejecimiento de la población.

La salud es algo tan preciado e invaluable, pero a pesar de ello la población tiende a descuidarlo y a exigir que se le de asistencia sanitaria, sin embargo la complejidad del asunto se ve reflejado en los términos de justicia, ya que

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