ENSAYO TEORÍA POLÍTICA
elsy75Ensayo26 de Marzo de 2016
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FACULTAD DE DERECHO
UNIDAD DE ESTUDIOS DE POSGRADO
ENSAYO
TEORÍA POLÍTICA
INTRODUCCIÓN
La cultura política tiene que ver con la apreciación psicológica y subjetiva que tenemos del Estado, vivimos inmersos en una sociedad sumamente cambiante, mediante la cultura política, los grupos e individuos ordenan, interpretan, se relacionan con el poder, las instituciones y la vida electoral del país.
Las actitudes políticas se refieren a la adhesión, crítica o indiferencia del fenómeno político, la intensidad o grado en que se manifiestan y la manera como condicionan la conducta, se distinguen de las ideologías en que éstas son menos incluyentes, aún así, pueden involucrar e influir el contenido de muchas otras actitudes de una sociedad en constante cambio.
El hombre es un ser social y en su interactuar con los demás, se convierte en un ser político, es tangible como la historia cuenta la lucha por la dominación del hombre por el hombre, el poder por el poder, sin embargo, a lo largo de esta historia, el pensamiento político se ha modificado de diversas formas, éstas hay que entenderlas a la luz de las instituciones y la forma en que los gobernantes han llevado a cabo sus imperios, monarquías, feudos, dictaduras, tiranías, gobiernos, etc.
La teoría política se escribe sobre el supuesto de que ésta constituye una parte de la política misma, el arte del buen gobernar se construye y estructura en el Estado y la sociedad, es decir, no se refiere a una realidad externa, sino que se produce de manera normal y continua en el medio social en el que la política se identifica y tiene su ser.
Dentro de la naturaleza y alcance de la teoría política, nace la esencia del Estado, ambos se complementan, fundados en el conocimiento científico, pues la teoría sin la ciencia sería absolutamente estéril y la ciencia sin la teoría, una clasificación de hechos sin ningún sentido.
EL PENSAMIENTO POLÍTICO
A través de la historia, partiendo desde lo primitivo del humano hasta el desarrollo de lo moderno tal como lo percibimos, ha habido una clara y en ocasiones tan natural diferencia entre gobernantes y gobernados, unos mandan y otros obedecen.
La amplitud misma de la literatura existente y la centralidad que pensadores tan determinantes en la historia de la filosofía le han dado a la reflexión política, son algunos indicadores de que este transitar teórico, constituye una disciplina científica en sí misma.
Es entonces, cuando la política aparece como una lucha por el poder público, Serra Rojas la define como “la actividad que tiene por objeto regular y coordinar la vida social, por medio de una función de orden, defensa y justicia, que mantenga la cohesión y la superación de un grupo”.[1]
La verdadera política teórica, aún con limitaciones de objeto o de métodos, sólo puede comenzar, cuando las ideas políticas dejan de ser del dominio de un pequeño grupo de los llamados políticos y quedan abiertas a la discusión de todos los que en ella se interesen.
La mayor parte de los ideales políticos modernos –como por ejemplo, la justicia, la libertad, el régimen constitucional y el respeto al derecho- o, al menos sus definiciones, comenzaron con la reflexión de los pensadores griegos sobre las instituciones de la ciudad-estado. Los filósofos griegos reflexionaban sobre prácticas políticas muy diferentes de cualesquiera que hayan prevalecido de manera general en el mundo moderno.[2]
ANTIGUO
Petersen Cortés señala que “el progresivo avance en la complejidad de las formas de organización política y social junto con el desarrollo de una reflexión filosófica sobre innumerables ámbitos de la vida humana, provocaron que fueran muchos los autores griegos preocupados por los temas vinculados con la teoría política”. El ejercicio más formal de la política, ocurrido en Grecia por allá del siglo V a.C., coincide cronológicamente con el surgimiento del pensamiento político.[3]
Los Sofistas
Aparecieron en aquel tiempo en las ciudades griegas y en especial en Atenas, daban una importancia muy grande a las cuestiones políticas, no buscaban la verdad, sino el éxito político, enseñaron a los jóvenes la técnica del poder político, partiendo de la oratoria y la retorica.[4]
En comparación a las aportaciones de otros personajes, los formulismos con trampas dialécticas que llevaban a cabo, son más parecidos a la forma de proceder de los políticos en la actualidad, pues realizan “pantallas” o “artificios” para su labor, en lugar de buscar el carácter científico de la política y así dignificarla.
Sócrates
En sus enseñanzas decía que el ideal de la vida consiste en someterse incondicionalmente al Estado y obedecer en todas sus prescripciones. Política y Ética marchan de la mano. Se delinea por primera vez, una filosofía moral del Estado y la necesidad de postular ideales políticos como deber de los ciudadanos.[5]
Platón
Este personaje fue discípulo de Sócrates, no elaboró una teoría de la política sistematizada y coherente. Se preocupó más bien de los aspectos éticos del Estado y por la realización de la justicia y la virtud. Su intención fue trazar el esquema de un Estado ideal que sirviera para todos los tiempos y lugares. Sus diálogos políticos: La República, Las Leyes, El Político u Hombre de Estado.[6]
Aristóteles
Un discípulo de Platón, sin duda el más sobresaliente, sus obras políticas fundamentales son: La Política y las Constituciones. Por haber aplicado el método de observación y análisis de datos reales, presentes y pretéritos se ha considerado a Aristóteles como el fundador de la Ciencia Histórico-Descriptiva de la Política. Además, descubrió la conexión intima existente entre los cambios sociales, económicos y las transformaciones políticas, con ello vino a ser el fundador de la Sociología Política.[7]
Estos personajes que nos han precedido, son siempre aludidos con un sin fin de aportes, sus pensamientos han trascendido de manera tan importante, que actualmente siguen vigentes sus contribuciones a la ciencia, pues realizaron una construcción teoría de la política.
Con el transcurrir del tiempo aparecieron otros filósofos de Grecia y Roma como: Los Epicúreos, Los Estoicos, Polibio y Cicerón, posteriormente, hubo doctrinas políticas en los primeros siglos del cristianismo y pensadores como San Agustín y San Gregorio, que dejaron un legado a la ciencia política.
EDAD MEDIA
El desarrollo de las ideas en la Edad Media, inició con muy poca actividad filosófica, posteriormente, se reanudó el trabajo intelectual sobre ideas políticas de la antigüedad y después con el pleno florecimiento de la Filosofía Escolástica, se abren nuevas perspectivas a la Ciencia Política.[8]
Dentro de las controversias políticas medievales, aparecieron Santo Tomas de Aquino, La Doctrina Tomista de la Ley, La Ley Eterna, La Ley Natural, La Ley Divina, La Ley Humana, entre otras, todas con una aportación para la construcción de la política teórica.
EDAD MODERNA
Inicia así un cambio de tendencias, aparecen personajes que consideramos de gran relevancia o con los que nos hallamos mas familiarizados, los cuales son fundamentales para comprender el pensamiento político actual, ya que proporcionaron los elementos del Estado moderno.
Dos causas influyen en el cambio de la Edad Media a la Edad Moderna: una de carácter ideológico –El Renacimiento y La Reforma- y la otra de carácter fáctico –económico, social y político-.
Nicolás Maquiavelo
No siguió un método histórico, su técnica fue la observación guiada por la astucia y el sentido común. Sus obras políticas más importantes fueron: El Príncipe y Los Discursos sobre la Primera Década del Tito Livio.[9] Maquiavelo conocido por su memorable frase: “el fin justifica los medios”, que en política es sumamente aplicada en el devenir contemporáneo.
Juan Bodino
Perteneció al grupo de pensadores moderados conocidos o llamados ya en esa época como “políticos”. La parte más importante de su filosofía la constituye la exposición del principio de la soberanía. Precisamente el principio que distingue al Estado de todos los demás grupos formados por las familias, es el de la soberanía.[10]
Tomás Hobbes
Intenta justificar la soberanía absoluta del monarca sin recurrir para nada a factores externos al Estado. Su doctrina política descansa en el materialismo. Se le reconoce como el fundador de la moderna Ciencia Política considerada como una disciplina autónoma y completamente secularizada.[11]
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