El Contrato Social

Rousseau fue un individuo que siempre pensó que cada persona debía asumir su rol en la sociedad, en el contrato social se ve reflejado un tratado sobre los derechos políticos de cada persona en cada sociedad una de las frases que utilizaba Jean Jacques Rousseau era que el hombre nace libre y permanece encadenado por todos lados.

Esta obra se divide en cuatro libros, al iniciar a leer esta obra me encuentro con una advertencia que nos dice que es un breve tratado de una obra más amplia, comenzada en otro momento sin haber consultado mis fuerzas y abandonada mucho tiempo atrás. De los diversos fragmentos que se podían extraer de lo que ya estaba hecho, este es el más importante y el que me ha parecido menos indigno de ofrecer al público. El resto ya no existe.

EL Libro Primero:

El libro primero parte de la teoría que tenia Rousseau de que cada hombre nace libre e iguales. Nos habla sobre los inicios del hombre, nos explica que la familia “es el primer modelo de sociedad política”, es decir que en el hogar es donde aprendemos que siempre van a haber normas que nos van a regir como personas. Una parte muy importante es la que se destaca en el capítulo tercero donde habla del derecho del más fuerte, y nos explica que la verdadera fuerza se transforma en derecho y la obediencia en deber, esto hace referencia a que toda persona tenemos ciertos deberes como ciudadanos y así como tenemos deberes también tenemos derecho y nuestro trabajo es hacerlos cumplir. En el pacto social Rousseau nos dice que entre los ciudadanos debe nacer la unión de todos, de esta manera encontraremos una manera de asociación que nos defienda y proteja como personas y los bienes de cada uno.

Uno de los aspectos más importante y que se trata mucho en este primer libro es la unidad que tienen que tener los ciudadanos buscando el bienestar de cada uno. Otro aspecto importante que finaliza el primer libro es la igualdad, nos dice que las personas pueden ser desiguales en fuerza o en talento pero acaban siendo todos iguales por convención y derecho es decir que en una sociedad todos los ciudadanos tenemos que cumplir tanto nuestros derechos como nuestros deberes.

Libro segundo:

Esta segunda parte de este libro se refiere sobre todo del concepto de “voluntad general”. A esta voluntad lo llama Rousseau “soberanía”, destacando su inalienabilidad e indivisibilidad es decir que es aquello que no puede pasar o transmitirse de un individuo a otro y tampoco se puede dividir. Esta parte del libro segundo trata sobre la falsa representación de un cuerpo legislativo, pero veamos que nos dice: “Ya he dicho que no hay voluntad general sobre un objeto particular. En efecto, este objeto particular está dentro del Estado o fuera del Estado nos quiere decir que la voluntad general es siempre correcta y tiene que beneficiar a la utilidad pública sin embargo siempre se engaña al pueblo y bus solo su propio bienestar..

También analiza las nociones de “ley”, que no sería otra cosa que un acto de la voluntad general, es decir, donde el "pueblo" sería el "legislador" es decir que la población buscaría el bienestar para cada uno de ellos. Rousseau hace que sea imprescindible la figura del legislador representante, que es “un hombre extraordinario" en el Estado el hombre que tiene el trabajo de velar por los intereses de la ciudadanía.

Rousseau hace un poco de aritmética política, al establecer ciertas proporciones entre el número de habitantes, la extensión de los países... El objetivo de todo pueblo es conseguir abundancia y paz para cada uno de sus ciudadanos. Rousseau coincide con Aristóteles en la necesidad de una clase media, aunque en el ginebrino hay una mayor tendencia a una homogeneización. Piensa que la libertad subsiste gracias a la igualdad: “Es precisamente porque la fuerza de las cosas tiende siempre a destruir la igualdad, por lo que la fuerza de la legislación debe siempre tender a mantenerla”.

Un aspecto muy importante tratado en el libro segundo es el pueblo donde nos habla sobre las leyes, nos explica que un legislador sabio antes de redactar una ley, las examina cuidadosamente las estudia para así darse cuenta si el pueblo que lo eligió es apto para asumir dichas leyes.

La ultima parte de este segundo libro nos habla sobre las costumbres que también se considera una ley que va en nuestro corazón, estas costumbres son de acuerdo al uso y a la opinión y esta ultima precisamente la más desconocida por nuestros políticos pero de la que depende el éxito ya que en una sociedad

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