Enfermeria Tecnica

El peso del recién nacido:

Una de las primeras cosas que hacen los médicos nada más nacer nuestro bebé es pesarlo y tomar una serie de medidas. ¿Pero para qué sirven estas medidas? El peso del recién nacido, nada más nacer, permite determinar el estado de nutrición y desarrollo del bebé, en relación con la gestación.

Para realizar esta medición o somatometría del recién nacido, se establecen unos valores medios, lo que pesa el 50% de los niños y niñas, y unos límites que se consideran normales, entre el percentil 10 y 90. Por debajo de estos percentiles, puede que el bebé tenga problemas.

Como norma general, los niños nacidos a término, entre la semana 37 y 42 de embarazo, suelen pesar entre 2.700 y 3.900 gramos. Las niñas suelen pesar unos 200 o 300 gramos menos, quedando entre 2.400 y 3.600. Con estos valores, podemos establecer si el niño tiene un peso por debajo del percentil 10, se dice que es pequeño para su edad gestacional (lo que se conoce como PEG) o tiene bajo peso para su edad gestacional (BPEG).

Una vez determinado el peso del bebé, habrá que descubrir cuáles son las causas de este bajo peso. Puede ser debido a:

• Mala nutrición de la madre, durante la gestación.

• Infecciones antenatales.

• Síndromes malformativos.

• Alteraciones genéticas.

• Mal funcionamiento de la placenta.

• Que la madre haya fumado durante el embarazo.

También, hemos de tener en cuenta que los bebés suelen perder un poco de peso durante la primera semana de vida, pero esta pérdida nunca debe suponer más del 10% del peso que tenía nada más nacer. Si el bebé toma el pecho sin restricciones, a los pocos días recuperará el peso perdido.

¿Cuánto debe medir el recién nacido?

Nada más nacer el bebé se suelen tomar sus medidas, y para determinar lo que mide, se utiliza la distancia que hay desde el talón hasta la coronilla. Para realizar esta medición hay que tener especial cuidado, porque los bebés suelen tener los miembros flexionados por la postura fetal.

Del mismo modo, que para determinar su peso, existen tablas de valores para determinar si el bebé mide lo suficiente. Un bebé nacido a término suele medir entre 47 y 52 centímetros. Esta talla depende también en cierto grado de características genéticas del niño o niña, aunque existe poca relación con esta talla del bebé nada más nacer, con la que tendrá cuando sea adulto, ya que dependerá de toros factores familiares y del momento en el que se produzca su desarrollo puberal.

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