Especulación Acecar De La Reforma Del Sistema Financiero Venezolano 2009

Para el desarrollo del análisis considero conveniente que manejemos algunas acepciones sobre sistemas socio-económicos sin entrar en diagnósticos o conflictos sobre cual es el mejor o más indicado para nuestra sociedad, mas si presentar características propias para discernir lo que en función a lo que pretende el Gobierno Nacional de justificar su intervención bajo su perspectiva de desmontar un sistema inhumano que históricamente solo ha servido para explotar a los menos favorecidos con el beneficio de unos pocos y cuya situación será corregida con la “imposición del socialismo del siglo XXI”.

En este orden de ideas, la primera acepción es la de liberalismo, en este sentido tenemos que este sistema “es el modelo de instituciones políticas que aseguran la libertad individual bajo el gobierno de la ley” (7). El liberalismo es, así, la filosofía social que sostiene que se debe permitir a todo individuo que siga sus intereses y deseos, sin más limitación que las reglas que previenen que se viole la libertad de otro u otros individuos (8).

Si analizamos los elementos presentes en concepto anterior, encontramos inicialmente la noción de libertad, donde se entiende que es la posibilidad de que una persona actúe según sus propias decisiones y planes. El otro elemento que aparece es la Ley, para el liberalismo, en este momento entenderemos que la ley son las reglas generales de conducta, aplicables sin distinción y en lo esencial, definirán las prohibiciones mas que los mandamientos, “por lo tanto son inseparables de la institución de la propiedad privada” (9). La noción de ley en consecuencia, es la expresión de una realidad que antecede todo acto legislativo. Esta última realidad, que se admite virtualmente como natural a la vida del hombre en sociedad, es la propiedad privada.

Por consecuencia la noción de la ley, por lo tanto de la libertad se admite que es inseparable de la idea de justicia (10).

También encontramos del liberalismo que “Puede tomarse el liberalismo, con una amplia justificación histórica, como la culminación contemporánea de toda la tradición política occidental. En este lato sentido, liberalismo sería igual, en su significado, a lo que en el uso político popular se llama generalmente ‘democracia’” (11).

Conociendo mejor el término de ‘democracia’, tenemos que su origen griego proviene de las palabras ‘Demos’ pueblo y ‘Kratos’ autoridad o gobierno. En este sentido podemos interpretar de la manera más simple, que es el derecho del pueblo a gobernarse por sí mismo, con finalidades que representen al interés de todo el pueblo o su mayoría.

La democracia presupone la igualdad de los hombres y su derecho igualitario tanto a ejercer la soberanía popular como a alcanzar los fines que, de acuerdo con los conceptos esenciales de la filosofía liberal, tiene el hombre. Derechos que están claramente enunciados en lema de “Libertad, Igualdad y Fraternidad” de la Revolución Francesa.

Con relación a la amplitud y el espíritu armónico que debe caracterizar el régimen democrático Sabine menciona “El programa liberal de un gobierno libre y la defensa liberal de sus procedimientos, tales como el sufragio, la representación, la organización de partidos y el control de gobierno por los partidos, surge naturalmente y, al mismo tiempo, depende de la concepción de una sociedad libre que ha logrado encontrar una relación eficaz entre el bienestar

...