HACIA UNA EVALUACIÓN DE LOS APRENDIZAJES DESDE EL ENFOQUE FORMATIV

INTRODUCCIÓN

La evaluación es una tarea o acción que siempre ha existido, pero está cobrando especial relevancia en la actualidad en muchas áreas de la actividad humana con diferentes objetivos, ya sea para mejorar los resultados o tener un panorama amplio de todos los aspectos involucrados en dicho proceso para su mejora. En este sentido en el plano educativo la evaluación como parte sustancial del proceso enseñanza/aprendizaje demanda un cambio de paradigma para poder responder a las nuevas necesidades de una sociedad globalizada y cambiante, en la que la información se presenta y fluye de manera rápida y en distintos formatos que demanda personas con competencias cada vez más pertinentes y variadas. En consecuencia, los sistemas educativos han tenido que reformar sus procesos para brindar una educación de calidad en el que pone al centro de todos los esfuerzos a los estudiantes y él logró máximo de los aprendizajes, desde éste contexto la evaluación de los aprendizajes debe transitar indiscutiblemente   desde un enfoque sancionador; en el que sólo tiene como objeto la medición de los resultados, sin importar los medios, las formas, ni las emociones y valores éticos que se ponen en juego, hacia una nueva concepción o paradigma de la evaluación de los aprendizajes centrado en los procesos, en la manera en que aprenden o dejan de aprender los estudiantes, la forma en cómo diseñan y enseñan los docentes, las emociones y valores éticos que  manifiestan  los diferentes actores y la toma de decisiones fundamentadas y orientadas hacia la mejora tanto de los aprendizajes como de la práctica docente; es decir concebir a la evaluación de los aprendizajes desde un enfoque formativo. El objetivo de este ensayo radica en hacer un análisis reflexivo sobre el enfoque formativo de la evaluación de los aprendizajes y sus implicaciones pedagógicas, para transformar de manera significativa el sentido de este proceso desde nuestra propia práctica y en consecuencia se potencien los aprendizajes de los alumnos.

Palabras clave: Evaluación formativa, aprendizaje, enseñanza, calidad educativa, aprendizajes esperado, acreditación, calificación, estimación, certificación, retroalimentación.

HACIA UNA EVALUACIÓN DE LOS APRENDIZAJES DESDE EL ENFOQUE FORMATIVO.

Sin lugar a dudas en el terreno educativo hablar de la evaluación de los aprendizajes se convierte en un verdadero desafío para el quehacer docente, en el sentido que en la escuela se trabaja con sujetos no con objetos como en el caso de la fabricas que producen en serie. Trabajar con sujetos y específicamente en su desarrollo cognitivo y de diferentes capacidades, habilidades, y actitudes que se encuentran en constante cambio, la evaluación de los aprendizajes en este contexto representa un proceso complejo.

¿En qué consiste la evaluación de los aprendizajes desde el enfoque formativo?

La evaluación tradicionalista se contrapone a la evaluación formativa, ya que tiende a centrarse en una educación basada en los contenidos y en los resultados, conduce al proceso educativo a la creación de rutinas, y al empleo de métodos coercitivos y a la obtención de información acerca de los aprendizajes de los estudiantes carentes de significados y con fines de medición, acreditación y con carácter sancionador que limita y obstaculiza el desarrollo del pensamiento crítico y creativo. La evaluación de los aprendizajes es una tarea propia de los docentes, ya que somos nosotros los que estamos al frente de los estudiantes, los que planificamos la enseñanza y la desarrollamos, los que realizamos los ajustes necesarios en nuestra práctica educativa, los que brindamos la realimentación y ayuda pedagógica a justada para el máximo logro de los aprendizajes establecidos en los programas de estudio, en resumen, somos los docentes quienes tenemos el poder de transformar la evaluación en una práctica con un verdadero sentido pedagógico.

En el Plan de estudios 2011. Educación Básica, en el vigésimo principio pedagógico “Evaluar para aprender” retoma las principales aportaciones sobre la evaluación con sentido formativo, en el que define a la evaluación de los aprendizajes como “el proceso que permite obtener evidencias, elaborar juicios y brindar retroalimentación sobre los logros de aprendizaje de los alumnos a lo largo de su formación; por tanto, es parte constitutiva de la enseñanza y del aprendizaje” (SEP, 2011 P.31). En éste contexto la evaluación adquiere un valor imprescindible ya que pone al centro del proceso al logro de los aprendizajes, mediante la obtención de información y evidencias de diversas técnicas e instrumentos de evaluación, se convierte en una tarea permanente en la medida en que las elaboraciones de juicios deben ser en todo momento para realizar los ajustes necesarios a la intervención pedagógica y brindar la retroalimentación pertinente para el logro de los aprendizajes. De aquí la importancia del enfoque formativo de la evaluación, ya que esta debe brindar los elementos necesarios para tanto uno como docentes, padres de familia, mismos alumnos sean conscientes de las dificultades que se presentan en el aprendizaje y se realicen las propuestas de mejora para superarlas como un trabajo en conjunto. Para ello es importante involucrar a los padres de familia y estudiantes en la evaluación de los aprendizajes desde la comunicación de los aprendizajes esperados ya que son los principales referentes tanto de la planeación como de la evaluación con el fin de compartir metas en común. De igual manera en el acuerdo número 11/03/19 por el que se establecen las normas generales para la evaluación del aprendizaje, acreditación, promoción, regularización y certificación de los educandos de la educación básica, en su Artículo 5, apartado XVIII, define a la evaluación formativa como “un proceso en el cual docentes y educandos comparten metas de aprendizaje y evalúan de manera permanente sus avances a través de la obtención variada de evidencias. El enfoque de evaluación formativa considera que ésta es parte del trabajo cotidiano del aula y es útil para orientar este proceso y tomar las decisiones más oportunas para obtener el máximo logro de aprendizaje”.

Al hablar de evaluación de los aprendizajes seguramente nos encontraremos con algunos conceptos que se relacionan pero que no determinan su carácter formativo, podemos mencionar los siguientes: la medición, la estimación, calificación, promoción y la acreditación que forman parte del proceso evaluativo. Sin embargo, la evaluación en su conjunto debe brindarnos la información necesaria para comunicarla a los diferentes actores con diversos propósitos y de esta manera poder cumplir la doble funcionalidad por un lado su función pedagógica y por el otro la social.

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