Historia De Yaguarón

UN POCO DE HISTORIA

Cuando lo españoles se establecieron en Paraguay, hecho que ocurrió con la fundación de la Casa Fuerte de la Asunción, por el Capitán Juan de Salazar de Espinosa, el día 15 de agosto de 1535; YAGUARÓN ya existía, tal vez con el nombre de ÑAGUARÜ ( significa: perro grande o jaguar enorme ), ya que de hecho existían sitios donde numerosos indígenas coincidían más o menos sedentarios y sobre todo para la defensa de la población, denominada “ TAVA”.

Existían además, lugares en los cuales esos núcleos indígenas recalaban, por diversos motivos, con cierta asiduidad, uno de esos pueblos fue Yaguarón, pueblo de indios, fundada hacia el año 1538.

Se alega también que Yaguarón fue trasladado de “Naranjito”, lugar situado entre Paraguarí y Piribebuy, a su sitio actual. Aunque no se aclara el año de la migración ni tampoco el nombre de la tribu.

Se tiene información que los aborígenes que se establecieron en Yaguarón fueron guaraníes de la parcialidad de los “CARIOS”.

Yaguarón es una de las villas más antiguas, fundada por el gobernador Domingo Martínez de Irala, hacia el año 1538, a un año después de Asunción, según Miguel Angel Pangrazio, que agrega: “Lugar donde abunda el Jaguar o Tigre Americano”. Este felino fue el emblema “Totémico” de la parcialidad aborigen que se instaló primitivamente en este lugar.

“YAGUA” o Jaguar y “ERU” o Negro, estas derivaciones hacen alusión sobre el Jaguar “YAGUARU”, del Cacique CARIO Guarapí.

Reducciones

Acerca de las Reducciones, la expedición del adelantado Juan Ortíz de Zaraté, en 1572, acompañaba Fray Luis de Bolaños, quien en 1582, fundó las reducciones de los ALTOS, ITA y YAGUARÓN.

Las doctrinas o reducciones se crearon en diversos lugares cercanos a la ciudad de Asunción y en el interior del país, para difundir con la cruz y el evangelio no solo los principios de la religión católica, sino también los valores de la civilización europea entre los naturales.

Varios de estos núcleos o centros de civilización, se transformaron con el tiempo en prósperos pueblos.

Entre estas reducciones figuraba “YAGUARÓN”, pioneros de la incorporación de los indígenas a la vida civilizada, cuya obra no conoció limitaciones: viviendas y vestimenta, organización familiar, desarrollo económico, higiene, artes y oficios.

Esta labor misionera se realizó basándose en los antiguos pueblos creados por Domingo Martínez de Irala.

Fray Luis de Bolaños y Fray Alonso de San Buenaventura fundaron la reducción de Yaguarón, con indios traídos de la zona de “ACAY”, a quienes pacificaron y redijeron.

Bolaños es muy recordado por su labor evangelizadora en la zona de Caazapá y Yuty.

Ya anciano, después de fundar las reducciones en el sur, como Itatí, Varadero y otros, se albergó en el convento de San Francisco de Buenos Aires, donde falleció el 11 de octubre de 1629, sus restos fueron enterrados en el mismo convento.

En el año 1979, sus restos fueron traídos a Paraguay y depositados en una urna de mármol, en la iglesia de los Padres Franciscanos de Asunción.

“Si bien Bolaños es considerado APÓSTOL DEL PARAGUAY, su enaltecida figura no es recordada en Yaguarón. No existe calle con su nombre, ni monumento que recuerde al ilustre misionero Franciscano”.

La Primera Iglesia

Cuando se constituía un pueblo de indios como fue Yaguarón, se establecía las autoridades para su funcionamiento, como ser el Cabildo, Corregidor Indígena y el Jefe de la Guarnición.

En esta organización los Misioneros Franciscanos tenían a su cargo la catequesis y como en todas las reducciones, desde el comienzo construyeron su capilla o iglesia. El primer edificio del cual se tiene noticia data del año 1595 y era de una estructura de madera dura con horcones de y vigas, según los historiadores.

Por orden del gobernador Hernandarias, Fray Luis de Bolaños, tuvo que ir a Pitún (Ypane), paa reorganizar y pacificar, a raíz del desorden que provocaron los indios del lugar, por esa razón, Bolaños tuvo que dejar la reducción de Yaguarón a manos de los Clérigos, de donde se deduce que la reducción de Yaguarón paso al Clero Secular, hacia fines del siglo XVI, de esa forma se conoce al primer clérigo que ejerció la labor de cura párroco, y fue el padre HERNANDO DE LA CUEVA, quien inició los apuntes referentes a la feligresía de Yaguarón en fecha, 15 de julio de 1600.

Las autoridades de Yaguarón manifestaron que el padre De La Cueva, fue puesto por Bolaños, hasta que este regresó de la reducciones del norte.

Como la labor Franciscana iba en aumento, el Fray Alonso de San Buenaventura viajo a España en procura de más misioneros. Durante su ausencia se encargaron del adoctrinamiento de los indios, Fray Luis Bolaños y los novicios guaireños.

Realizó tres viajes a España desde donde trajo más de 60 misioneros, a su vuelta del último viaje, recaló por el Perú y Chile, por donde enfermó y falleció en San Francisco del Monte, hacia el año 1594.

Otros insignes misioneros fueron de la época fueron: Fray Gabriel de la Anunciación, primer sacerdote franciscano y el primer mártir misionero paraguayo Fray Juan de San Bernardo, muerto azotado y apaleado por los indios paranaenses en la zona de Caazapá, debido a que su presencia en la zona fue tomada por el Cacique “Cababayú”, como la de espía de los españoles. Actualmente sus restos fueron trasladados hacia Asunción y descansan junto con Fray Luis de Bolaños en la iglesia de San Francisco.

La Nueva Iglesia

En el año 1772, el pueblo yaguaronino exteriorizaba gran entusiasmo por la nueva iglesia que se iba a levantar.

El templo fue erigido en honor a la Virgen de la Inmaculada Concepción y San Buenaventura, por el sacerdote Dr. Carlos Penayo de Castro, el célebre paí CARO. La construcción del templo se inicio hacia el año 1755 y concluyo en 1772. Su constructor fue sepultado en él.

El retablo mayor del templo, fruto del “barroco colonial paraguayo”, fue elaborado y dirigido por el tallista portugués JOSÉ de SOUZA CAVADAS, secundado en su labor por profesionales indígenas de la doctrina de Yaguarón, quienes fueron formados en el arte por lo misioneros franciscanos durante los primeros

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