LA ACTIVIDAD DEL JUZGADOR Y SU INFLUENCIA EN LA SOCIEDAD

LA ACTIVIDAD DEL JUZGADOR Y SU IMPACTO SOCIAL

¿QUE ES EL JUZGADOR?

se entiende por “juzgador” a aquellas que se dedican a la función jurisdiccional, en especial a las personas que han aceptado la encomienda de dirimir las controversias jurídicas: jueces, magistrados y ministros estos realizan su función realizando un análisis profundo de las ideas y las defensas de cada una de las partes (la demandada y la demandante),estos tiene la capacidad de juzgar libremente y dar penas o libertades según sea el caso. Un juez es aquel que administra la justicia de manera que quede equiparada en los principios morales en los que se basa y el derecho estos tienen sus antecedentes en la antigua roma donde se les daban estas funciones a las personalidades que por sus altas capacidades filosóficas y humanas inspiraban el respeto, gracias a lo justo de sus decisiones, en la última etapa de la historia de roma la figura del juez ya era legal.

existen varios tipos de jueces estos están dividido en razón de la materia que se especializan e como penal, civil, laboral ,mercantil etcétera, lo que les otorga la competencia, y que se devuelven en diversas instancias así como también existe un juez de paz que es una figura también legal, pero que tiene principios diferentes a los de un juez común como los que antes menciones ya que estos no tienen tanto alcance jurídico y por el contrario son personas que llegan al sitio de la circunstancia para mediar y llegar a un acuerdo de paz en el que ambas partes llegan a un acuerdo y solucionar su problema.

Como debe de ser el juzgador

El juzgador debe ser el hombre sabio, justo, imparcial, sereno, desapasionado, límpido, que sirve únicamente a los intereses de la justicia, desapegándose de su vida personal, porque como se dice es de temerle más al juez injusto que a la ley injusta, ya que la actitud dolosa, depravada o apasionada de un juez puede llevar a dañar tanto a los individuos como a la sociedad.

Para el juez ya no hay paisanos, amigos, ni parientes debido a que esto puede alterar sus forma de pensar dejando de ser totalmente imparcial para poder lograr esto su alma debe estar fortalecida para poder aguantar las pasiones que son enemigos de la justicia; es importante que los jueces cuiden sus actuaciones pero que no les baste con eso si no que vallan más allá, cuidando también las de sus colaboradores dejándoles claro que su trabajo es en pro de la justicia el compromiso esta con toda la sociedad no con los amigos y que el trabajo y los amigos son cosas que se tienen que mantener con sus límites que no influya el uno con el otro para que en el supuesto que después alguien intente decir lo contrario poder levantar la cabeza y decirle sin ninguna preocupación que están equivocados.

Las características que deben de tener dependen solo de ellos mismos es la confianza del público llega por si sola cuando se están haciendo las cosas como deben der ser juzgando con neutralidad, tratando igual a las partes siendo imparcialidad y sin ningún interés personal en los asuntos, con altos niveles morales. Siguiendo el llamado a defender la Ley, y en especial, a los individuos más necesitados del amparo legal, como pueden ser los ausentes, los desaparecidos, los incapaces, las personas marginadas y aquellas que aunque hayan cometido errores en su vida, debe ayudárseles a encaminarse hacia un futuro de convivencia en esa sociedad de paz y justicia.

Todas las cualidades que conforman la personalidad del juzgador se obtienen muy fácilmente solo es necesario tomar conciencia y pode para distinguir lo justo de lo injusto teniendo que sufrir las injusticias aun cuando no sean ellos los afectados directamente y si un juez no lo sufre entonces a ese juzgador le falta esa cualidad del alma. Esto es lo que se llama sensibilidad jurídica. Esta es una de las cualidades que deben adornar a los que se dedican a la judicatura pero aún falta muchas cualidades más como por ejemplo otro de las cualidades esenciales es el conocimiento jurídico básico por lo menos sin llegar a ser unos doctores en cada una de las materias jurídicas; también es necesario que los juzgadores tengan ciertos valores como lo es la tolerancia para poder soportar todos los tipos de presiones a los que se enfrentan, necesita tener un espíritu inquisitivo para no conformarse con la primera solución que les viene a la mente no desesperarse, necesitan tener resistencia para el trabajo cuidando su saludo ya que esto puede influir demasiado, sobre todo una gran voluntad de servir, sin ambicionar más de lo que tiene, vivir frugalmente y tener la paciencia de escuchar a las partes.

Es importante que no se nos olvide que la confianza y el prestigio de las instituciones depende de la conducta observada por aquéllos que desempeñan la honrosísima y delicada misión de juzgar a sus semejantes, es decir que de mucho vale el ejemplo de un juez tanto en su vida privada como fuera de ella, apegado a las normas más estrictas del honor, gozando fama de integridad y eficiencia en todos sus actos, manteniendo siempre con orgullo el prestigio y noble independencia de criterio.

Cualidades que debe observar el juzgador

a. Compañerismo: Estar cerca unos compañeros de otros. Por sí mismo, el Juez, en sus últimas decisiones, es un hombre solitario. No ha de olvidar la voz de la experiencia. El consejo útil del amigo. La meditación de un tema entre varios y la tranquilidad después de haber resuelto con arreglo a su conciencia y al derecho que debe aplicar.

b. Competencia. Implica la preparación constante que el juez debe mantener a lo largo de su carrera; pues puede caer en la tentación de confiar demasiado en la experiencia. La carrera judicial exige cada vez juzgadores mejor preparados, capaces de resolver conforme a las problemáticas jurídicas y a realidades sociales actuales. El derecho, siempre en evolución, exige que las personas encargadas de aplicarlo, evolucionen con él, se actualicen y se mantengan a la vanguardia en la interpretación de las normas.

c. Amante de la Verdad, por su formación intelectual, ya que pone su estudio e investigación al servicio de esa verdad. La Verdad es siempre objetiva y los errores son también siempre subjetivos. El Juez sólo cede cuando pronuncia verdad y no la hace depender de la crítica u opinión de los demás, por mucho que pueda comprometerle o desfavorecerle. El Juez es un servidor; se debe a los demás, a personas que han cometido errores o aquellos que someten a su decisión cuestiones de honor, de familia o de economía. Es, por tanto, un servidor; el servicio viene de amar, y el amar viene de

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