LA ESCUELA NUEVA

LA ESCUELA NUEVA

INTRODUCCIÓN.

A lo largo de todo este tiempo ha habido diferentes y variadas formas de educación dependiendo del contexto histórico y socio-cultural en el que se hallaban.

En este trabajo, lo que tratamos es dar a conocer uno de estos modelos, el de La Escuela Nueva, tomándolo como una reacción hacia el modelo anterior.

También desarrollaremos las diferentes características, así como las figuras más representativas de este movimiento, tales como Rousseau, Decroly, Froebel… Además de mencionar el contexto histórico y de observar las críticas que se realizaron en aquella época contra la Escuela Nueva, entre otras muchas cosas.

Y para concluir, mencionar que intentaremos captar la atención y el interés de los alumnos (como defiende este movimiento) mediante la construcción de un mapa conceptual entre todos los presentes.

ANTECEDENTES.

La Escuela Tradicional del siglo XVII, significa Método y Orden.

El maestro es la base y condición del éxito de la educación. A él le corresponde organizar el conocimiento, aislar y elaborar la materia que ha de ser aprendida, trazar el camino y llevar por él a sus alumnos. El maestro es el modelo y el guía, al que se debe imitar y obedecer. La disciplina y el castigo se consideran fundamentales, la disciplina y los ejercicios escolares son suficientes para desarrollar las virtudes humanas en los alumnos. El castigo ya sea en forma de reproches o de castigo físico estimula constantemente el progreso del alumno.

La clase y la vida colectiva son organizadas, ordenadas y programadas. El manual escolar es la expresión de esta organización, orden y programación; todo lo que el niño tiene que aprender se encuentra en él, graduado y elaborado, si se quiere evitar la distracción y la confusión nada debe buscarse fuera del manual.

El método de enseñanza será el mismo para todos los niños y en todas las ocasiones. El repaso entendido como la repetición de lo que el maestro acaba de decir, tiene un papel fundamental en este método.

Posteriormente en el siglo XIX, autores como Durkheim, Alain y Cháteau sostienen que educar es elegir y proponer modelos a los alumnos con claridad y perfección. El alumno debe someterse a estos modelos, imitarlos, sujetarse a ellos.

El maestro simplifica, prepara, organiza, y ordena. Es el guía, el mediador entre los modelos y el niño. Mediante los ejercicios escolares los alumnos adquirirán unas disposiciones físicas e intelectuales para entrar en contacto con los modelos. La disciplina escolar y el castigo siguen siendo fundamentales. El acatar las normas y reglas es la forma de acceso a los valores, a la moral y al dominio de sí mismo, lo que le permite librarse de su espontaneidad y sus deseos. Cuando esto no es así, el castigo hará que quien transgredió alguna norma o regla vuelva a someterse a éstas renunciando a los caprichos y tendencias personales. Para cumplir con esto los maestros deben mantener una actitud distante con respecto a los alumnos.

La filosofía de la Escuela Tradicional, considera que la mejor forma de preparar al niño para la vida es formar su inteligencia, su capacidad de resolver problemas, sus posibilidades de atención y de esfuerzo. Se le da gran importancia a la transmisión de la cultura y de los conocimientos, en tanto que se les considera de gran utilidad para ayudar al niño en el progreso de su personalidad.

En su momento, la Escuela Tradicional representó un cambio importante en el estilo y la orientación de la enseñanza, sin embargo, con el tiempo se convirtió en un sistema rígido, poco dinámico y nada propicio para la innovación; llevando incluso a prácticas pedagógicas no deseadas. Por ello, cuando nuevas corrientes de pensamiento buscaron renovar la práctica educativa, representaron un importante cambio para el sistema; aunque su desarrollo no siempre haya sido fácil y homogéneo, sin duda abrieron definitivamente el camino interminable de la renovación pedagógica.

De ahí la importancia de la llamada Escuela Nueva en sus diversas manifestaciones.

La Escuela Nueva es, pues, un amplio movimiento de renovación pedagógica, de reforma educativa, que se sitúa cronológicamente a finales del siglo XIX y principios del XX, y que se extiende hasta la situación actual. Su ámbito de acción abarca, en un primer momento, Europa y los Estados Unidos, extendiéndose luego. En Estados Unidos, este movimiento tuvo una figura representativa: la del filósofo J. Dewey; sin embargo, en Europa no se puede hablar de una figura dominante.

J. Palacios considera que la Escuela Nueva no se limita a ser un simple movimiento de protesta y renovación, sino que puede considerarse como una verdadera corriente educativa.

Hubo a lo largo de la historia, teorías educativas no tradicionales o renovadoras que bien pueden considerarse como antecedentes de este movimiento. Aquí, hay que mencionar las ideas educativas contenidas en las obras de F. Rabelais, Gargantúa y Pantagruel; de M. de Montaige, Ensayos, y de J. Locke, Pensamientos sobre educación.

CONTEXTO HISTÓRICO-SOCIOCULTURAL

Este movimiento surgió a finales del siglo pasado en busca de la renovación educativa. Ésta hizo un cambio al modificar los ideales (programa y maestro) de la escuela tradicional y poner al alumno como centro de atención en el proceso educativo-didáctico. Es un movimiento práctico que su inicio lo tubo en escuelas privadas pero poco a poco se fueron llevando sus teorías a las públicas de todos los países europeos. Actualmente sus principios siguen en vigencia y están en el estilo y mentalidad del profesor mediador.

En el S.XIX se logró dar forma al nacimiento de los sistemas de escolares, los diferentes países asentaron las bases de los derechos humanos, el derecho de todos a la educación para poder ser iguales, la escuela debía ser obligatoria, universal y gratuita. Los precursores de este movimiento fueron Rousseau, Pestalozzi, Fröbel, Tolstoi y Ellen Key. Influyeron en los avances de psicología, en biología infantil, en la consideración de la

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