LA PRACTICA DE LOS VALORES SU COMPORTAMIENTO E INFLUENCIA EN LA EDUCACION BASICA

“LA PRACTICA DE LOS VALORES SU COMPORTAMIENTO E INFLUENCIA EN LA EDUCACION BASICA”

Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud.

La educación centrada en valores ha adquirido relevancia a partir de la década de 1990 aparejada con el movimiento de reformas educativas, derivando del artículo tercero constitucional, de la ley general de educación y de la declaración universal de los derechos humanos los valores formales para la educación en México y según La Declaración Universal de Derechos Humanos reza en su discurso, como ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como las instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan, mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades, y aseguren, por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento y aplicación universales y efectivos.

La importancia de reconocer los valores fundamentales presentes en nuestra educación básica, sin perder de vista los diferentes intereses del individuo y de su contexto geográfico y social será papel importante propios de los responsables de brindar la información y en nuestro caso de corroborar que esa relación estrecha que se da entre el Artículo tercero, La ley general y Planes y Programas sea impactante en la formación del individuo y cumpla con las expectativas que la misma demanda, es decir un individuo responsable, respetuoso, libre en la toma de decisiones y con una forma de vida incluyente, equitativa y solidaria, democrática y respetuoso de la diversidad y las leyes, así como otros muchos más.

De acuerdo a los rasgos que se pretende reflejen los alumnos en su perfil de egreso en los Planes y Programas, se han establecido competencias para la vida y el tipo de alumno que se espera formar, siendo esto lo deseable para garantizar que le alumno pueda desenvolverse satisfactoriamente en cualquier ámbito y que mediante la movilización de saberes pueda descubrir o reinventar nuevas opciones de solución ante las situaciones cotidianas.

Estando consientes de antemano que una educación en valores es el conjunto de contenidos académicos organizados en planes y programas de estudio destinados a los educandos para el logro de lo antes descrito.

Ante la crisis de convivencia social, producto de falta de la vivencia moral que se observa día a día en la actualidad, a la educación se le fija una nueva responsabilidad; nueva en cuanto a la obligación de profundizar en el cómo asumir el reto de rescatar y educar en valores, pues la necesidad es tan antigua como la existencia del hombre.

No debemos perder de vista que los valores son los que dan colorido a la vida, permitiendo definir al hombre, por ello es necesario llegar a una interiorización de los mismos, mediante la percepción de aquel valor que se requiera trabajar, llegando a la aceptación o valoración, organizándolos o jerarquizándolos y así poder retomarlo como una norma de vida. En nuestra existencia nos hemos dado cuenta que los valores no son innatos, por lo que se requiere darnos a la tarea de inculcarlos, aprovechando la predisposición que el niño tiene para aceptarlos, mediante un proceso donde tomaremos en cuenta su edad o a que grupo de individuos irán dirigidos, para no caer en la práctica de los antivalores a que se encuentran expuestos , ya que como participantes de una sociedad cambiante de acuerdo a intereses individuales se les da el giro que a cada uno conviene.

Por lo anterior, los documentos que rigen la educación básica proponen inculcar a los alumnos los siguientes valores: respeto, honestidad, tolerancia, equidad, justicia, patriotismo, aprecio a la diversidad, igualdad, solidaridad, libertad, entre otros.

El objetivo principal es orientar hacia la utilización, reforzamiento y aplicación adecuada del ser humano en todos los entornos el estudiante mediante el uso de actividades didácticas. La metodología apropiada de participación, reflexión y aceptación personal, supone la construcción del sí mismo autónomo, ya que la educación en valores no puede ser una imposición de modelos o normas, sino una labor de cultivo y participación socializada y guiada por los valores predominantes en la sociedad. La importancia de este enfoque educativo radica no solo en el método, que se debe aplicar de modo didáctico aceptable, sino también en saber que para lograr el desarrollo del juicio moral se debe seguir todo un proceso pedagógico, psicológico y didáctico profundo, para lograr la educación moral mediante la práctica de los dilemas propias de esta.

La Educación en valores desde hace mucho tiempo es la base fundamental de la formación educativa del hombre y la manera de cómo esta influye en el comportamiento y el desenvolvimiento de los individuos, desde edades escolares depende íntimamente de la persona en este caso el docente que lleva esta responsabilidad.

La misma principalmente, se centra en la transmisión y promoción de aquellos valores que facilitan la convivencia entre las personas y que se sustentan en el respeto a los derechos humanos.

Es una cuestión de prioridad a nivel global.

Como resulta lógico, el ámbito académico no permanece al margen de este asunto pues, por ser una tarea de todos, se parte de

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