La Evaluación Inclusiva, La Mejor Estrategia Para Recoger Los Frutos De Los Estudiantes Con NEE.

El propósito de la evaluación debe ser orientar y regular el aprendizaje para que éste sea significativo para los estudiantes. Además, debe ser un proceso que facilite el desarrollo y la realización personal en función de las competencias propuestas.

Para llevar a cabo una evaluación que enriquezca y haga crecer integralmente a los estudiantes, el docente puede utilizar sus cuadernos de trabajo, trabajos grupales, trabajos individuales, actitudes de participación y cooperación entre otras. Es importante que el docente propicie un ambiente de confianza en el cual los estudiantes tengan la libertad de expresar sus dificultades, aceptando que puedan equivocarse en algún momento sin temor a recibir sanciones.

Los indicadores de logro son parte importante de la evaluación ya que son la evidencia de que una competencia está en proceso de lograrse o se ha logrado.

Para que la evaluación sea efectiva, debe realizarse continua y diariamente con instrumentos y procedimientos adecuados de medición para evaluar con mayor efectividad.

A los estudiantes con NEE se les evaluarán, los procedimientos que utilizan para realizar ciertas actividades y las actitudes que manifiestan ante determinadas situaciones, para ello se pueden utilizar las siguientes estrategias:

Listas de cotejo.

Utiliza frases sencillas para comunicarse.

Repite correctamente las palabras.

Realiza distintos movimientos faciales.

La ficha anecdótica

Este es un instrumento que sirve para recoger los hechos sobresalientes en el campo de las actitudes, intereses y motivaciones de los estudiantes. Da una historia de la vida de la persona en la escuela. Ésta es muy recomendable especialmente con los estudiantes con NEE asociadas o no a discapacidad. Cada anécdota debe escribirse en una ficha.

El portafolio

Es una muestra del trabajo del estudiante donde refleja su esfuerzo, progreso y logros. Es una forma de recopilar la información que demuestra las habilidades y logros de los estudiantes. Permite identificar los aprendizajes de conceptos, procedimientos y actitudes. Puede utilizarse en forma de evaluación, co-evaluación o autoevaluación.

Para hacer un portafolio se puede utilizar fólderes o bolsas de papel, en el cual el estudiante colocará los trabajos relacionados con cada área; se debe utilizar uno por cada área del conocimiento.

Al finalizar el período, en forma conjunta maestro y estudiante, clasificarán los trabajos en los cuales se refleje en realidad el desarrollo del pensamiento o destrezas que posee. Para evaluar el portafolio se sugiere utilizar una lista de cotejo.

También se pueden emplear otras estrategias de

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