La Teroia De Juan Jacobo Rosseau
juanalextisnado10 de Junio de 2014
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LA TEORIA DE JUAN JACOBO ROSEAU
1. JUAN JACOBO ROSEAU
Nació en Ginebra, Suiza en 1712 y murió en Ermenonville, Francia 1778. Fue huérfano de su madre desde temprana edad, fue criado por su tía materna y por su padre, un modesto relojero. Sin apenas haber recibido educación, trabajó como aprendiz con un notario y con un grabador, quien lo sometió a un trato tan brutal que acabó por abandonar Ginebra en 1728.
Fue entonces acogido bajo la protección de la baronesa de Warens, quien le convenció de que se convirtiese al catolicismo (su familia era calvinista). Ya como amante de la baronesa, Jean Jacques Rousseau se instaló en la residencia de ésta en Chambéry e inició un período intenso de estudio autodidacto. En 1742 Rousseau puso fin a una etapa que más tarde evocó como la única feliz de su vida y partió hacia París, donde presentó a la Academia de la Ciencias un nuevo sistema de notación musical ideado por él, con el que esperaba alcanzar una fama que, sin embargo, tardó en llegar. Pasó un año (1743-1744) como secretario del embajador francés en Venecia, pero un enfrentamiento con éste determinó su regreso a París, donde inició una relación con una sirvienta inculta, ThérèseLevasseur, con quien acabó por casarse civilmente en 1768 tras haber tenido con ella cinco hijos, los cuales internó en una institución, porque no confiaba en la educación que recibirían con su madre.
Realizó múltiples trabajos, como cantor en la catedral de Annecy y luego como maestro de música en Lausanne. Mantenía su postura en contra de los artificios de la vida civilizada que consideraba indigna. Consideraba a las artes y las ciencias como un adorno de las sociedades civilizadas que se convierten en cadenas que coartan la libertad del hombre. Abogaba por la pureza y la sencillez de la naturaleza destacando la relación entre la decadencia de los pueblos y el progreso de las letras. Vivía respetando sus propias reglas, sin reloj y observando una vida austera y sencilla.
Para este filósofo, la humanidad debe volver a su estado salvaje para recuperar la bondad y sólo debe satisfacer sus necesidades básicas, porque el salvaje desconoce la queja, el desaliento o el suicidio. Defendía la bondad sin vicio del hombre natural que además tiene el sentido de la piedad.
Rousseau trabó amistad con los ilustrados, y fue invitado a contribuir con artículos de música a la Enciclopedia de D"Alembert y Diderot; este último lo impulsó a presentarse en 1750 al concurso convocado por la Academia de Dijon, la cual otorgó el primer premio a su Discurso sobre las ciencias y las artes, que marcó el inicio de su fama. En 1754 visitó de nuevo Ginebra y retornó al protestantismo para readquirir sus derechos como ciudadano ginebrino, entendiendo que se trataba de un puro trámite legislativo. Apareció entonces su Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres, escrito también para el concurso convocado en 1755 por la Academia de Dijon. Rousseau se enfrenta a la concepción ilustrada del progreso, considerando que los hombres en estado natural son por definición inocentes y felices, y que son la cultura y la civilización las que imponen la desigualdad entre ellos, en especial a partir del establecimiento de la propiedad, y con ello les acarrea la infelicidad. En 1756 se instaló en la residencia de su amiga Madame d"Épinay en Montmorency, donde redactó algunas de sus obras más importantes. Julia o la Nueva Eloísa (1761) es una novela sentimental inspirada en su pasión –no correspondida– por la cuñada de Madame d"Épinay, la cual fue motivo de disputa con esta última.
En Del contrato social (1762), Rousseau intenta articular la integración de los individuos en la comunidad; las exigencias de libertad del ciudadano han de verse garantizadas a través de un contrato social ideal que estipule la entrega total de cada asociado a la comunidad, de forma que su extrema dependencia respecto de la ciudad lo libere de aquella que tiene respecto de otros ciudadanos y de su egoísmo particular. La voluntad general señala el acuerdo de las distintas voluntades particulares, por lo que en ella se expresa la racionalidad que les es común, de modo que aquella dependencia se convierte en la auténtica realización de la libertad del individuo, en cuanto ser racional.
Finalmente, Emilio o De la educación (1762) es una novela pedagógica, cuya parte religiosa le valió la condena inmediata por parte de las autoridades parisinas y su huida a Neuchâtel, donde surgieron de nuevo conflictos con las autoridades locales, de modo que en 1766, aceptó la invitación de David Hume para refugiarse en Inglaterra, aunque al año siguiente regresó al continente convencido de que Hume tan sólo pretendía difamarlo. En 1767, con 55 años, volvió a Francia con un nombre falso.
A partir de entonces Rousseau cambió sin cesar de residencia, acosado por una manía persecutoria que lo llevó finalmente de regreso a París en 1770. Escribió sus memorias, las Confesiones, y se dedicó a vivir de sus patrones y lecturas públicas que hacía de ellas. En 1772 Mmed'Epinay, escandalizada por lo que Rousseau relata de su relación con ella, pide a la policía que prohíban tales lecturas. Con una salud mental resquebrajada definitivamente, se alejó del mundo. Aunque siguió escribiendo, el daño que le habían causado los ataques de Voltaire y otros personajes de la época, más su deterioro mental, le llevan a sentirse perseguido y despreciado, apartándose finalmente de la vida publica sin poder aprovechar la fama y el reconocimiento de su obra que inspiraría al romanticismo.
Aunque no sea un filósofo propiamente dicho su pensamiento cobra importancia porque incluye la sensibilidad a la reflexión. Sin embargo sus ideas se oponen a su propia experiencia de vida, ya que demuestra una evidente dicotomía entre su forma de pensar y sus acciones. Rousseau hace una exaltación de la intuición y del sentimiento interior contra las ideas racionalistas de su época.
Retirándose a Ermenonville, Rousseau falleció de un paro cardíaco en 1778, a los 66 años de edad.
2. EL NATURALISMO DE JEAN-JACQUES ROUSSEAU
La educación es un proceso natural, es un desenvolvimiento que surge dentro del ser y no una imposición. Es una expansión de las fuerzas naturales que pretende el desarrollo personal y el desenvolvimiento de todas las capacidades del niño para conseguir una mayor perfección.
Esta educación aspira también a formar al niño como ser social en función del bienestar de los demás. La formación humana pasa a ser una preocupación social. Se piensa en la creación de la escuela para el pueblo, en la educación de la edad infantil con materiales propios y en la importancia de la aplicación de métodos útiles.
El ser humano, siendo esta la idea que mejor encajó en el desarrollo del pensamiento educativo de toda su obra, en la medida en que lo condujo a dedicarse a los problemas relacionados con la educación.
Señalaba Rousseau que en la sociedad estaba el origen de todos los males de su época, aunque algunos pensadores de su tiempo le criticaban el hecho de su despreocupación por los procedimientos que se podrían emplear para terminar o minimizar dichos problemas, pero admitiendo los efectos de la sociedad en que vive, Rousseau propone como alternativa de solución, la vía de la transformación interna del hombre por medio de la educación, de ahí que su papel en el desarrollo de las ideas pedagógicas sea de vital importancia.
Naturalismo, que es el movimiento que afirma que la naturaleza constituye el conjunto de la realidad y puede ser comprendida tan sólo a través de la investigación científica. Negando la existencia de lo supra natural y restándole importancia a la metafísica, o al estudio de la naturaleza última de la realidad, el naturalismo afirma que las relaciones de causa-efecto (como en física y en química) son suficientes para explicar todos los fenómenos. El maestro Rousseau es uno de la propuesta de esta doctrina.
Así pues para Rousseau la educación debe llevarse a cabo desde este Naturalismo, ha de realizarse con la naturaleza.
Principios:
• Creencia en la naturaleza; naturalismo aplicado a la educación.
• Orientación de la creciente capacidad del niño por encima de un programa de estudios.
• La educación se entiende como una creación libre que el espíritu humano hace de sí mismo (idealismo).
• Los sentidos serán la fuente más decisiva para la creación y para el arte (romanticismo).
• Creciente sentimentalismo. Sensibilidad por los valores humanos y estéticos e inquietud por los problemas sociales, como la pobreza.
• Religión natural que no necesita de iglesias ni de clero (deísmo y anarquismo).
Su modelo pedagógico se basa en dos principios normativos: La educación debe llevarse a cabo conforme a la naturaleza y la primera educación debe ser puramente negativa.
En particular, los principios de la didáctica de Rousseau son los siguientes: Enseñar por el interés natural del niño y nunca por el esfuerzo artificial, de ahí resulta que sigan vigentes sus postulados de abandonar todo antes de fatigar al niño y de desgastar su interés inútilmente, siendo preferible que aprenda poco a poco, a que haga algo en contra de su voluntad y libertad.
Educación activa o auto activa, es la ventaja de aprender por nosotros mismos, pues no debemos de acostumbrarnos a una servil sumisión a la autoridad de los demás, sino que, ejercitando nuestra razón, adquiramos cada vez más ingenio para conocer las
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