La angustia

Pienso que día a día, en nuestra vida se presentan nuevas experiencias que nos hacen sentir angustia, desde que abrimos los ojos para iniciar nuestras actividades nos preguntamos ¿qué ocurrirá?, ¿qué sucederá hoy?. Al observar por la ventana las cosas que suceden afuera…. Un señor que camina de la mano de un niño, la señora que corre a tomar el camión, dos personas que discuten una joven apresurada en su bicicleta, el taxista peleando con el chofer de otro auto, el Periodiquero gritando: “encuentran 10 cuerpos a la orilla de la carreta” tal vez angustiados porque el tiempo no les favorece tal vez preocupados por las responsabilidades que tienen.

Nos empeñamos en creer que México no es uno de los lugares más tranquilos para vivir, ni en el que podamos tener una mejor calidad de vida, ver cómo se va corrompiendo la sociedad, y que la inseguridad aumenta, lo que nos lleva a estar angustiados con temor de caminar en la calle y ser sorprendidos por un ladrón, ver como hoy en día la tasa de natalidad aumenta en los jóvenes y niños quienes solo deberían preocuparse por salir a jugar e ir a la escuela sin el temor de que alguien los pueda dañar, ver que los desempleados cada vez son más, y que tienen una familia a quien llevar el sustento, que el consumo de drogas, el alcohol, el tabaco aumenta, ver como hay niños en las calles descalzos sucios sin alguien que se preocupe por cómo viven, la educación escolar, sexual, los valores morales están decayendo mientras los secuestros los homicidios las violaciones aumentan, la angustia generada por la inseguridad y como consecuencia, la impotencia de no poder hacer nada para poder lograr una calma, nos preocuparnos por no saber cómo controlaremos los sucesos que se los presentan, por saber el resultado de algo que nosotros mismos provocamos.

La angustia puede generarse por el miedo a fallar o el temor a no ser aceptados, en la escuela, con los amigos, en el lugar donde vivimos, o con la pareja, existen mil motivos más para pensar en por qué nos angustiamos puede ser la familia quienes nos dan la base para subsistir, el dinero y la falta de estatus o de nivel importante en la sociedad o de la carencia de ello que muchas personas consideran lo principal y que suele apartar familias, grandes amigos o parejas,

Estamos acostumbrados a realizar las cosas por ser aceptados, por temor a ser rechazados y nos olvidamos de nosotros mismos, vivimos con un pánico a decir un “NO” sin culpabilidad; dejamos que las labores escolares, las del hogar, las del trabajo se vayan acumulando y al final la angustia por sentir que no podemos con el cargo que es muy grande.

¿Llegamos a disipar o suprimir nuestra angustia?

Lo cierto es que no podríamos suprimirla puesto que nosotros mismos somos angustia. Jean Paul (Sartre, 1905-1980 p. http://www.literato.es/p/NTI2MA/).

Sin embargo hay personas que no se preocupan por estas situaciones, quienes no se preguntan ¿qué pasa en el mundo donde vivimos? Quienes esperan que los demás resuelvan sus problemas y hagan algo para que su angustia desaparezca.

Las personas nos desenvolvemos socialmente como: hijos, padres, profesores alumnos, amigos, pareja etc., cuando vemos interrumpido ese rol que ejercemos la angustia nos abre paso a las posibles interrogantes sobre ¿qué es lo que Haremos para poder seguir funcionando individual y socialmente?, esa angustia tiene una carga de agobio y de frustración al sentirnos amenazados, por nosotros mismos y por el grupo social en la que encajamos, como dice Freud: “El problema de la angustia en un punto nodal en el que influyen las cuestiones más importantes y diversas; se trata en verdad, de un enigma cuya solución arrojaría mucha luz sobre el conjunto de nuestra vida anímica” (Sigmund F.conferencias a la introducción del psicoanálisis, conferencia 25. Recuperado de: http://www.conflictopsiquico.com/2009_01_01_archive.html)

Considero

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