Liderazgo

DESARROLLO

Barreras que regularmente las mujeres se ven enfrentadas a la hora de incorporarse a cargos de liderazgo.

1. Barreras organizacionales:

Podemos mencionar que conforme mucho a las idiosincrasias de nuestro país, podemos ver que existen organizaciones gubernamentales como las Fuerzas Armadas aún mantienen la idea de que ciertas misiones de liderazgo sean realizadas por el género masculino

Mirando características culturales de estereotipos de género: esta consiste en lo lógico, razonado, establecido, autoritario, fuerte, activo físicamente y baja aversión al riesgo. Por el contrario, la Feminidad implica ser emocional, reflexiva, voluble, obediente, débil, pasiva físicamente y con una alta aversión al riesgo, es por ello que bajo estas concepciones no es raro darse cuenta el motivo de que pocas mujeres llegan a obtener algún liderazgo ya sea este intelectual, político o económico.

El que la mujer adquiera liderazgo organizacional o gubernamental se les impone parámetros más altos debiendo realizar esfuerzos extras si se compara con el hombre, haciéndole presente de forma indirecta o directa que los cargos “no son idóneos para ellas”, que “no cambien su familia por el trabajo”, etc.. muy comúnmente se genera cuando las toma de decisiones en su mayoría son de algún grupo demográfico y van generando barreras para postular o durante el proceso de adquirir un liderazgo.

Asimismo, podemos mencionar barreras como la exclusión como gestiones informales, capacidades determinadas hacia la muer, la poca valoración relacionada con la equidad y discriminación, exposure femenino, poca flexibilidad empresarial, y poca consideración entre lo personal y laboral.

Podemos destacar los prejuicios del hombre, estos se proclaman instintivamente superior con relación a la mujer, creyendo que las mujeres no son capacitadas laboralmente, lo que genera que se les entregue menos responsabilidades de peso, hasta esperar una oportunidad y demostrar sus capacidades.

2. Barreras personales:

En la presente barrera podemos direccionarla a las barreras que van dentro del contexto de las relaciones laborales, en el cual encontramos que lo laboral y personal de la mujer, podemos ver a simple vista la dinámica de la maternidad ya que monetariamente para la empresa es visto como estado de perdida al no encontrarse con disponibilidad absoluta. Aunque hoy con menor fuerza aún se ve evasivas empresariales en invertir en la mujer en busca de su desarrollo, generando que las empresas incurran a las contrataciones a honorarios o de servicio lo cual no los compromete laboralmente y entregando a la mujer menos prerrogativas con relación

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