Matemáticas

Conoce a Tus Alumnos: Identifica sus Propios Estilos de Aprendizaje

por Inge P. Cannon

Los educadores tienen muchas formas de definir y describir las maneras en que la gente procesa información, incluyendo personalidades de aprendizaje, modalidades y estilos. La más sencilla de entender y aplicar contempla tres categorías: los que ven, los que oyen y los que se mueven.

Los que observan (llamados alumnos visuales/espaciales) procesan la información mejor cuando la pueden ver. Los que escuchan (llamados alumnos auditivos) son más eficientes cuando pueden oír la información, y los que se mueven (alumnos cinestésicos o táctiles) funcionan mejor cuando pueden físicamente interactuar con la información de una manera participativa.

Es útil que un padre educador conozca su propio estilo de aprendizaje como también el estilo preferido de cada uno de sus hijos por varias razones:

1. Un maestro tiende a seleccionar un plan de estudios que apela a su propia forma preferida de aprender porque eso es lo más lógico para él. Si los estilos de aprendizaje de los niños son otros, el material quizá no les parezca tan lógico a ellos.

2. Frecuentemente sucede que un material (p. ej., un programa de matemáticas o de fonética) funciona de maravilla para un niño, y por lo tanto el padre piensa que para los hijos subsecuentes deberá funcionar aun mejor puesto que él ahora sabe cómo impartir la materia. ¡Y luego viene la sorpresa! El hijo número 2 o número 3 tiene una “química” totalmente distinta y por tanto requiere de un método diferente.

3. La efectividad de la comunicación (aun entre esposos) se ve favorecida cuando presentamos información nueva o complicada en la manera que el receptor mejor entiende.

Pero la población total del mundo no está dividida en tres grupos de estilos de aprendizaje. Así, pues, algunos niños funcionan muy bien con dos de los tres estilos. Ocasionalmente un niño es igualmente ágil con los tres. Algunas veces las personas necesitan obtener ciertos tipos de información de una manera y otros tipos de información de una manera diferente.

Además, no existe un solo tipo de material “apropiado” o correcto para un determinado estilo de aprendizaje.

Pero sí hay maneras más eficientes y menos eficientes de usar lo que tienes. Si tu hijo no está aprendiendo lo que quieres que aprenda de una manera, intenta otro método. Siéntete en libertad de adaptar los materiales que tienes a los métodos que te ayudarán a rebasar las barreras que tu hijo pueda tener en su mente.

La siguiente lista de control te ayudará a identificar las tendencias de los alumnos de cada grupo. Recuerda que un solo niño no manifestará todas las características de una categoría. Sin embargo, si marcas la mayoría de las características de una categoría podrás confiar en que tu hijo probablemente funciona mejor en esa modalidad por ahora.

Tu objetivo como maestro(a) debe ser el que tus hijos con el tiempo lleguen a sentirse cómodos con las tres modalidades de obtener información. Después de que hayas presentado una idea nueva a través del estilo preferido del niño, repasa el material con alguno de los otros métodos para mejorar la flexibilidad de tu hijo.

Alumnos Visuales/Espaciales (Los que observan)

Tienden a ser callados y frecuentemente necesitan estímulo para contestar preguntas.

Son excelentes imitadores, funcionando mejor cuando “ven” lo que se espera de ellos.

Son particularmente observadores de detalles y frecuentemente pueden encontrar artículos extraviados por otros.

Hacen abundantes apuntes, aun cuando el maestro promete proporcionar resúmenes impresos.

Son personas visualmente organizadas, fácilmente recuerdan dónde están las cosas, y necesitan que todo esté en su lugar.

Pueden armar la mayoría de las cosas sin la ayuda de instrucciones impresas o ilustradas.

Detectan tus errores tipográficos y recuerdan si ya han visto o trabajado en una página antes.

Tienen como una prioridad el estar bien arreglados y llevar colores que combinen.

Están muy conscientes de relaciones espaciales y por tanto son capaces de crear dibujos, diagramas y gráficas correctamente espaciados.

Hacen garabatos en el papel mientras hablan.

Tienden a tener una imaginación vívida.

Tendrán un amplio vocabulario de lectura a temprana edad.

Al tener la opción, preferirían ver televisión o leer un libro en su tiempo libre.

Fácilmente se distraen con estímulos visuales (p. ej., un nuevo periódico mural o un pájaro afuera de la ventana). Responden favorablemente a los incentivos visibles.

Alumnos Visuales/Espaciales Funcionan en Forma Optima Cuando:

Se les enseña con libros y dibujos.

Se les permite resolver rompecabezas difíciles.

El maestro ilustra la habilidad que se está enseñando – demostración.

Se les muestra la palabra antes de que la oigan.

Se les muestra un dibujo del objeto real.

Se les muestra la posición de lengua y labios cuando se están presentando palabras nuevas.

Nota: Si no puedes demostrar al alumno visual el concepto o la habilidad que estás presentando, ayúdale a visualizarlo en su mente.

Trabajan con materiales de auto'comprobación (se revisan solos).

Se les enseña con los siguientes materiales didácticos:

Tarjetas de Repaso, Juegos de Encontrar Pares

Rompecabezas (de todo tipo) y Crucigramas

Diccionarios

Libros de “Cómo Hacerlo” con Diagramas

Cuadernos de Trabajo

Tablas, Mapas, Cuadros, Gráficas

Instrucciones

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