Movimientos Sociales

Lo social y lo político

Social: Referente a la estructura de la sociedad, a su división en clases y a las relaciones de propiedad y producción entre ellas.

Político: Es lo referente al poder y específicamente al poder de adoptar decisiones que afectan a toda la sociedad, pero que no alteren la estructura de la misma, lo social es que concierne a quien debe producir y poseer el pastel y lo político es lo relativo a quién debe decidir cómo se ha de producir y dividir el pastel entre los distintos sectores de la sociedad.

Movimiento social es aquel que se fija por objetivo modificar las relaciones de producción y propiedad que caracterizan una sociedad y movimiento político, el que se propone conservar o modificar las relaciones de poder dentro de una sociedad dada, sin tratar de modificar esta o por lo menos sin fijarse de esta modificación, dicho de otra manera, los movimientos sociales se relacionan con la organización de la sociedad, y los políticos con el gobierno de la sociedad.

En materia de ideologías sociales contemporáneas, existe la derecha o izquierda, la derecha es toda ideología o movimiento de los valores materiales o de valores morales, es decir de cantidad o de calidad y la izquierda se preocupa igualmente de valores materiales y valores morales de cantidad y calidad.

No todos los movimientos son de izquierda con el simple hecho de querer un cambio de la estructura social porque en ellos hay tendencias de que bien pueden calificarse de derechas, una organización que solo se preocupara de conseguir mejores salarios, sería de derechas, como lo sería la que se preocupara de conseguir únicamente un mayor grado de cultura o de libertad, para que sea de izquierda ha de luchar por mejores condiciones de vida y una mayor libertad.

Frente a una sociedad dada pueden adoptarse tres diferentes actitudes:

1) Considerar que la sociedad tal como es, no hay que hacer cambios y solo adaptaciones, a esto se le llama cuando adopta esta posición que es un conservador.

2) Considerar que la sociedad es deficiente, que debe modificarse y que ha de dársele una forma parecida existentes anteriormente, cuando esto ocurre se dice adopta una actitud reaccionaria.

3) Considerar que la sociedad es deficiente y que debe modificarse para darle una forma nueva, que no sea de imitaciones pasadas y que no se inspire en ellas, sino que proporcione soluciones nuevas cuya existencia hace deficiente la sociedad actual, quien adopta esta posición es un progresivo.

Esto quiere decir que puede haber ideologías de derecha y de izquierda, también puede haber ideologías reaccionarias y progresivas.

A todo régimen político que debe su legitimidad a elecciones libres se considera democrático, para que la democracia sea de verdad ha de ser, a la vez, gobierno del pueblo , es decir elecciones libres, y gobierno por el pueblo, es decir participación constante del pueblo en el gobierno y gobierno para el pueblo, es decir sin favorecer a ningún sector social, en toda democracia auténtica tiene que haber, pues libertad y fraternidad e igualdad, ha de ser una democracia política, social y económica.

Cuando se da sólo democracia política, hay electoralismo, pero no democracia auténtica, cuando se da sólo la democracia social, hay demagogia, pero no democracia auténtica y cuando se da solo democracia económica hay paternalismo pero no democracia auténtica.

Los revolucionarios y los rebeldes.

El revolucionario condena la sociedad en que vive y quiere sustituirla por otra, lucha para ponerse en condiciones de aplicar sus propias soluciones y para que los problemas sean resueltos no por élites sino por el pueblo, el rebelde en cambio condena a veces la sociedad en que vive pero con mayor frecuencia condena algunos de los aspectos de esa sociedad, los que le afectan mas directamente y lucha para que le resuelvan los problemas, para que la sociedad, las autoridades, el poder o alguna otra institución resuelva los problemas que denuncia o para resolver él los problemas generales.

El rebelde tiende a la expresión dramática, espectacular, de su protesta, mientras que el revolucionario busca ante todo la eficacia.

El revolucionario quiere una mayor participación del pueblo en el poder y la riqueza; el rebelde suele ser elitista, se ve así mismo como superior, con la supuesta superioridad que le da su rebeldía y cuando más es paternalista.

Todo movimiento, toda ideología, incluso toda postura práctica ante la vida, pueden considerarse bien como conformistas o como inconformistas, según acepten las cosas como son y traten de sacar de ellas el mejor provecho colectivo

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