REFLEXION Y ANALISIS E LA PRACTICA DOCENTE

LA REFLEXIÓN Y EL ANÁLISIS SOBRE LA PRÁCTICA

Docente en formación: Nancy Coello Vázquez

El objetivo principal de todo profesional es el de ser competente en su oficio. Mejorar y progresar en esas competencias, son el resultado de la asimilación de conocimientos y la experiencia: el conocimiento de las condiciones o variables que intervienen en la práctica y la experiencia para dominarla. Para poder conocer la capacidad es necesario auto valorar la práctica y el contraste con la teoría de forma razonada y fundamentada. Sin embargo en la educación no puede hablarse de parámetros fieles, como en muchas otras profesiones, debido a que existen muchas variables que intervienen en el proceso de enseñanza-aprendizaje. En mi experiencia personal puedo decir, que he trabajado con tercer grado de preescolar, en diversas ocasiones y no por ello son compares o pueden aplicarse las mis actividades exactamente igual, ya que infiere desde el contexto familiar y social, hasta la titular del grupo para determinar el nivel madurativo, el ritmo de trabajo, los intereses, las necesidades, etc. Considerando así la profesión docente como un trabajo verdaderamente complejo, pero no imposible.

Por lo tanto es necesario que todo aquel que pretenda enseñar tenga un carácter reflexivo. Como Dewey menciono “La reflexión no consiste en una forma holística de atender y responder a los problemas, es una forma de ser maestro”. Y se demuestra teniendo tres actitudes básicas: mente abierta, responsabilidad y honestidad. Y debe estar marcada en dos marcos temporales como Shon lo explica “sobre la acción y en la acción”, valiéndose de toda teoría previamente adquirida. De esta manera someterse a una constante evaluación, y análisis de los resultados.

Durante este primer periodo de practica en condiciones reales de trabajo, me di cuenta de lo importante que es reflexionar sobre todo lo que observas, ya que muchas veces son esos detalles que dan la pauta para establecer las características y necesidades de los alumnos. Y asi determinar una evaluación de las capacidades que poseen, para conocer desde donde se debe de partir y de qué manera hacerlo. Por ejemplo, cuando realice prácticas en un jardín de niños en el centro de la cuidad pude ver los alumnos tenían un nivel de conocimiento más elevado e incluso un lenguaje más claro. En cambio los estudiantes que conforma mi grupo, no poseen el conocimiento de tantos temas, pero no es porque los primeros sean más inteligentes o tengan más capacidad de aprendizaje, si no que no han sido estimulados de la misma manera dentro de su contextos, a pesar de también ser niños que habitan en la misma ciudad. Por ello las actividades tienen que sufrir un proceso de adaptación, así como las estrategias y la actitud con los niños. Además de reflexionar sobre el trabajo de los niños, aun mas importante lo es meditar sobre la labor que se realiza día a día con ellos. Y así mejor la práctica educativa.

El propósito de reformar constantemente la práctica educativa radica en el hecho que la valoración interpreta lo que realmente sucede en el aula, manifestando los conocimientos y habilidades del docente, conduciendo a una verdadera reflexión sobre su trabajo.

Lo que se busca es recuperar los resultados de toda esa investigación sobre la práctica educativa e incorporar una postura sobre la evaluación de la docencia, en la que se considera necesario vincular la evaluación y sus diferentes dimensiones con el desarrollo profesional del docente. Para que la propuesta sea aplicable, será necesario desarrollar criterios, instrumentos y procedimientos de evaluación vinculados con las diferentes categorías de conocimiento, actuación y eficacia presentados en experiencias pasadas; comprobando los procesos de cambios a los que se somete.

De esta manera concluyo que para poder crecer continuamente se requiere

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