Televisión basura en el Perú
Enviado por Milciadesch • 21 de Enero de 2018 • Monografías • 1.414 Palabras (6 Páginas) • 547 Visitas
UNIVERSIDAD CATÓLICA SEDES SAPIENTIAE[pic 1]
Facultad de Ciencias Económicas y Comerciales
LA TELEVISIÓN BASURA EN EL PERÚ
Presentado por
Milciades Otoniel Chávez Chávez
Para el curso de
Redacción
Lima, junio 2015
Esquema
- Introducción
- Cuerpo de desarrollo
2.1 Etimología
2.1.1 Término
2.1.2 Significado
2.2 Consumo de la TV basura
2.2.1 Talk-shows
2.2.2 Programas de Espectáculos
2.2.3 Realities
2.3 Consecuencias en la sociedad
2.3.1 Pérdida de identidad
2.3.2 Imitación de personalidad
2.3.3 Pérdida de autoestima
2.3.3.1 Niños
2.3.3.2 Adolescentes
2.4 Cómo evitar el consumo de la TV basura
2.4.1 Educando en casa
2.4.2 Matriculando en talleres a los niños
2.4.3 Promover talleres culturales
2.4.4 Organizando marchas contra la TV basura
- Cierre
La televisión basura en el Perú
La televisión es un medio de comunicación de masas que se integra en la mayoría de los hogares peruanos. No existe distinción, llega a ricos y pobres, es considerado un fuerte medio porque integra imágenes. Sin embargo, por poseer esas características y por tener la facilidad de llegar a la mayoría de la población, se ha transformado en un arma de doble filo en los adolescentes por la calidad de programación que se transmite, sin considerar que, en la mayoría de los casos, sus espectadores son niños y adolescentes que no tienen un adulto que los oriente en relación a los temas que allí se desarrollan. A continuación, se detallará más información sobre “televisión basura”, el consumo de TV en el Perú, cuáles son sus consecuencias en la sociedad y cómo evitar el consumo su consumo.
El término “telebasura” (“junk TV” en inglés) se popularizó en España alrededor de 1993. En el 2001, ingresó al DRAE con este genérico significado: “Conjunto de programas televisivos de muy baja calidad”. En el Perú, preferimos separar las dos palabras y decir “televisión basura”, aludiendo a “talk-shows”, noticieros sangrientos, programas de espectáculos y, más recientemente, “realities” de competencia como “Esto es guerra” y “Combate”. Estos programas difunden contenidos que atentan contra los derechos a la identidad e intimidad personal y familiar de los niños, niñas y adolescentes.
Según Hugo Landolfi, filósofo argentino,
La TV basura es demagógica por definición pues “da a las masas de televidentes lo que la mayoría de ellos desean recibir”. ¿Desean contenidos sexuales y chabacanos? Se los damos. ¿Desean programas donde no tengan que esforzarse en absoluto? Se los damos. En esto radica esencialmente la ausencia completa de valor que posee este tipo de televisión que busca captar audiencia masivas (para engrosar los bolsillos de los empresarios televisivos a través de la venta de publicidad en esos espacios) realizando constantes estrategias de demagogia televisiva generando contenidos de nulo valor para seres humanos que se precien de ser tales (LADOLFI, 2007).
Por otro lado tenemos que Pettinato, citado por Arboccó y Arboccó en el 2012, define a la televisión basura como «la forma cretina que tiene el medio de crear programas mediocres que miden tu incultura y tu desgracia para igualarla, y jamás potenciar lo bueno de esta vida» (PETTINATO, 2009).
La televisión, además de ser un medio de comunicación, es un medio de entretenimiento, ya sea para los niños, la familia o para los adultos, por lo que siempre se está renovando con el objetivo de no perder a sus clientes.
«La televisión busca, de manera constante y hasta obsesiva, convertirse ella misma en objeto prioritario de consumo» (PRATS, 2007). Esto nos dice que la televisión siempre está buscando nuevas maneras para que sea consumida, en otras palabras, atrapar al televidente.
La incorporación de talk-shows, programas de espectáculos y de los realities como “Esto es Guerra”, “Amor Amor Amor”, “Espectáculos”, “A las Once” a la programación televisiva peruana ha fomentado que el consumo de televisión incremente, ya que esta forma parte de la vida diaria de los peruanos y está presente en casi todos los hogares. Además, es la preferida dentro de los medios de comunicación. Según un estudio realizado por el Consejo Consultivo de Radio y Televisión (Concortv), el consumo de televisión se ha incrementado hasta las 3 horas y media, un incremento promedio de 45 minutos a comparación de dos años atrás.
La cruda morbosidad se ha convertido en el pilar de muchos programas de TV con contenidos banales, ordinarios y de mal gusto que están en la frontera de lo éticamente permisible. La “TV basura” es un problema tan grave como el terrorismo o las drogas ya que destruyen la vida trascendente del ser humano. Es en la “TV basura” donde se busca el crecimiento de la audiencia a través de la provocación directa de los instintos, las pasiones y los sentimientos del espectador. Provocando muchas veces la pérdida de identidad, Imitación de personalidad o pérdida de autoestima en niños y adolecente.
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