ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Teoría de los movimientos sociales.


Enviado por   •  26 de Mayo de 2016  •  Reseñas  •  2.368 Palabras (10 Páginas)  •  380 Visitas

Página 1 de 10

Julián Torres Franco.

Teoría de los movimientos sociales.

Análisis documental: “La toma”.

El movimiento de recuperación de fábricas en Argentina: una mirada desde la teoría de movilización de recursos.

A la hora de analizar el caso particular que supone la recuperación de empresas en Argentina, tal y como lo deja patente Naomi Klain, en su documental “la toma”, se observa una mirada amplia que esboza diferentes elementos de carácter históricos, políticos y económicos; con los que a partir de un caso testimonial (forja de autopartes San Martin) da un vistazo a todo un proceso de construcción de uno de los movimientos sociales, que bajo su acción detentan una alternativa de producción (auto gestionada), que no duda en oponerse y resistir frente a las lógicas impuestas por políticas económicas de carácter neoliberal, que desde décadas atrás han azotado la realidad del pueblo Argentino. Ahora bien, bajo este panorama la intención del escrito presentado a continuación busca generar un acercamiento a la realidad presentada por Klain, desde la configuración de movimientos de recuperación, a partir de algunos supuestos básicos propios a la teoría de la acción colectiva y los movimientos sociales, propuestos por el sociólogo Sydney Tarrow. Esta mirada complementa la visión general del proceso mismo que caracteriza al fenómeno en cuestión, caracterizándolo a partir de categorías como: estructura de oportunidad política,  marcos culturales, redes, repertorios y tipos de acción colectiva; elementos que permiten ahondar en el contexto y el desarrollo del mismo.

Elementos constitutivos al proceso de configuración del mov. De recuperación de espacios de producción.  

El telón de fondo al surgimiento de los mov. de recuperación, viene dado por una continuidad histórica específica a Argentina: la ejecución de políticas económicas de carácter neoliberal, que darán inicio a finales de los años 70’s en medio de la dictadura de corte militar que llegara hasta los primeros decenios de la década de los 80’s. Lejos quedaba aquella Argentina utópica de los años 50’s, aquel sueño paradisiaco que buscaba forjar al país como potencia latinoamericana, atrás quedaba aquel país que despuntaba en la realización de obras públicas y que vivía de una apertura económica fuerte bajo la incipiente y fuerte economía industrial que apostaba al desarrollo y progreso de una clase media más que prospera. Este idílico paisaje se desdibujaría frente al obscuro y largo periodo que supuso el proceso de la dictadura militar, momento en la historia argentina que supone el endeudamiento externo, al igual que la suspensión del proceso de industrialización; elementos que llevaron al inicio de una realidad que se mantendría y replicaría aun en pleno siglo XX: la concentración de pobreza y el incremento de desempleo para las capas medias y bajas, por un lado, y la acumulación desmedida de recursos para las capas pertenecientes a las elites de la sociedad Argentina.  

Para fines de la década de los 80’s llegaría a la presidencia Carlos Menem, evento que supone la aplicación de un conjunto de políticas de corte neoliberal, apoyadas y sugeridas por el FMI (fondo monetario internacional) en donde se impulsaba la privatización, la descentralización, la desregularización económica o la negociación de la deuda externa. Estas medidas llevarían al país a entrar en un momento de desequilibrio total, en donde las problemáticas de desigualdad, desempleo, la quiebra del sistema productivo nacional (incapaz de competir con la producción extranjera) condensaran el escenario perfecto para el descontento social, el país en quiebra bajo lógicas neoliberales vaticinaba los eventos que acontecerían en el 2001 y que llevarían a la conocida crisis argentina. Este momento final, supondrá el escenario a un país en quiebra, un estado acéfalo, sin capital para pagar la deuda externa, la confiscación y congelación de cuentas bancarias de los individuos, el cierre de empresas e industrias; el escenario ideal estaba dado la crisis vivida por los argentinos llevara a medidas extremas e innovadoras, aquí entra en escena el movimiento en cuestión: la ola de recuperaciones de fábricas iniciaba su camino.  

La génesis del movimiento obedece a las condiciones históricas acontecidas en la sociedad Argentina, el 2001 supone un momento coyuntural en términos de levantamientos sociales frente a la realidad política, económica y social vivida por las nefastas consecuencias de un modelo neoliberal. Para el fenómeno en cuestión las implicaciones de dicho modelo llevaran a que muchas de los inversionistas empresarios del país se vean en la obligación de cerrar sus fábricas ante un ambiente económico en caída y que no ayudaba en nada a mantener unas condiciones favorables en la producción, de ahí que una práctica generalizada en ese contexto fue el simple hecho de despedir a los trabajadores a la vez que se cerraban pequeñas, medianas y grandes fábricas; con lo cual sellaban el destino de miles de empleadores del sector industrial que caían presas del depredador sistema neoliberal que consumía al país en general, o al menos eso parecía…

Ante la “irremediable” realidad que acogía a los empleados que eran despedidos sin más, y la imperante necesidad de velar por sus familias, necesidades y dignidad (este último configura uno de sus marcos culturales) como trabajadores, se emprende un movimiento (bajo el objetivo común) que busca un “resurgir”, en términos referidos a la recuperación económica que se da por la acción conjunta de “tomar” y “ocupar” aquellos espacios que solían ser lugares de trabajo cotidiano.            

Esta acción en un primer momento se da bajo la idea de ocupar un espacio, evitando que el dueño venda parte de la maquinaria o material, pero la organización que se va estructurando internamente lleva a un nuevo planteamiento fundamental: el reactivar la fábrica y tomar el rumbo de la producción como colectivo (configurándose como elemento fundamental de su repertorios tradicionales). De esta manera la organización interna se centrara en vislumbrar la forma de reactivar la función productiva de las fábricas, hecho que sucinta el objetivo fundamental de mantener el espacio de trabajo.

Este proceso organizativo genera que se vayan configurando formas de asociación como lo son las “cooperativas”, hecho que devela en los trabadores un paso más allá, al solo ofrecer resistencia desde la ocupación y que se manifiesta en la intención de ellos como colectivo organizado (bajo la figura de cooperativa) asuman el control total de la fábrica, en otras palabras reconfigurar antiguas lógicas dadas por el modelo capitalista (dueño/proletario, propiedad privada/propiedad colectiva) dando así como resultado una forma emergente de economía. Se debe comentar que si bien es un modelo de acción a contemplar, cada fabrica que se busque sumar a la recuperación supondrá un caso particular dentro de un conjunto de ejemplos establecidos, si bien las fabricas recuperadas previamente consolidadas están dispuestas a orientar y prestar asesoría a sus compañeros de lucha (estableciendo de entrada lazos de solidaridad), la acción como tal depende del grupo en cuestión, así como será la administración de la misma.    

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (15 Kb)   pdf (101.8 Kb)   docx (13.4 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com