Tesis vaors

3.2.2 INFORMACIÓN DEL TEMA.

Los valores son principios que orientan las acciones de las personas hacia su realización plena y hacia una convivencia social armónica, por ello decimos que son ideales que nos marcan retos para la vida diaria, en cada actividad que realizamos y en cada relación que establecemos con los demás. “Existe un conjunto de valores sociales compartidos que son producto del desarrollo de nuestro país y de la humanidad, mismos que apuntan hacia los aspectos positivos que se desea desarrollar como personas”,^[1] así mismo los valores son el grupo de cualidades que hallamos en el entorno. Los podemos encontrar de muchos tipos y verlos desde diferentes enfoques: pueden aparecer en el mundo natural, en la creación artística y dentro del sistema de gobierno vigente en un país. El reforzar valores día a día  nos ayuda en la vida cotidiana para  elevar nuestra calidad de vida en la medida en que responden y favorecen a la dignidad del ser humano.

Ya decíamos que los valores biológicos están relacionados con el desarrollo físico y emocional de nuestro cuerpo; se vinculan, por ejemplo, con medidas para preservar la salud y el bienestar general. Los valores intelectuales se refieren a las actividades de investigación y aprendizaje que impulsan el desarrollo mental y nos conducen a la comprensión del mundo. Los valores estéticos nos acercan al disfrute del mundo y al reconocimiento de su belleza. En esta clasificación, los valores morales sintetizan y hacen posible los otros valores al garantizar una convivencia sana, amistosa, en la que todos pueden conseguir su máximo crecimiento a la par del propio.

Por eso es que insistimos: para que los seres humanos podamos darnos cuenta y no confundirnos con el tratamiento de los valores: no es el sentido de darles un porcentaje o una cantidad a las cosas, es necesario trabajar en ellos, dejar bien claro el significado de la palabra valor como normas y reglas que rigen las actitudes positivas del individuo, pero que nacen de él o se internalizan en él, sin que llegue a cumplirlas por el hecho mismo de que son reglas obligatorias que hay que seguir, sino basadas en su convencimiento, en el sentido de que le habrán de hacer más bien que orientarlo a la práctica de los “antivalores”

Es muy común encontrar que los niños y hasta los adultos se confunden o bien no conocen realmente el significado que tienen cada uno de los valores. Para comprobar esto, se tuvieron que realizar diversas actividades, en una se trabajó en que los niños redactaran lo que entendían por un determinado valor, ellos mismos los mencionaron, y posteriormente dibujaron una acción positiva del valor que se trataba en ese momento y una acción negativa, que vendría siendo el antivalor. Por sí solos y sin haber hecho comentarios sobre el significado de cada valor propuesto, cada uno escribió lo que entendían de ello, de esta manera es como nos dimos cuenta de que la mayoría de los niños tienen la idea del significado que tienen los valores y para qué nos sirven, solo que muchas veces para llevarlo a la práctica es difícil correlacionar su significado con las acciones que se realizan. Se han llevado a cabo actividades de integración, análisis y discusión como la representación de escenas cotidianas, donde posterior a la actividad cada uno da su opinión sobre algún caso en donde se ve reflejada la falta o pérdida de valor en las acciones de las personas y al mismo tiempo se define de qué valor se trata y su significado.

“Se entiende por valor moral todo aquellos que lleve al hombre a defender y crecer en su dignidad de persona. El valor moral conduce al bien moral. Recordemos que bien es aquello que mejora, perfecciona, completa”.^[2] El valor moral perfecciona al hombre en cuanto a ser hombre, en su voluntad, en su libertad, en su razón.

Se puede tener buena o mala salud, más o menos cultura, por ejemplo, pero esto no afecta directamente al ser hombre. Sin embargo vivir en la mentira, el hacer uso de la violencia o el cometer un fraude, degradan a la persona, empeoran al ser humano y lo deshumanizan. Por el contrario las acciones buenas, vivir con la verdad, actuar con honestidad, el buscar la justicia, la perfeccionan. El valor moral nos lleva a construirnos como hombres, a hacernos más humanos.

En este caso se ha podido comprobar que los niños aprenden imitando a las personas de mayor edad, tal es el caso de la imitación que hacen los hijos de sus padres, como cuando los niños dicen qué quieren ser de grandes, o qué música les gusta, sus respuestas dependen de lo que aprendieron en casa, lo que sus padres le dicen o lo que observan dentro de su hogar.

Al llevar a cabo la actividad con los niños sobre mencionar o dar ejemplos de manera verbal, de lo que observan en casa, y de clasificarlo en lo bueno y lo malo, pudimos percatarnos de esas cuestiones, muchos de los niños mienten como lo hacen sus padres, pero podemos preguntarnos y hasta los mismos padres se preguntan que de dónde lo aprenden, pues la respuesta la tienen ellos mismos, lo aprenden de casa, observándolos a ellos.

Estos valores perfeccionan al hombre de tal manera que lo hacen más humano, por ejemplo, la justicia hace al hombre más noble, de mayor calidad como persona. Un valor cobrará mayor importancia en cuanto logre perfeccionar al hombre en un aspecto más íntimamente humano. Pero este esfuerzo de transformación de la personalidad depende exclusivamente de la elección libre, el sujeto debe decidir alcanzar dichos valores y esto sólo será posible basándose en el esfuerzo y perseverancia. El hombre actúa como sujeto activo y no pasivo ante los valores morales, ya que se obtienen basándose en el mérito propio.

Varios autores han aportado importantes investigaciones sobre de la conducta social, en los niños la buena conducta se debe fomentar desde temprana edad mediante actividades sencillas dentro del hogar y reforzar dentro del aula aquellas que son inculcadas para la adquisición de hábitos adecuados que regulen el comportamiento y nuestras acciones en la vida diaria, cabe señalar como menciona Medrano (1996) “la disciplina no es un objetivo educativo en sí misma, sino es un medio para alcanzar otros objetivos.”^[3]

Nuestra sociedad está inmersa en la violencia; como toda sociedad de clases, se establecen relaciones de poder entre dominadores y dominados, donde aparece la opresión, el autoritarismo y la discriminación, la violencia se ha hecho algo tan cotidiano, al punto que sólo consideramos como tal, la agresión física, los atentados contra la propiedad y agresiones verbales; esto lo observamos a diario en los medios de comunicación, la violencia doméstica pertenece a la esfera privada de cada individuo, pero no por ello es menos importante, ya que en nuestras aulas, podemos observar el reflejo constante de la comunidad, vemos niños que viven en un clima violento en sus casas, donde es muy probable que ellos mismos sean las víctimas y lo reflejan en su comportamiento y mala conducta en el aula, “Aristóteles señalaba: "practicando las acciones justas llegamos a ser justos y practicando las acciones moderadas llegamos a ser moderados",^[4] Cuando logras una buena conducta en tus acciones cotidianas, con tu familia, en la escuela y en la comunidad, no hace falta que te vigilen y controlen, tú mismo estás al pendiente de cumplir lo que te corresponde, con la disciplina desarrollas la capacidad de ejercer control de tus deseos, carácter, emociones, lenguaje y actitudes, comportamiento etc., todo esto te ayudará a conseguir las metas que te has trazado, el castigo a una falta de conducta, debemos tener claro que el objetivo de este, no es castigar, sino enseñar, por eso la manera de enseñar valores de conducta varía con la edad, ya que la capacidad de razonamiento de un niño pequeño no es la misma que la de un adolescente.

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