Un Mundo Para Julius

UN MUNDO PARA JULIUS

I.-EL PALACIO ORIGINAL

El primer capítulo habla acerca de la vida de Julius en el “Palacio original”, que es su primer hogar, hasta antes de que su madre, Susan, se volviera a casar y quisieran tener un nuevo lugar para empezar todo de nuevo. En esta casa murió el padre de Julius, todo se sentía muy triste en esa época, y su mama lloraba a escondidas en el cuarto, y además empezó a salir muy seguido para no deprimirse. Julius quería mucho a su madre, sin embargo pasaba mucho tiempo con la servidumbre (tenía una nana llamada Vilma que lo cuidaba), ya que sentía que ellos realmente lo entendían, además él tenían tres hermanos; Santiago, Bobby y Cinthia, de los cuales Cinthia era la que le demostraba mayor comprensión y cariño. Julius, aunque era un niño muy intuitivo, tardó mucho en darse cuenta que algo andaba mal con su hermana Cinthia, que siempre estaba tosiendo y le daba mucho frío. Susan se preocupaba mucho por ella, así que decidió llevársela a Estados Unidos, para que la tratara un doctor. Cuando fueron al aeropuerto a despedir a Susan y a Cinthia, Julius y sus hermanos se dieron con la sorpresa de que su mamá estaba acompañada por un hombre que le cogía la mano y estaba con ella en todo momento. Julius se imaginó que é era el hombre con el que Susan salía todas las noches a bailar. Al fin la despedida fue muy triste y luego de esto se fueron a casa. A los pocos días de haberse ido, llegaron cartas de Cinthia y de Susan dirigidas a Vilma para que se las leyera a Julius, y en ellas decía que estaban atendiendo a Cinthia en los EE.UU y que no se preocupara porque todo estaría bien. Desgraciadamente no fue así, y los tíos de Julius (Juan y Susana Lastarria) fueron a la casa para dar la mala noticia del fallecimiento de Cinthia. Susan regresó a Lima con Juan Lucas, el hombre que la había acompañado en el aeropuerto y que luego se había ido a los EE.UU para acompañarla, para enterrar a Cinthia en Lima. Todo fue muy triste y Susan no soportaba el dolor de estar ahí y seguir recordando a Cinthia siempre. Así que decidieron ir a Europa con Juan Lucas, Bobby y Santiago, querían llevar a Julius, pero luego de un examen médico, el doctor no les había recomendado llevárselo a Europa por el clima frío de halla y que le recomendaba un clima más cálido, como el de Chosica. Así que se fueron a Europa y enviaron a Julius con las demás personas de la servidumbre a la hacienda de Chosica. Ahí pasó Julius una temporada hasta que el doctor les dijo que Julius ya estaba bien del ojo bizco que tenía y podía regresar a Lima. Durante su estancia en Chosica Susan le había enviado cartas a Julius, diciendo que todo en Europa era muy bonito y que la próxima vez irían con él. Luego siguieron llegando más cartas, hasta que en una de ellas Susan le informó a Julius que se había casado con Juan Lucas. Cuando regresaron a Lima Julius se puso muy contento, pero también empezaron a surgir muchos problemas porque Santiago ya estaba más grande y Vilma había sido víctima de sus deseos, por lo que habían tenido que despedirla y Julius se había puesto muy triste, cuando se fue le escribió una carta, que claro, ella nunca contesto, y que años más tarde él se había puesto a pensar que una carta escrita por un niño de cinco años jamás llegaría a su destino.

II.- EL COLEGIO

Luego de haber estado durante mucho tiempo en casa en incluso de estar atrasado en el colegio, porque los de su edad ya estaban en el colegio (en cambio Julius tuvo clases particulares con la Señorita Julia para poder nivelarse) Julius finalmente se fue al colegio. Su colegio se llamaba Inmaculado Corazón, donde conocía a muchos chicos de su edad y todos eran adinerados, excepto un chico llamado Cano, del que todos se burlaban todo el tiempo, porque mientras a los demás los llegaban a recoger en camionetas, el se iba caminando a su casa y encima de todo lo fastidiaban también porque era huérfano y solo vivía con su abuelita, él trato de unirse a los demás chicos, pero por más que quiso no pudo. Julius conocía a chicos como; el gordo Martinto, Silva, Arzubiaga y otros más. Julius era muy buen amigo con el gordo Martinto, con quien siempre jugaba a las espadas, y hasta un día lo invitó a su casa, pero luego en el colegio se habían peleado, porque Julius le tiró tierra en los ojos al Gordo, y este le había pegado con una ramita, después se disculparon los dos, pero ya nada volvió a ser lo mismo, además que el gordo Martinto había repetido de año y ya no hablaban tanto como antes, además que el gordo ya tenía nuevos amigos. En el colegio les enseñaban muchas monjitas que eran muy buenas todas, menos una a la que la llamaban zanahoria, que se molestaba por todo. Todas estas monjitas eran americanas y pronunciaban muy gracioso el español. A Julius le enseñaba a tocar el piano una monjita muy buena que se llamaba Mary Agnes. Cuando el entraba al salón para comenzar sus clases era como si un aroma delicioso lo embargara, sentía ese deseo de seguir tocando, y lo hacía con sentimiento porque había algo especial en ese aroma y además la madre Mary Agnes era tan linda y buena que no podía dejar de quererla ni un solo instante. Luego había sido la primera comunión de Julius y Juan Lucas había tenido que ir obligado para acompañar a Susan. Todas las monjitas felicitaron a Susan porque Julius era un niño muy estudioso y bueno, y además le comentaron que tenía habilidades para tocar el piano. A fin de año, llegaba la clausura del año escolar, y Susan había tenido que ir sola porque Juan Lucas no quiso volver a meterse en esas cosas. Susan se dio con la sorpresa de que Julius se había graduado como uno de los primeros de su clase y que además de eso iba a haber una interpretación de piano por los mejores alumnos del colegio, entre los que también estaba Julius. Además de todo esto, Juan Lucas le había dicho a Susan que tenían que mudarse a otra casa para poder empezar una nueva vida juntos, y aunque a ella al principio no le pareció una buena idea luego acepto y hasta se emocionó con la compra de nuevos muebles para la nueva casa. Se aproximaban las vacaciones de verano y Julius se la había pasado ensayando su preludio para el recital de fin de año y Susan inmersa en sus antigüedades para la nueva casa. Habían decidido pasar el tiempo que faltaba para que este lista la casa en el country club, y luego de una larga discusión Juan Lucas llego a la conclusión de que debían despedir a Nilda, que ella no debería ir a la nueva casa, y aunque a Susan le dio mucha pena, así fue, y Nilda se fue llorando y se despidió de Julius con su hijo en brazos, y aunque Julius percibía un olor raro en ella igual le daba pena que se fuera, porque ella había sido dentro de todo

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