Ventajas y desventajas del fideicomiso

Ventajas y desventajas del Fideicomiso

Introducción

A lo largo de la historia jurídica, civil y mercantil de las naciones, muchas figuras legales han aparecido como partes reguladoras y protectoras de la riqueza de las empresas y personas naturales de la sociedad. En este sentido, es importante mencionar el protagonismo de un contrato legal en especifico denominado FIDEICOMISO, misma que se constituye como un instrumento ideal, seguro y eficaz para encargar o ceder derechos patrimoniales a una tercera persona denominada fiduciario, que será la encargada de administrar, salvaguardar y gestionar dichos recursos entregados.

Siendo una figura jurídica presente en el ámbito civil y mercantil tiene un propósito claro con enfoque de alta moral, ya que se basa en principios fundamentales de las sociedades, como son la confianza, la honra, la honorabilidad y la integridad. El fideicomiso tiene sus orígenes en el derecho romano, piedra angular del desarrollo de la justicia en materia de jurisprudencia, ya que se comprende acciones legales basadas en la buena fe de las partes que lo conforman. A continuación, se presentan algunas posturas de reconocidos autores respecto a la definición de este concepto.

El fideicomiso implica la transferencia de bienes o servicios de una persona a favor de otra para cumplir un fin determinado. Los activos entregados en fideicomiso dejan de pertenecer a la persona que lo crea y quedan afectados exclusivamente al fin al cual son destinados. (Hernández, et al.,2004, pp.14-15)

Como lo expresa el autor, un contrato de fideicomiso o fiduciario representa ceder bienes o derechos a una persona que puede ser jurídica o natural y que por tanto será el nuevo titular de lo pactado en el contrato de fideicomiso.  En tanto que para Elker Mendoza, desde otra perspectiva lo define como:

Jurídicamente el fideicomiso no es una sociedad, ni civil ni mercantil, es una ficción jurídica capaz de ejercer derechos y contraer obligaciones a través de su fiduciario, solamente para efectos tributarios es considerado sociedad, porque la consideran una unidad económica independiente conforme el artículo 98 ley orgánica de régimen tributario interno. (2011,p.239)

Desarrollo

Una vez conocida la naturaleza de un fideicomiso es importante mencionar que tiene sus pro y contras que por un lado pueden ser bastante beneficiosas para las partes contratantes o caso contrario causar graves afectaciones. A continuación, se detallan las ventajas más representativas a criterio propio.

Una de las primeras ventajas de los fideicomisos que podemos exponer es que se constituye como un patrimonio protegido o fideicomitido, por tanto, no pertenece a ninguna de las partes contratantes del fideicomiso, lo que deriva en que el patrimonio no sea blanco de los acreedores puesto que se denomina autónomo, libre de riesgo. Desde el punto de vista ético esta figura legal puede considerarse útil en situaciones dificultosas como parte de garantías y cumplimiento de una obligación, en este caso el deudor debe transferir sus derechos a su acreedor pactando el tiempo prudente para cancelar dicha obligación o caso contrario se ejecuta la garantía en beneficio del prestatario para recuperar el dinero prestado. A diferencia de una hipoteca este tramite resulta mucho más fácil ya que elimina algunos trámites engorrosos de los procesos hipotecarios.

Por tanto, el fideicomiso no solo funciona como aislante o minimizador del riesgo, sino que adicional sirve como herramienta útil para negociar créditos sin intervención directa de entidades financieras, además de que se asocia un beneficio interesante como son menores tasas de interés y compromisos financieros. También se asocia a una mejora de toma de decisiones sobre la protección patrimonial de las empresas en general.

Desde la perspectiva tributaria, todos aquellos derechos, activos, bienes raíces entre otros, pueden gozar de ser exentos de tributación o impuestos en muchos Estados, sin embargo, esta ventaja tributaria no aplica a la legislación ecuatoriana, ya que esta cataloga al fideicomiso como una sociedad más, por lo que dentro de sus deberes formales si se encuentra el pago de impuestos, como el IR (Impuesto a la Renta). Así lo estipula el art 98 de la ley de Régimen Tributario Interno, que no exceptúa a los patrimonios autónomos carentes de personería jurídica fuera del pago de tributos, en este sentido, se considera como una de las desventajas de esta figura legal en nuestro país para los inversionistas y beneficiosa para el Estado ecuatoriano, ya que percibe ingresos provenientes de estos contratos.

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