Casas abandonadas

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• Introducción.
• La problemática de las casas abandonadas en la ciudad de Mexicali es una situación que  se ha ido incrementando a lo largo de los últimos años, ya sea por falta de dinero para pagarlas o por la misma inseguridad en las zonas donde fueron construidas. Las familias han decidido emigrar y buscar otros horizontes más prósperos para vivir.
• Hoy en día en Mexicali existen alrededor de 340 mil 776 casas registradas, de las cuales hay más de 100 mil que están deshabitadas, lo que  origina otros problemas como la delincuencia, pues las habitaciones abandonadas dan pie para convertirse en picaderos o centros de reunión de delincuentes, que al mismo tiempo atrae vandalismo y robo. Sin embargo la problemática no se debe en su mayoría al abandono por parte de las familias; la falta de planificación de los fraccionadores encargados de construir las casas y su ignorancia hacia los reglamentos de construcción han afectado de tal manera que por buscar una manera más económica de construir más aunque esta no refleje calidad, han dado como resultado viviendas mediocres para la vida de las familias.

Mexicali: del desarrollo inmobiliario al abandono.

Durante la primera década del siglo XXI, las administraciones municipales dieron permisos a las constructoras para que edificaran un alto número de viviendas en las zonas periféricas de la ciudad. Las constructoras hicieron un alto porcentaje de viviendas para las familias que se encontraban en zonas céntricas del área urbana, las cuales estaban repletas de viviendas viejas y de colonias inseguras. En el primer plano, parece que la idea de ir a otra zona de la ciudad nueva y segura era atractivo para las familias.

El problema surge en varias etapas, y por distintas responsabilidades. En primer lugar, la legislación flexible por parte del ayuntamiento hacia las constructoras generó una alta construcción de viviendas, sin hacer los estudios adecuados en materia de demografía y de economía. Por ejemplo, si hay una demanda alta para esas viviendas, o si la demanda es poca, son factores básicos a analizar. Ni las constructoras ni el ayuntamiento lo hicieron.

Otro problema es que las constructoras fabrican viviendas a bajo costo, lo que genera la creación de viviendas minúsculas, que no tienen el espacio suficiente para alojar a una familia convencional. En estas viviendas, con trabajo caben dos personas cómodamente. Las viviendas de la zona urbana principal de Mexicali son mucho más amplias y con terrenos más grandes.

Para incrementar los problemas, la mancha urbana es muy extensa, por lo que los centros de trabajo están lejos de las nuevas casas. Aunado a esto, el Ayuntamiento no ha creado vialidades suficientes ni vías rápidas que garanticen una rápida llegada de un punto de la ciudad a otro. Entonces, esto motiva menos a las personas a adquirir viviendas en estas zonas retiradas.

En los recientes años, las constantes crisis financieras, la inflación y el poco crecimiento laboral, han generado que los trabajadores comunes tengan menos poder adquisitivo o que de plano pierdan sus empleos. Los créditos que vieron accesibles de pagar cuando estaban en condiciones económicas favorables, ahora resultan impagables por parte de los empleados. Esto genera que abandonen sus nuevas casas y que retornen a la zona urbana principal de Mexicali, en donde si podrán pagar un lugar digno para vivir, o inclusive regresar a sus viejos hogares donde ya estaban establecidos anteriormente.

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