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Desarrollo de estrategias que permitan a la población adolescente, la adquisición de valores que fortalezcan e incentiven a la juventud a un desarrollo óptimo en beneficio de una convivencia con calidad en el municipio de Sabaneta

sociedad123Informe14 de Mayo de 2017

4.322 Palabras (18 Páginas)515 Visitas

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                Escuela de Ciencias Sociales Artes y Humanidades

                                Programa de Psicología

                        Curso de Diseño de Proyectos Sociales

"Desarrollo de estrategias que permitan a la población adolescente, la adquisición de valores que fortalezcan e incentiven a la juventud a un desarrollo óptimo en beneficio de una convivencia con calidad en el municipio de Sabaneta"

INTEGRANTES

Sebastián Blanco López      Cód. 1128281479

                        Juan Ramón Pérez Ortega     Cód. 1107035751

                        Gloria Stella Salazar             Cód. 66824770

                        Anlly Nasli Zapata Guarín   Cód. 1214719392

                       Yazmin Elena Zapata             Cód. 1152455098

DOCENTE: Jorge Iván Arango

1.  Estimados (as) estudiantes antes de desarrollar la actividad es fundamental que revise detenidamente las lecturas sobre el ZOPP ya que de acuerdo a los conceptos, principios y momentos del ZOPP se desarrolla la propuesta social.

Cada estudiante teniendo en cuenta el título de la propuesta presentada en la actividad de la anterior Unidad 1, describirá en una totalidad de 20 palabras cual considera que sea el problema   y el contexto en el cual se ubica.

1. Análisis de la situación

Estudiante

¿Cuál es el problema?

En qué contexto está ubicado

Juan Ramón Pérez Ortega

El alto índice en el consumo de psicoactivos entre la población adolescente y juvenil del municipio de sabaneta Antioquia. A partir de este hábito se presentan una serie de conductas disruptivas en los adolescentes, enmarcadas por la aparición de valores y actitudes inadecuadas que atentan contra los valores, y normas socialmente establecidas en toda comunidad. Este hábito maladaptativo contrae y descompone inicialmente el núcleo familiar, posteriormente este impacto se replica en el medio social-Comunitario.

Este problema se encuentra impactando a la población en los contextos:

Familiar

Educativo

Comunitario

Social

      Tabla 1: Análisis de la situación

 

2.  El grupo teniendo en cuenta el título de la propuesta presentada, describe en 25 palabras el análisis de los involucrados, sus intereses y necesidades

  1. Análisis de los involucrados

Identificación de los grupos, instituciones, personas

Intereses y Necesidades

Familia

La familia es afectada cuando uno o más miembros son adictos activos al consumo de psicoactivos, perturbando este hábito su funcionamiento. La dinámica de las relaciones, la comunicación y la conducta de sus miembros, cambian y se hacen disfuncionales, como resultado del proceso adictivo. 

Instituciones educativas

Desarrollar planes emergentes que permitan una educación incluyente y no excluyente con la población adolescente y juvenil con dificultades en el consumo de psicoactivos.

Entes gubernamentales

Implementación de programas orientados a la atención e intervención de la población afectada por el flagelo del consumo de psicoactivos.

     Tabla 2: Análisis de los Involucrados

3. El grupo realiza discusiones académicas en el foro colaborativo para concertar y seleccionar del   1. Análisis de la situación y del 3. Cuadro análisis de Problemas cual podría ser el problema central y elabora un árbol de problemas.

3. Análisis de Problemas

¿Situación que genera el problema? Utilice máximo  12 palabras

Juan Ramón Pérez Ortega

El consumo de psicoactivos se encuentra enmarcado por motivaciones de respuesta social y motivaciones experimentales

                             Tabla 3: Análisis de Problemas

Árbol de Problemas

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4. El grupo realiza aportes en el foro, discusiones académicas sobre la identificación del problema central   y cada estudiante aporta en una breve descripción máximo de 12 palabras una posible solución a la problemática.

                                         4. Análisis de Alternativas  

Problema Central identificado:

Nombre de estudiante

Estrategias para resolver el problema (utilice como máximo 12 palabras)

Juan Ramón Pérez Ortega

Implementar programas municipales con personal idóneo para la prevención en el consumo de sustancias psicoactivas.  

5. Marco o soporte teórico:     El grupo participa en el foro colaborativo y de manera concreta relaciona el enfoque conceptual y metodológico a la luz de los cuales se desarrollará el proyecto.

Según el diccionario de la RAE (2001), el término droga se defino como: “Sustancia o preparado medicamentoso de efecto estipulante, deprimente, narcótico o alucinógeno”. Según la OMS: La droga se define como: “Toda sustancia que, introducida en un organismo vivo, es capaz de modificar una o más funciones de este”. Sustancia Psicoactiva es una sustancia psicotrópica o psicótropo (del griego psyche, "mente" y tropein, "tornar") es un agente químico que actúa sobre el sistema nervioso central, lo cual trae como consecuencia cambios temporales en la percepción, ánimo, estado de conciencia y comportamiento. Es Toda sustancia química de origen natural o sintético que al introducirse por cualquier vía (oral-nasal-intramuscular-intravenosa) ejerce un efecto sobre el sistema nervioso central (SNC), compuesto por el cerebro y la médula espinal, de los organismos vivos. Estas sustancias son capaces de inhibir el dolor, modificar el estado anímico o alterar las percepciones. (Gutiérrez, 2011). La Asociación Panamericana de la Salud (APS) en conjunto con la OMS, definen las sustancias como una droga o sustancia (química, natural) que introducida en el organismo por cualquier vía ya sea (inhalación, ingestión, intramuscular, endovenosa) es capaz de actuar sobre el sistema nervioso central (SNC) provocando una alteración psicológica. Como, por ejemplo, la experimentación de nuevas sensaciones o la modificación de un estado psíquico que, de manera general, es, capaz de cambiar el comportamiento de las personas. Consumo de drogas Según Escohotado, 2008 se pueden plantear tres formas para comprender el uso de las SPA. La primera se relaciona con el alivio del dolor, es decir, “del sentimiento de desasosiego llamado dolor y su manifestación inmediata a través del sistema nervioso frente alguna lesión. La segunda esfera se manifiesta con la idea de dormir cuando se enfrentan situaciones de aburrimiento y desazón. La tercera se relaciona con la naturaleza aventurera del individuo y las prácticas desarticuladas que éstas generan en relación con el uso de SPA. (Escohotado, 2008) distingue entre las grandes toxicomanías “(opio, marihuana y cocaína) y cierto número de pequeños hábitos familiares en relación con algunas sustancias de uso habitual (alcohol, tabaco, café, somníferos)”. Curiosamente, las sustancias creadoras de hábitos familiares generan dependencia, causan miles de muertos y desencadenan actos de violencia. Desde un análisis que involucra los tipos de consumo y los grados de dependencia del consumidor, varios aspectos dependen de cada persona y, en general, se relacionan con el fenómeno de la adaptación neuronal, es decir, el cambio permanente (pero reversible) de la estructura y el funcionamiento de las neuronas sobre las cuales incide el efecto de la droga. En niveles más complejos existen otros mecanismos de adaptación: emocional, conductual, cognitivo, relacional, etc. Esto quiere decir que los cambios que se producen en una persona por el uso de sustancias psicoactivas no se limitan a la mera acción de la sustancia sobre la célula nerviosa, sino que supone una transformación que se define en el marco de la relación entre el individuo, la sustancia y el contexto. En estos casos, el consumo no es ni un estado definitivo ni una estructura sino un síntoma derivado de una práctica que le permite al sujeto con crisis de identidad adoptar la conducta del toxicómano independiente del producto. El uso simple es un consumo que no representa complicaciones para la salud ni trastornos de comportamiento para otros. (Gutiérrez, 2011). El consumo de SPA se ha comprendido incluso como un fenómeno social y por ende ha sido observado históricamente desde diversas ópticas. Se puede atribuir a ello el alto impacto de sus consecuencias económicas, sociales culturales, sanitarias, entre otras. Como se puede evidenciar en la historia del hombre, la experimentación en el campo psicotrópico hace parte del proceso de conocimiento y adaptación de los individuos con su entorno. El hombre, luego de estudiar los principales activos de las SPA, desarrollar, posteriormente, procesos de purificación y modificación en la estructura química de estas para aumentar sus efectos, finalmente, logra crear compuestos de mayor efecto, en el marco de una sociedad industrial de consumo. A este proceso se suma un cambio progresivo en la mentalidad de la sociedad con respecto a considerar el consumo de SPA como una actividad que atenta contra los preceptos religiosos y morales. De esta forma, el consumo se presenta bajo diversas motivaciones, adquiere nuevos matices y se relaciona con diferentes condiciones, entre las que se cuentan, las biológicas, las neurológicas, las psíquicas, las ideológicas, las políticas, entre otros. Entendido el consumo como un proceso, las SPA y su interacción con el sujeto permiten identificar diversos momentos en su evolución y en la pérdida progresiva del control del individuo sobre las SPA. En este escenario, la adicción aparece como un síntoma, tal como había sido descrito con antelación y como parte de la búsqueda constante del sujeto por satisfacer ciertas necesidades. (Gutiérrez, 2011). Según Nida 2010 en Sustancias Psicoactivas pueden identificarse cuatro tipos de consumo. El primero, llamado consumo experimental, se relaciona con las situaciones de contacto inicial del individuo con una o varias sustancias, de las cuales puede pasarse a un abandono de las mismas o a la continuidad en el consumo. La adolescencia es la etapa en que con mayor frecuencia surge este tipo de consumo, si bien un alto porcentaje no reincide en el mismo. Las motivaciones pueden ser varias: curiosidad, presión del grupo, atracción de lo prohibido y del riesgo, búsqueda del placer y de lo desconocido, y aumento de la oferta, entre otras. Como indicadores de evaluación para definir este tipo de consumo se considera que el individuo desconoce los efectos de la sustancia y que su consumo se realiza, generalmente, en el marco de un grupo que le invita a probarla. (Muñoz; 1987) El segundo tipo de consumo, el consumo ocasional, consiste en el uso intermitente de la SPA sin ninguna periodicidad fija y con largos intervalos de abstinencia. Entre las motivaciones principales para iniciar este tipo de consumo se cuenta facilitar la comunicación, la búsqueda de placer, la relajación, y transgredir las normas, entre otras. Algunas características generales que definen este tipo de consumo son: el individuo continúa utilizando la sustancia en grupo, aunque es capaz de realizar las mismas actividades sin necesidad de drogas; ya conoce la acción de la misma en su organismo y por este motivo la consume. El tercer tipo de consumo se conoce como consumo habitual el cual supone una utilización frecuente de la droga. Esta práctica puede conducir a las otras formas de consumo, dependiendo de la sustancia, la frecuencia con que se emplee, las características de la persona, el entorno que le rodea, etc. Entre las motivaciones para mantener el uso de las drogas están: intensificar las sensaciones de placer; vivencia de pertenencia al grupo y necesidad de reconocimiento dentro de éste; mitigar la soledad, el aburrimiento, la ansiedad; reafirmar independencia o aversión hacia la sociedad, y reducir el hambre, el frío, la debilidad o el cansancio. Algunos indicadores que definen esta forma de consumo son: el sujeto amplía las situaciones en las que recurre a las drogas; éstas se usan tanto individualmente como en grupo; sus efectos son perfectamente conocidos y buscados por el usuario. Puesto que no ha perdido el control sobre su conducta, manifiesta poder abandonar el hábito en caso de proponérselo. Finalmente, el cuarto tipo de consumo, consiste en el uso nocivo problemática de las SPA. Se trata, entonces de un consumo susceptible de provocar daños físicos, psíquicos, afectivos, psicológicos y sociales para el consumidor y su ambiente próximo o lejano. Este uso no está ligado únicamente a la cantidad consumida en una sola vez ni a la repetición de un consumo moderado y controlado de ciertas sustancias. Los riesgos se relacionan con el peligro específico del producto, a los daños para la salud y a las consecuencias sociales del consumo. Los riesgos para la salud (riesgos sanitarios) incluyen una exteriorización del estado físico, la complicación de ciertas enfermedades, algunas muertes prematuras, y los riesgos para la vida cotidiana (riesgos sociales). Entre los efectos de este tipo de consumo, se cuentan el incumplimiento de las obligaciones laborales, académicas, personales y familiares (ausencias repetidas o bajo rendimiento; suspensiones o expulsiones de la escuela; descuido de los niños o de las obligaciones sociales. (Bukstein, 1995) Las sustancias psicoactivas pueden ser de origen natural o sintético y cuando se consumen por cualquier vía (oral-nasal-intramuscular-intravenosa) tienen la capacidad de generar un efecto directo sobre el sistema nervioso central, ocasionando cambios específicos a sus funciones; que está compuesto por el cerebro y la médula espinal, de los organismos vivos. Estas sustancias son capaces de inhibir el dolor, modificar el estado anímico o alterar las percepciones.(Muñoz, 1987; Velasco, 1998) Conceptos relacionados con las sustancias psicoactivas (Rojas; 1996) Depresoras: Disminuye el ritmo de las funciones corporales, de la actividad psíquica y del sistema nervioso central. Estas sustancias son también llamadas psicolépticas. Estimulantes: Excitan la actividad psíquica y del sistema nervioso central y adicionalmente incrementan el ritmo de otros órganos y sistemas orgánicos. Alucinógenas: Capaz de alterar y distorsionar la percepción sensorial del individuo, interferir su estado de conciencia y sus facultades cognitivas, pueden generar alucinaciones. Origen Natural: Se encuentran en forma natural en el ambiente y que se utilizan por los usuarios sin necesidad de que se produzca algún tipo de manipulación o proceso químico. Sintéticas: Elaboradas exclusivamente en el laboratorio a través de procesos químicos, cuya estructura química no se relaciona con ningún componente natural. NPS: Nuevas sustancias psicoactivas se definen como “sustancias de abuso, ya sea en forma pura o en preparado, no son controladas por la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes ni por el Convenio sobre Sustancias Sicotrópicas de 1971”. Licitas: Las drogas licitas son aquellas que no están penadas por la ley es decir, son legales. Las más consumidas en nuestro país son: el tabaco, el alcohol y los fármacos. Ilícitas: Las drogas ilícitas son aquellas que están penadas por la ley, es decir, ilegales. Entre ellas se encuentra la marihuana, la cocaína, la heroína, etc. Emergentes: incluyen además de las nuevas sustancias, cualquier cambio en la presentación, patrón de uso, pureza o presencia de adulterantes, que pueden implicar una amenaza para la salud pública y son objeto de análisis del Sistema de Alertas Tempranas. La dependencia producida por las drogas puede ser de dos tipos, Según CIE 10. Dependencia física: El organismo se vuelve necesitado de las drogas, tal es así que cuando se interrumpe el consumo sobrevienen fuertes trastornos fisiológicos, lo que se conoce como síndrome de abstinencia. Dependencia psíquica: Es el estado de euforia que se siente cuando se consume droga, y que lleva a buscar nuevamente el consumo para evitar el malestar u obtener placer. El individuo siente una imperiosa necesidad de consumir droga, y experimenta un desplome emocional cuando no la consigue. Algunas drogas producen tolerancia, que lleva al drogadicto a consumir mayor cantidad de droga cada vez, puesto que el organismo se adapta al consumo y necesita una mayor cantidad de sustancia para conseguir el mismo efecto. La dependencia, psíquica o física, producida por las drogas puede llegar a ser muy fuerte, esclavizando la voluntad y desplazando otras necesidades básicas, como comer o dormir. La necesidad de droga es más fuerte. La persona pierde todo concepto de moralidad y hace cosas que, de no estar bajo el influjo de la droga, no haría, como mentir, robar, prostituirse e incluso matar. La droga se convierte en el centro de la vida del drogadicto, llegando a afectarla en todos los aspectos: en el trabajo, en las relaciones familiares e interpersonales, en los estudios, etc. Muchas sustancias pueden ser nocivas para el cuerpo y el cerebro. Beber alcohol, fumar tabaco, tomar drogas ilegales e inhalar pegamento puede causar daños graves en el organismo. Algunas drogas alteran seriamente la capacidad de la persona para tomar decisiones y elegir cosas saludables. Los jóvenes que beben, por ejemplo, son más propensos a participar en situaciones peligrosas, como conducir bajo la influencia del alcohol o mantener relaciones sexuales sin protección. Algunos jóvenes creen que las drogas les ayudarán a pensar mejor, a ser más populares, a mantenerse más activos o a ser mejores atletas. Otros simplemente sienten curiosidad y creen que probarlas no les hará daño. Otros quieren encajar en un grupo. Muchos jóvenes consumen drogas para ganarse la atención de sus padres o porque creen que las drogas les ayudarán a escapar de sus problemas. Pero la verdad es que las drogas no solucionan los problemas simplemente ocultan los sentimientos y los problemas, cuando desaparecen los efectos de las drogas, permanecen y/o empeoran. La Familia primera sociedad a la que pertenece el hombre; el Psicólogo de familia José Manuel González Saludo Familiar y drogadicción. Habla que la familia es el principal de los sistemas humanos, que asume las funciones más importantes para el desarrollo del hombre. Básicamente recae en ella la responsabilidad por el crecimiento y la formación de la identidad de una persona. La personalidad en ser se forma en gran parte por la influencia de su familia, ya que le proporciona valores morales y religiosos que éste luego hará suyos, y el desarrollo de su afectividad, sociabilidad y su potencial intelectual. También manifiesta que no se podría decir que la familia es la única causante del consumo de SPA de un joven, pues muchos factores son los que intervienen para que este tipo de situaciones se dé, Lo que se puede sostener es que la familia constituye uno de estos factores y es de gran importancia. “De igual manera, comenta que muchas dificultades y problemas son el producto de una larga serie de errores, desconocimientos, carencias e inseguridades”. Y lo cual da a entender que la drogadicción no es algo que se dé por casualidad en algún momento de la vida de una persona, sino que por el contrario, se da por la acumulación de diversos factores de distintas intensidades que facilitan o impulsan al individuo a seguir este camino en busca de una forma de escapar de la realidad. Manifiesta que normalmente una persona convive con su familia durante su niñez y adolescencia, época de gran influencia para el crecimiento del individuo. Estas son dos épocas de gran importancia para un hombre, ya formando que se está formando para enfrentar la vida, creando sus propios ideales desarrollándose física, afectiva, ética e intelectualmente. Se encuentra en un proceso de aprender a relacionarse con los demás, recibiendo y dando afecto, apoyo, amor y amistad. Está aprendiendo como debe ser su conducta en cada momento y cada lugar, a formar su criterio de lo que está mal, de acuerdo a lo que le es enseñado y a lo que percibe su realidad. “con ellos se establece el vinculo afectivo primario, a partir de cual se proyectará socialmente el individuo en sus relaciones interpersonales”. Factores familiares y consumo y sería ideal que la familia participe activamente en un proceso de terapia familiar para entender y ayudar al adolescente. Investigadores como Rutter (1985) habían advertido que cuando un adolescente tiene dificultades psicológicas durante su desarrollo, estas están asociadas a diversos indicios de disfunción o patología familiar como el divorcio de los padres, discusiones parentales crónicas, enfermedad mental parental e inestabilidad de los padres, que contribuyen a generar “la crisis del adolescente”, que varía en el nivel de intensidad, constituyendo los más graves llegar al consumo de drogas. Familias disfuncionales Diversos investigadores han considerado a las familias disfuncionales o desorganizadas como un fuerte factor de riesgo, generador de individuos con problemas comportamentales o de adaptación. Al respecto, Estévez, Musitu y Herrero (2005) sostiene que las familias desorganizadas lo son porque rompen con la función socializadora de los hijos. Esta condición las predispone a la incorporación de estilos de vida y comportamientos desadaptativos, ya que de hecho dificultan la tarea de los padres en la educación de los hijos, entorpecen y sabotean la labor de la escuela como transmisor de conocimiento y, además, permiten, con su ausencia de control, que los hijos se asocien con amigos que suelen tener valores antisociales. Las familias multiproblemáticas son aquellas que acumulan, en un momento dado, múltiples eventos estresantes fortuitos así como las tensiones asociadas a su estilo de interacción, pues se ven afectadas simultáneamente por los problemas que inciden sobre la familia como un todo (problemas económicos, disputas por la custodia de los hijos, etc.), lo cual repercute por lo menos en algún integrante del sistema familiar en términos de vagancia, fuga del hogar, conducta delictiva, abuso de drogas, entre otras conductas de alto riesgo, tal como conceptúan Rubio y Jaramillo (2009). Una población importante de adolescentes que atraviesan dificultades establece relaciones muy conflictivas con sus padres, dado que esto formaría parte del comportamiento psicoafectivo del joven. Estas observaciones ya las hacía Sigmund Freud, cuando mencionaba que es normal para un adolescente tener durante largo tiempo un comportamiento incoherente e imprevisible, de amar a sus padres y de odiarlos, de rebelarse contra ellos y de depender de ellos. Ahora bien, diversos estudios han determinado que los adolescentes y jóvenes actúan por simple curiosidad, imitación, sentimiento de invulnerabilidad, rebeldía o afán de independencia. Muchos de ellos y ellas enfrentan el peligro de iniciarse en el consumo y posteriormente escalar a la adicción. El y la adolescente coloca la droga en el lugar que desea, por lo tanto, la acción de esta no depende solo de sus características como droga, sino de lo que de ella se espera, de lo que buscan quienes la consumen y la suministran, y de lo que dicta el entorno.

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