El Tren Del Maestro

El tren del maestro.

Observen que en la escuela las aulas son como los vagones, y nosotros somos responsables de cada uno de ellos. Todos los años suben al tren nuestros alumnos y empiezan o continúan un viaje fascinante, un viaje que jamás olvidaran y que este viaje marcara para siempre sus vidas. A nuestro vagón sube ese alumno rebelde, estudioso, cariñoso, creativo, todos ellos van llegando y subiendo uno a uno con ese entusiasmo y alegría que contagian a uno, iniciamos un viaje juntos y nuestra responsabilidad es: GUIARLOS A UN BUEN DESTINO. En otros vagones están nuestros compañeros de trabajo, maestros que eligieron el mismo tren, maestros con los que compartiremos momentos inolvidables, y que no debemos dejar de ver para alimentar nuestra amistad. Porque si no los vemos, es posible que el día que lo intentemos, ya no estén, y pensaremos que no hemos sido buenos compañeros de viaje.

¿Saben cuál es el mayor interrogante?, si nuestros alumnos van a valorar lo que elegimos hacer, si logramos deja huella en ellos o no, si podrán alcanzar todas esas metas que se propongan. La verdad es que no siempre lo sabemos, algunos terminan su viaje con otros y JAMAS volvemos a verlos, pero otros- y esto es lo más gratificante de nuestra profesión- visitan el tren para mostrarnos quienes llegaron a ser,el esfuerzo que pusieron para lograr ser personas de bien, cuánto hemos ayudado a que lo lograran y cuanto valoran haber viajado en aquel tren junto a nosotros.

Es cuando sentimos que el tren va mas rápido, en este momento confirmamos que es un hermoso viaje, ese viaje que prometimos seria inolvidable, pero como todo viaje también tendrá su estación final y nos tocara esperar a dios y al encontrarnos con El, preguntara si dejamos huella en nuestros alumnos, si los ayudamos a construir sus vidas, si fuimos felices al verlos alcanzar sus logros. Pero sobre todo si fuimos felices por haber tenido el mejor trabajo del mundo, el de formar a los seres que el creo, el de ayudar a los padres a moldear hombres de bien, transmitir valores y principios. Y ¿saben qué? , cuando me toque a mí responder, responderé que es una experiencia maravillosa, que jamás cambiaria mi profesión por otra, porque nuestros alumnos nos enseñan cosas nuevas al igual que nosotros enseñamos a ellos.

Les deseo que tengan un feliz viaje y agradecer por tanto esfuerzo, dedicación, interés, que toman a los alumnos, Gracias por darme esos consejos cuando más los necesitaba, por darme esas palabras de aliento cuando me veías más triste y no encontraba la salida a mis problemas. Gracias, maestro, por ser esa persona que me animo a seguir adelante, que me enseño a luchar y jamás vencerme , por haber tenido paciencia ante todas mis travesuras y ante quejas que tenias de mis compañeros por algo que yo había hecho. Hoy en este día te quiero agradecer tu valioso tiempo, tu dedicación, tu esmero

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