Estres Y Afrontamiento

INTRODUCCION:

Todas las personas lo han sentido, todos se quejan de él y hoy en día es una de las enfermedades del siglo XXI, el estrés.

El estrés es una respuesta del organismo de defensa en situaciones de cambio, esta respuesta se refleja de manera psicológica y fisiológica. El estrés es cualquier exigencia ambiental o de cambios que provoca tensión, amenaza, frustración, enojo, depresión etc.…

Pero el estrés no siempre es una respuesta de un cambio malo, también se origina estrés es sucesos esperados, y buenos, por la búsqueda de que todo quede bien para ese suceso y las ansias de tenerlo todo perfecto para esa ocasión especial. El estrés es provocado la mayoría de las veces por una situación de cambio, ya sea un cambio laboral, de estilo de vida, de ambiente etc... La mayoría del estrés es ocasionado también por nimiedades (pequeños malestares como enojo o frustración). Existen ocasiones que por estar en un estado de humor específico se reacciona de manera estresante a una situación de cambio muy pequeño.

Presión, la presión es de dos tipos, cuando nos obligamos a cambiar muy rápido o cuando queremos mejorar algo de nosotros, esta presión nos puede originar estrés por ambas ramas por un cambio o por algo bueno.

La frustración, es cuando nos impiden lograr una meta, unos ejemplos son: cuando necesitamos llegar a tiempo y el trafico es enorme, cuando necesitamos dinero y no tenemos lo suficiente, también el racimo.

El conflicto, es cuando tenemos dos opciones y no sabemos que elegir. Ya sea porque ambas son igual de buenas, cuando las dos opciones no nos gusta pero tenemos que elegir una.

En ocasiones nosotros mismos nos creamos el estrés viendo el futuro negativo que no ha pasado o cuando nos proponemos metas y no hacemos nada para lograras.

En resumen, el estrés es diferente para cada individuo, los eventos especiales, las nimiedades causan estrés que esta causa frustración, presión y conflicto.

El estrés.

Es una respuesta automática y fisiología de cuerpo, cuando existe un cambio, amenaza o peligro. “En general tendemos a creer que el estrés es consecuencia de circunstancias externas a nosotros, cuando en realidad entendemos que es un proceso de interacción entre los eventos del entorno y nuestras respuestas cognitivas, emocionales y física en realidad entendemos que es un proceso de interacción entre los eventos del entorno y nuestras respuestas cognitivas, emocionales y físicas”.

El estrés es un desencadenante conocido para la depresión y también puede afectar su salud física. Así que es importante identificar las causas de estrés en su vida y tratar de minimizarlos

Síntomas:

Los síntomas del estrés casi siempre son emocionales como: ansiedad, irribitaidad, miedo, frustración etc... También en nuestros pensamientos y actitudes influye como: la capacidad e poner atención es menor, olvidos, llanto, preocupaciones a futuro, reacciones impulsivas, risas nerviosas, y mayor facilidad de accidentes. Así también influye en nuestra salud física como: músculos contraídos, dolores de espalda, cabeza y de estomago, insomnio etc.…

Algunos signos de exceso de estrés incluyen: El aumento de la irritabilidad, Intensificación de la sensibilidad a la crítica, Los signos de tensión, como morderse las uñas, Dificultad para conciliar el sueño y la vigilia en la mañana, Beber y fumar más Indigestión y Pérdida de la concentración

Es importante actuar para aliviar el estrés perjudicial antes de que afecte su salud física o mental. (1)

FUENTES DE ESTRÉS EXTREMO

Estímulos Externos: problemas económicos, familiares, exceso de trabajo, temor, pérdida de un ser querido, de un trabajo, una mudanza, etc.

Estímulos Internos: pertenecen al dominio psicofísico del individuo, como por ejemplo, un dolor intenso, una enfermedad, sentimientos de inferioridad, problemas sociológicos, entre otros.

Pero si los estímulos fueran para todos iguales, todos estaríamos estresados o no de la misma forma. ¿Qué marca la diferencia entre una persona y otra? La forma en que cada uno percibe la realidad. Podemos consensuar que hay ciertos hechos o circunstancias que a la mayoría de los humanos de hoy en día nos afectaría en mayor o menor medida a todos por igual, tal el caso de la muerte de un ser querido, un divorcio no deseado, incluso una mudanza. Sin embargo, la forma en que cada uno de nosotros nos pararemos frente o estas situaciones es, sin duda, diferente y esto está directamente vinculado a la forma en que percibimos el mundo que nos rodea, en las construcciones lingüísticas que hacemos a partir de las mismas y la manera en que le conferimos sentido a las cosas que nos suceden.

Se puede decir que una persona está sometida a una situación de estrés cuando tiene que enfrentar demandas que sobrepasan sus fuerzas físicas y psíquicas, de manera tal que percibe dificultades para dar una respuesta efectiva. Esto desencadena una respuesta de estrés que consiste en un importante aumento de la activación fisiológica y psicológica que, a su vez, la prepara para una intensa actividad motora. Estos mecanismos ayudan a enfrentar mejor la situación y disponen la persona para actuar en forma más rápida y vigorosa. Pero, cuando la respuesta de estrés es demasiado frecuente, intensa o duradera, puede tener repercusiones: negativas, con una amplia gama de manifestaciones orgánicas y psicológicas.

El estrés es un proceso dinámico de interacción entre el sujeto y el medio y por lo tanto cada persona responde de manera diferente a un mismo agente estresante.

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