¿HABRÁ METRO EN BOGOTÁ?

COLEGIO MAYOR DE SAN BARTOLOMÉ

CIENCIAS SOCIALES

Profesor: Daniel Camilo Becerra Manrique

Estudiante: Santiago Estupiñan

Fecha de entrega: 24 de marzo de 2020

¿HABRÁ METRO EN BOGOTÁ?

Esta situación que se puede enfocar más en un dilema sobre como la corrupción no permite la realización de este tipo de proyectos, el cual una de sus ventajas seria la poca contaminación de este sistema de transporte masivo, como pudimos observar los habitantes de Bogotá están incrédulos y a la expectativa de la realización e implementación de este sistema, el cual no se habría definido si sería subterráneo o un metro elevado.

Para resaltar primeramente los beneficios que traería este sistema podemos permitirnos hablar acerca de la mejora en las condiciones de vida de los usuarios y los habitantes de los sectores, también se le ve una buena viabilidad en ser un transporte eficiente para ahorrar tiempo y dinero así como la opacidad debido que al ser una estructura subterránea solo será visible en diferentes puntos en los cuales se conecta con la superficie.

Para resumir las incongruencias de este sistema, se requiere mirar los problemas desde un punto de vista enfocándonos en la función que se ejerce en el estudio de la geografía humana, debido a que los sistemas rigen su utilidad y funcionamiento por el trato y el cuidado de las personas frente al sistema de transporte, con esto me refiero a que nosotros como beneficiarios de este sistema deberíamos cambiar la mentalidad de que si alguna vez podemos llegar a observar el metro subterráneo de Bogotá, ¿realmente tendríamos la consciencia y el sentido de pertenencia para aceptar que es una herramienta que beneficiaría a muchas personas? O estamos dispuestos a convertir las instalaciones del metro en lo que hoy se critica por el “pésimo servicio de Transmilenio” cuando en realidad no nos damos cuenta que somos los mismos ciudadanos los que dañamos los sistemas, las puertas y demás componente de los que el sistema ofrece.

Para generalizar este tema podemos tomar de referencia otros metros subterráneos que podemos encontrar en otros países como ejemplos. Estambul puede ser un referente por la cantidad de kilómetros construidos en pocos años. Madrid por la buena conectividad que ofrece a la ciudad. También São Paulo podría ser entendido como un buen ejemplo de buenas prácticas en el continente, aunque es cierto que el ritmo de avance es muy lento.

Cabe aclarar que los problemas de movilidad no se resuelven únicamente construyendo más infraestructura. Muchos de los problemas de movilidad vienen dados por el crecimiento que han tenido las ciudades en los últimos años. También hay un gran problema de falta de conciencia urbana en este sentido, la gente se mueve por comodidad sin pensar en las repercusiones que ello tiene sobre la ciudad. Cierto es que las ciudades latinoamericanas tienen además sus particularidades, aspectos como la inseguridad ciudadana pueden también afectar a la movilidad.

Sin embargo todos los sistemas de transporte público de alta capacidad siguen un patrón parecido: son capaces de transportar gran cantidad de pasajeros, pero su operativa se limita a sus puntos de conexión con la ciudad: las estaciones, las cuales se pueden ver influenciadas en las acciones de las personas, en esta quiero recalcar el caso de una “influencer” colombiana conocida en sus redes como “Epa Colombia” la cual nos da un claro ejemplo de como por medio de sus acciones de vandalismo logro sacar de circulación una serie de rutas en Transmilenio por el estado que presentaba la estación después de los actos vandálicos e injustificables de la ya denominada “influencer”.

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