Instruye Al Niño En Su Camino Y Aun De Grande No Se Apartara De El

1- ¿Qué es la formación Ética y Ciudadana?

En este espacio, el área que nos ocupa es “La formación ética y ciudadana”, pero, ¿Que es la formación ética y ciudadana? ¿Cuáles son las aptitudes a aprender y enseñar?

Durante mucho tiempo, incluso durante mi paso por la escuela media secundaria (EGB por entonces), el área llamada “formación ética y ciudadana” consistía en un “estudio” exhaustivo de la constitución nacional. Atendiendo a esta característica podría haberse llamado “constitucionalismo” en lugar de “formación ética y ciudadana”, si no fuera porque este estudio exhaustivo no solia incluír reflexiones acerca de lo estudiado, eran más bien ejercicios repetitivos y memorísticos de la naturaleza de “aprenderse el preámbulo de memoria” y repetirlo para la lección como si fuera un verso. Esto naturalmente carecía de significado y trascendencia, ya que de poco nos sirve el preámbulo o cualquier artículo de la constitución si no comprendemos realmente su significado.

Hoy, tiempo después, me reencuentro con esta área; con un puñado más de años y una formación superior, lo que me permite una actitud reflexiva y critica frente al contenido conceptual de la materia. Regreso entonces, luego de este prefacio a la pregunta inicial ¿Qué es la formación ética y ciudadana? En primer término, creo necesaria destacar la naturaleza verbal del rotulo de la materia, “formación”. Para lograr una aproximación es necesaria la deconstrucción de los conceptos que lo componen.

Entonces ¿Que es la formación? Según el diccionario la formación es la acción de construir o crear algo. No estoy del todo de acuerdo con esta idea, ya que nada se forma de la nada, todo lo formado es la transformación de algo preexistente; en el caso de la educación, la tarea sería transformar el bagaje cultural precedente del estudiante para incluir conocimiento científico, valores y procedimientos para desarrollarse como seres sociales.

Entonces, ¿Cuál es el bagaje cultural que el estudiante trae y hay que tener en cuenta para, en nuestra condición de “formadores”, trasformar? Desde el nacimiento, el “cachorro” humano interactúa con la sociedad en que nace. Esta sociedad funciona según valores, conocimientos considerados “validos” y costumbres que la rigen, a este conjunto se le llama cultura. La interacción del individuo con la sociedad transforma la cultura y la cultura transforma al individuo, siempre asimétricamente a favor del primer factor, es decir, son mayores los aportes que hace la cultura al individuo que el individuo a la cultura. Esta interacción da como resultado la humanidad del ser, es decir, nos aleja de nuestra condición animal dándonos parámetros de comportamiento culturales. Así entonces vamos incorporando conocimientos, valores y costumbres que la sociedad nos hereda. A este proceso se le llama “socialización”. Dentro de la socialización diferenciamos al menos dos momentos, que se distinguen cualitativamente según su naturaleza y procedencia. A estos “momentos” se les ha dado a llamar socialización “primaria” y “secundaria”.

La socialización primaria es el conjunto de conocimientos y costumbres que se adquieren en la primera infancia, son legados por el seno familiar y tienen por característica ser no formales; es decir, no están pautados ni son graduales; sino que son más bien espontáneos.

La formación que se nos encarga constituye este segundo grupo, la socialización secundaria; que serian todos los aprendizajes que adquirimos durante el resto de nuestra vida, ya sean formales (como los de la escuela o la universidad o cursos de capacitación) o no formales (como los aprendizajes espontáneos que se dan entre pares como el grupo de amigos o en el trabajo, etc. y hasta los medios de comunicación)

Si, como establecimos; la formación, respecto al área que nos preocupa corresponde contribuir y por tanto transformar la socialización del sujeto ¿Que es la ética? El origen etimológico de la palabra ética proviene del vocablo griego “êthicos” que se refiere a las costumbres. En este sentido podría decirse que, nuestro trabajo no es solamente realizar un correcto traspaso de los conocimientos científicos, sino también instituir costumbres adecuadas para la convivencia, contribuir al desarrollo de personalidades moralmente autónomas; con valores y saberes que permitan a los sujetos hacerse cargo reflexivamente de sus propias opciones y no ser fácilmente influenciados por presiones externas. La autonomía es la capacidad de establecer normas para el comportamiento propio y está ligado a la reflexión. Esta capacidad conlleva una mirada criteriosa de la sociedad y la opinión pública y una observación critica de la propia en constante revisión. Es decir, construir su propia ética que servirá para regir sus actitudes y acciones futuras frente a circunstancias diversas.

¿Y la ciudadanía? “La ciudadanía es una condición que tienen las personas que gozan de derechos, garantías y obligaciones en el marco de la comunidad y del estado donde viven” ser ciudadano implica el conocimiento de estos derechos, deberes y garantías; implica también la defensa del orden social justo, lo que exige una activa participación política y responsabilidad social. La formación ciudadana es en último término, lograr sujetos responsables y comprometidos con la construcción de un orden público que supone el respeto por las normas y las leyes.

2-

A) Caracteristicas generales de los derechos humanos:

Inherentes: Porque son innatos a todos los seres humanos sin distinción alguna, pues se asume que nacemos con ellos. Por tanto, estos derechos no dependen de un reconocimiento por parte del Estado.

Universales: Por cuanto se extienden a todo el género humano en todo tiempo y lugar; por tanto, no pueden invocarse diferencias culturales, sociales o políticas como excusa para su desconocimiento o aplicación parcial.

Absolutos: Porque su respeto se puede reclamar indistintamente a cualquier persona o autoridad.

Inalienables: Por ser irrenunciables, al pertenecer en forma indisoluble a la esencia misma del ser humano; no pueden ni deben separarse de la persona y, en tal virtud, no pueden trasmitirse o renunciar a los mismos, bajo ningún título.

Inviolables: Porque ninguna persona o autoridad puede actuar legítimamente en contra de ellos, salvo las justas limitaciones que puedan imponerse de acuerdo con las exigencias del bien común de la

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