La Cuarta Revolución Industrial y el Liderazgo del Futuro

La Cuarta Revolución Industrial y el Liderazgo del Futuro

Actualmente, el mundo ha venido evolucionando a tal punto que ya se encuentra en la cuarta revolución industrial, esta se caracteriza por ser una etapa tecnológica, en donde los empleadores buscan en sus empleados habilidades y capacidades de acuerdo con las exigencias tecnológicas del siglo XXI.

Los tiempos han cambiado y las nuevas tecnologías han obligado a la humanidad a vivir interconectados. Actualmente vivimos en una sociedad denominada VUCA (Volatility, uncertainty, complexity and ambiguity) en la cual se debe desarrollar valores tanto a nivel personal como laboral. (García Vega, 2018)

La misma autora menciona que esto traerá consigo grandes cambios tanto a nivel individual como organizacional. A nivel individual crearán millones de empleos, pero solo podrán desarrollarse los profesionales que cumplan con las destrezas y competencias necesarias. Por otro lado, a nivel organizacional, las empresas buscarán a personas profesionales que contribuyan a alcanzar el éxito y convertirlas en una empresa sostenible, para ello, dichas personas deberán desarrollar ciertas competencias específicas como las habilidades blandas y las habilidades digitales.

Es aquí donde el rol del líder juega un papel importante, ya que “Las competencias digitales serán la base de la nueva forma de trabajar”. (García Vega, 2018)

En este contexto, esta misma autora nos comenta que los líderes deberán ser personas abiertas al aprendizaje activo, de esta forma ellos podrán ayudar a su equipo de trabajo, asimismo, es necesario que desarrollen sus capacidades para generar interacciones desde una perspectiva global.

No obstante, aunque todo ello aparente un gran avance para la sociedad, es necesario visualizar la otra cara de la moneda. Las desigualdades como un desafío sistemático es una de ellas. Las personas que trabajan en los sectores de baja productividad temen por ser desplazador por la automatización; las ventajas tecnológicas hacen cada vez más difícil el encontrar un trabajo digno.

Estas desigualdades se generan debido a los nuevos parámetros de la sociedad, esto se aprecia en los grandes cambios en las demandas laborales y/o la inclusión de tecnología desconocidas para un gran sector de la sociedad. (Contreras, 2018)

En el campo del derecho, ya existen robots y paginas que de cierta forma ya están desplazando a los abogados en los trabajos más sencillos y reiterativos, por ejemplo, actualmente ya existe un robot llamado Ross que:

Nueva York-Miami. Cuando el despacho de abogados BakerHostetler, uno de las más grandes de Estados Unidos, anunció en 2016 que había contratado a su primer abogado robot, llamado Ross, tanto la empresa como su fabricante se apuraron a decir que los abogados que trabajaban en la empresa no perderían sus empleos. No había nada que temer, dijo la empresa. El nuevo abogado robótico sólo sería un colaborador más de sus colegas humanos. El bufete, de 900 abogados, explicó que el nuevo abogado robótico ayudaría a los 50 abogados del departamento de quiebras en tareas rutinarias de investigación de jurisprudencia, un trabajo que hasta ahora habían realizado jóvenes recién egresados de la escuela de derecho. (Oppenheimer, 2018)

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