La Juventud en la Sociedad Moderna de la Republica Dominicana

Presentación

Nombres

Coral Marie Romero Chía

No. Matricula

100350559

Luisa María Santiago Torres

No.  Matricula

100365825

Profesor

Alejandro Abreu Abreu

Asignatura

Introducción a la Sociología

Tema

La Juventud en la Sociedad Moderna de la Republica Dominicana

Fecha de Entrega

19 de Marzo 2015

INTRODUCCION

 El siguiente trabajo tiene como objetivo comprender la importancia del estudio de la Juventud en la sociedad moderna de la Republica Dominicana. Con el fin de mostrarnos como está la juventud de hoy en día, lo que escucha, lo que los influye a irse por el mal camino, la falta de valores, entre muchas cosas más. Posteriormente, analizaremos como funciona nuestra sociedad; la falta de ética, hechos criminales en la juventud, el alcohol en los jovenes, las drogas, la falta de oportunidades, etc.,  Dado que este debate que se ha sostenido durante siglos en la humanidad, nosotros no pretendemos llegar a una respuesta absoluta, sino que entregar algunos elementos que permitan al lector profundizar en el tema y obtener sus propias conclusiones. A continuación, realizaremos una apreciación más profunda del sentido de los jovenes, para ver si la historia que conocemos es el único pasado posible. En caso de no ser así, ¿qué es lo que permanece fuera de lo que conocemos?  Finalmente veremos un poco a fondo dicha investigación.

       La Juventud en la Sociedad

             Moderna Dominicana.

¿Qué implica la Libertad? La libertad implica siempre el riesgo de escoger tanto una conducta digna del hombre como otra indigna y enfermiza. ¿A que llamamos Ética? Llamamos ética a la elección de la conducta digna, al esfuerzo por obrar bien, a la conciencia y al arte de conseguirlo. ¿Hacia dónde nos ha llevado la falta de ética en nuestro País? En República Dominicana, la falta de ética en el convivir de sus ciudadanos, ha orientado a la nación a un estado de caos, donde prevalece la inseguridad en todas sus circunstancias y donde cada vez más jóvenes forman parte de la inmoralidad. Solo basta dar un vistazo a las noticias de los periódicos para darnos cuenta de la gran cantidad de jóvenes involucrados en hechos delictivos o criminales. Esto influye mayormente por la falta de desempleo, el sector en el que ha crecido, entre otros factores más. ¿Dónde han quedado los valores en la juventud? La juventud dominicana está perdiendo los valores morales y fundamentales para el buen desarrollo de los individuos, adoptando el vulgaridad y la infamia en el diario vivir. Y no es necesario el mucho teorizar para comprender las razones de esta situación. Nosotros los dominicanos tendemos a no darle mucha importancia a cuestiones, como los modos de vida, y la falta de orientación y oportunidades dentro de las familias. Quizás por esa indiferencia, causa mucha sorpresa el enterarse de adolescentes cómplices de crímenes horrendos, como asesinatos, atracos y violaciones. Ejemplo de esto fue la euforia que causó a nivel nacional la noticia reciente sobre la denominada “Casa del Terror” donde una familia dio muerte y entierro a más de doce personas. Como otro caso reciente, de un señor de 78 años de edad, que fue asaltado por dos delincuentes, JOVENES, los cuales lo despojaron de 100 pesos y cigarrillos que tenía; y, tal parece que no les pareció suficiente el asaltarlo y lo masacraron a golpes hasta dejarlo sin vida. ¿No es simplemente otro crimen? Sí lo es, causa cierta conmoción durante unas semanas, sirve de material fresco para algunos programas de televisión, para luego formar parte del olvido. En la provincia de Azua el sobrenombre de “Los Zayayines”, obtenido de unas caricaturas japonesas, es utilizado para identificar una importante banda de delincuentes, jóvenes en su mayoría. Para orgullo de algunos y deleite de otros, fue atrapado el apodado “Vla”, conocido como el líder de dicha pandilla; siendo el hombre más buscado por la policía, desde un año atrás, aproximadamente. No obstante, esto se refiere al cabecilla de un grupo de criminales, en un país en donde existen decenas de grupos, armados y organizados jerárquicamente.

Este dato, resulta insustancial, hasta que surgen las siguientes preguntas. ¿Cómo es posible que la sociedad de espacio a tal situación? ¿Cómo es posible que tantos jóvenes se sumen a las fuerzas malhechoras de la ley? La historia reciente ha demostrado que nuestro Estado carece de políticas preventivas respecto al control de la criminalidad y la represión del crimen. Sin embargo, para la presente situación, ha de estudiarse el problema partiendo desde el seno y el entorno familiar de las personas que delinquen. ¿Qué influye a que los jóvenes se inclinen hacia el camino erróneo?  La falta de oportunidades y de conciencia, la mala educación o carencia de la misma, la marginación y la ambición, son factores fundamentales para entender la inclinación de los jóvenes, en su mayoría de bajos recursos, hacia el mundo del crimen o sustancias prohibidas (drogas). Siendo niños, se enfrentan a la dura realidad de salir a las calles a trabajar, sin importar el peligro que pueden correr con tal de ganar dinero para ayudar a sus padres en la sustentación del hogar, o para alimentar los vicios que hayan podido arrastrar por dicha sociedad, dejando en segundo lugar la necesidad de educarse. En otros casos, salen a deambular por las calles en busca de un techo totalmente inestable, siendo más propensos a enfermarse o adquirir cualquier tipo de anomalía física o psicológica. Ante estas circunstancias, son muy susceptibles a cualquier trabajo que se les ofrezca, aunque constituya violación a las normas jurídicas, (robar, transportar drogas, engañar,  etc.). Así nacen, se desarrollan y maduran, envueltos en las continuas transgresiones de la ley. ¿Ejemplos? Los niños que piden en los semáforos, limpiabotas, limpia cristales, los que sus padres mandan a mendigar, etc. ¿Sería entonces culpable el joven, que no eligió carecer de recursos ni educación, o la sociedad, que no les dio las oportunidades a éste, para poder educarse y desarrollarse como un ser humano digno? Ambos serían responsables, más, la sociedad ha de ser la condenada, por haber fallado primero, en sus deberes, y luego haber expuesto a este inocente y frágil ser a las dificultades que le guiaron por el mal camino. Los valores morales, conformes a los principios de lo que es bueno y justo, ¿Y cómo le exigen a jóvenes ignorados, que sólo sueñan con salir lo más pronto posible de la miseria en la que viven? dice el refrán, “Árbol que crece torcido jamás endereza”, esto aplica a todos los jóvenes que crecen bajo el ejemplo criminal y corruptivo de nuestra sociedad y al ser el método más fácil de obtener beneficios optan por esa vía. No obstante, solo hemos tocado una parte del problema. Es necesario observar la conducta de aquellos jóvenes, que sí han sido premiados por la sociedad, que gozan de buena educación en colegios de renombre, tienen buenas oportunidades, disfrutan de grandes momentos de ocio, diversión, y aun así, muestran claramente, aunque no sea a través de delitos, una carencia de valores morales preocupante.

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