La cremación como una alternativa sanitaria y económica en tiempo de Covid 19
Petra Francisco PintoEnsayo4 de Enero de 2024
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La cremación como una alternativa sanitaria y económica en tiempo de Covid 19.
Una propuesta para los gobiernos locales en materia de políticas públicas.
Autor: Osto Gómez, José Rubén
C.I. 9.990.893
Título: Ingeniero Mecánico. Maestría en Ingeniería mecánica,
Docente Asistente Tiempo Convencional, Departamento de Diseño y Automatización, en las asignaturas: Elementos de Máquina II, Proyectos III, Dibujo Mecánico, Mantenimiento Industrial, de la Escuela de Ingeniería Mecánica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Carabobo
Adscrito al Centro de Investigación y Desarrollo de la Pequeña, Mediana Empresa y la Microempresa del Estado Carabobo CIDPyMESMicro-FaCES UC.
Correo: rubenosto69@gmail.com; Teléfono: 0424-4612274
Autor: Francisco Pinto, Petra Virginia
C.I. 10.857.062
Título: Economista, Especialista en Mercadeo, Cursante del Doctorado en Ciencias Sociales, Mención: Salud y Sociedad (Facultad de Ciencias de la Salud - UC)
Docente Agregado a Tiempo Completo del Departamento de Economía y Derecho en las asignaturas de Recursos Económicos I y Recursos Económicos II de la Escuela de Administración Comercial y Contaduría Pública de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de Carabobo.
Email: pvfrancisco@gmail.com; Teléfonos: 0414-0415320
Área Recursos Económicos
2 Crónicas 16:14
“Y lo sepultaron en el sepulcro que él había excavado para sí en la ciudad de David, y lo pusieron sobre el lecho que él había llenado de especias de varias clases, mezcladas según el arte de los perfumistas; y le encendieron una hoguera muy grande”
Introducción
Para la humanidad, el final de año 2019 representará una fecha significativa. Comienzan a reportarse en varias ciudades de China algunas personas enfermas con un síndrome de distrés respiratorio agudo y algunos de estos pacientes mueren, presentándose además un aumento consecutivo de contagios y fallecimientos que condujeron a varias investigaciones, de allí que las autoridades chinas anunciaron días después que habían identificado un nuevo tipo de coronavirus (Nuevo Coronavirus, 2019-nCoV), mejor conocido como COVID 19. En tres meses, el 11 de marzo de 2020 ya la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretaba una pandemia dado que el virus ya se había reportado en otros países asiáticos, en Europa y en América.
Se estableció que el virus era transmitido por secreciones respiratorias lo que conllevo a implantar, a nivel mundial, algunas medidas preventivas entre las personas de manera de frenar los contagios, siendo las normas fundamentales: lavado de manos, uso de mascarillas y distanciamiento social. Pero quedaba pendiente un grupo considerable de posibles portadores del virus, se trataba de los cadáveres de las personas fallecidas, que según el “Protocolo para el manejo de cadáveres y ritos fúnebres de casos sospechosos y confirmados de COVID-19”, emitido por el Ministerio de Salud y la Provincia de Buenos Aires, expresaba:
Si bien no existe evidencia sólida a la fecha de transmisión de SARS-CoV-2 a través del manejo de cadáveres de personas fallecidas por COVID-19, de acuerdo a lo observado en otros virus respiratorios y en aplicación del principio de precaución, se considera que estos cadáveres podrían suponer un riesgo de infección para las personas que entren en contacto directo con ellos (p.1)
Esta sospecha se hizo frecuente en varios países, entre ellos Venezuela que en fecha 18 de marzo, seis días después de declaratoria de Emergencia Sanitaria del Coronavirus (COVID-19) según Decreto Nº 4.198 del 12 de mayo de 2020 - Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 6.535 Extraordinario; acuerda entre los representantes del Ministerio de Salud, el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses, y la Cámara Nacional de Empresas Funerarias, Cementerios Crematorios (CANADEFU) que todos los casos confirmados o sospechosos de Covid 19 irían directo a inhumación o cremación.
Es importante destacar que en el caso de Venezuela el incremento de contagios por el virus inicia en el mes de agosto de 2020, como lo muestra el gráfico Nº 01, manteniendo hasta la fecha (05 de septiembre 2021) una tendencia al alza, presentando 932 contagios en un día como lo indica el blog de la Plataforma Patria; plataforma donde se están difundiendo las cifras oficiales que diariamente divulga el Ejecutivo Nacional.
Gráfico Nº 01
Casos Positivos
[pic 1]
Y en el caso de la mortalidad, según cifras oficiales tomadas de este mismo blog oficial se observan dos períodos representativos. Uno entre los meses de agosto y diciembre 2020; y uno segundo iniciado en abril y que se ha mantenido, teniendo como última cifra 12 muertes por Covid 19.
Gráfico Nº 02
Fallecimientos por día
[pic 2]
Esta demanda inesperada tanto de servicios de salud como funerarios, además de la medida tomada por el Ejecutivo Nacional con relación a los fallecidos por Covid 19 trajo consigo inicialmente un significativo incremento en la inhumación, pero posteriormente, dado los costos de estos servicios la tendencia se inclinó hacia la cremación. Según de las declaraciones de encargados de cementerios municipales de la ciudad de Caracas, para el mes de octubre, el monto de una parcela podía llegar a 2.000$, mientras que, en otras regiones del país como el caso de Los Andes, la opción es de las fosas comunes por no poder costear una sepultura individual. Según declaraciones del diario El Carabobeño, de fecha 13 de abril 2021: “… los servicios del cementerio, que pueden llegar a superar los mil dólares si no se cuenta con el cupo o parcela en la que será enterrado el cuerpo”.
Ante esta realidad, la cremación se transforma en una opción accesible, como una alternativa sanitaria y económica ante el discontinuo comportamiento de la mortalidad por Covid 19. Vale resaltar, que aun cuando en nuestra tradición no es frecuente la cremación, esta modalidad ha acompañado a la humanidad desde hace varios siglos atrás; y en la actualidad se percibe una mayor aceptación como lo expresa el artículo citado del Diario El Carabobeño, donde hace mención al servicio prestado por las funerarias para la cremación: “Los retrasos que se han presentado durante las últimas semanas son debido a la gran demanda que hay”, agregó la fuente”.
En el caso de Carabobo, el servicio es ofrecido por distintas funerarias, pero el proceso como tal, que se desarrolla en hornos incineradores disponible en dos cementerios privados. Para el mes de abril 2021, el artículo antedicho indicaba que: “Actualmente, tres de los cuatro hornos que hay en la entidad carabobeña destinados a este servicio se encuentran operativos. Dos están en San Joaquín y los dos restantes en el cementerio Jardines del Recuerdo, donde hay uno en reparación”.
De lo anterior se desprenden varios aspectos importantes a resaltar: 1) una demanda creciente debido al Covid 19 y otras enfermedades, 2) una disposición legal que direcciona hacia el uso de la cremación, y 3) una oferta de hornos incineradores insuficiente.
Por otra parte, en la revisión al marco legal venezolano relacionado con la prestación del servicio funerario, se aprecia que según lo señalado en la Gaceta Oficial Nº 40.358 de fecha de 18 de febrero de 2014, donde se promulga la Ley de Regulación y Control de la Prestación de los Servicio Funerarios y Cementerios; se establece en el Capítulo VI, lo relacionado con el Servicio Funerario Municipal, que contempla ente otras atribuciones y responsabilidades la modernización de la actividad funeraria en los artículos 42 y 43 de la referida Ley a través del incentivo de la cremación.
Hasta el momento, las municipalidades poseen proyectos permanentes de mantenimientos en los cementerios locales que contemplan además de limpieza y paisajismo, el aumento de la capacidad por medio de creación de nuevas fosas o reúso de sepulturas ya existentes; que implican recursos presupuestarios que deben destinarse a estos trabajos.
Es por ello, que la intencionalidad de esta investigación es presentar a los gobiernos locales, una propuesta sobre la cremación como una alternativa de política pública marco, que contribuya a disminuir el impacto sanitario y económico que se viene produciendo como consecuencia de: 1) aumento de la mortalidad por Covid 19, 2) costos de inhumación en cementerios privados, 3) la competencia de los servicios funerarios (Servicio Público) establecida por ley para los municipios, y 4) inversión permanente en el acondicionamiento de cementerios municipales.
No es una novedad la administración del servicio de cremación por parte de los gobiernos locales. Existen algunos proyectos nacionales, como es el caso del crematorio municipal de Maracay que fue construido desde 2008 pero por detalles técnico ambientales no pudo iniciar sus operaciones, según lo detalle reportaje de Crónica Uno (enero 2021). A nivel mundial, las experiencias más frecuentes son países suramericanos como Colombia y Bolivia, y en Europa el caso de España.
Es importante destacar, que en esta investigación se han presentado limitaciones por la veracidad de información de las fuentes gubernamentales, así como por la constante y cambiante situación económica del país, y lo innovador del tema, que dificultad la obtención de información precisa.
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