La lucha no fue completamente pacifica, existieron momentos donde la violencia estuvo presente.
Enviado por dianaburning15 • 20 de Noviembre de 2016 • Ensayos • 1.782 Palabras (8 Páginas) • 186 Visitas
Hipótesis específicas:
Mandela:
La lucha no fue completamente pacifica, existieron momentos donde la violencia estuvo presente.
El color de la piel no es un impedimento para lograr nuestros objetivos
Todas las personas tenemos la misma capacidad mental, sin importar distinciones.
12 años esclavitud:
La esclavitud no respeta edades, podían ser esclavos niños
Los esclavos eran humillados demasiadas veces
Mayordomo de la casa blanca:
Los negros eran usados como negros de hogar, a veces como esclavos
"No nací con hambre de libertad, nací libre en todos los aspectos que me era dado conocer. Libre para correr por los campos cerca de la choza de mi madre, libre para nadar en el arroyo transparente que atravesaba mi aldea (...) Solo cuando empecé a comprender que mi libertad infantil era una ilusión, cuando descubrí, siendo joven, que mi libertad ya me había sido arrebatada, fue cuando empecé a añorarla."[1]
Nelson Mandela, un individuo proveniente del corazón del sentir africano, con coraje y convicción inquebrantables, pudo hacer un cambio, pese a las condiciones extremas de dominio y exclusión del apartheid. Condenado por su lucha justa y preso bajo las más recriminables condiciones durante casi tres décadas, renació con una fuerza insuperable para ponerse al servicio del pueblo, con un mensaje conciliador e integrador para todas las razas e ideologías, aplicable a todas las regiones y sociedades del planeta.
No ha existido en la política de nuestro tiempo una figura más popular, admirada y universalmente respetada que el sudafricano Nelson Mandela, icono de la lucha contra el apartheid, al que derrotó, antiguo líder del Congreso Nacional Africano, primer presidente negro de su país y Premio Nobel de la Paz. Su liberación en 1990 tras 27 años de cautiverio dio inicio, trabajando estrechamente con el presidente reformista Frederik de Klerk, a una complicada pero finalmente exitosa transición desde la dictadura segregacionista blanca hasta la democracia multirracial, que alumbraron unas elecciones libres ganadas por el ANC, un Gobierno de unidad y una nueva Constitución. Pese al rencor acumulado tras tantos años de represión y a los estallidos de violencia que jalonaron el delicado proceso, Mandela, paradigma de integridad, nunca se cansó de instar a la paz civil y a la reconciliación de los sudafricanos.[2] Su obsesión fue conseguir y preservar la unidad de la "nación arco iris".Durante su mandato presidencial, entre 1994 y 1999, Mandela, con su extraordinario carisma, su rechazo a las medidas radicales y su elevado sentido de la responsabilidad, fijó los pilares políticos y económicos de la nueva Sudáfrica
“Lo que cuenta en la vida no es el mero hecho de haber vivido… son los cambios que hemos provocado en las vidas de los demás lo que determina el significado de la nuestra” [3]
Sin duda alguna Nelson Mandela hizo un cambio enorme en la sociedad africana, siendo el primer presidente negro y que pese a todos los obstáculos que se interponían en su lucha continuo, basándose en la no violencia, claro, cuando él estaba a cargo; no olvidemos que cuando estuvo en prisión la lucha estuvo llena de constantes peleas y linchamientos.
“Las políticas raciales del gobierno han remordido las conciencias de todos los hombres de buena voluntad y han despertado su indignación más profunda. Los sentimientos de las personas oprimidas nunca han sido más amargas”[4].
Su posición crítica (aunque pacifica al inicio) y la intolerancia del gobierno lo llevó a ser tildado como una persona que alteraba el orden, y con razón, ya que el mismo Mandela desconocería la autoridad del régimen. En efecto, más tarde, tomaría las armas y se convertiría en un líder guerrillero que no haría negociaciones con un gobierno ilegitimo. “No me siento obligado ni legal ni moralmente a obedecer leyes hechas por un Parlamento en el cual no tengo representación política”.[5]
Nelson Mandela es considerado, en Sudáfrica, como el Padre de la Democracia, al haber guiado a su pueblo hacia la creación de un Estado Pluriracial. El conjunto de políticas inaugurado por su gobierno, supo crear las condiciones necesarias para el tránsito del Estado racista hacia la Democracia, sin derramamiento de sangre; gracias a estas acciones recibiría el Premio Nobel de la Paz junto a Frederik de Klerk, el último líder del Partido Nacional y el último gobernante de la generación del Apartheid.
Mandela hizo un discurso por la democracia donde dijo “La lucha por la democracia no ha sido nunca entre los sudafricanos una cuestión perseguida por una sola raza, clase, comunidad religiosa o por un solo sexo. Al honrar a aquellos que lucharon para que llegara este día, honramos a los mejores hijos e hijas de todo nuestro pueblo. Y entre ellos podemos contar con africanos, mestizos, blancos, indios, musulmanes, cristianos, hindúes, judíos; todos ellos unidos por una visión común de una vida mejor para la gente de este país”. [6]
Mandela fue una persona que hizo bastante, es reconocido por ser un héroe de la libertad y es que un héroe, con esas características que solamente se encuentran en personas así son muy escasas. La mayoría de los enfrentamientos son con violencia y Mandela logro su objetivo sin hacer uso de este ruin recurso, por lo menos no con malas intenciones, pues hubo un momento donde justifico las acciones violentas explicando que fue para llamar la atención del gobierno
La película “12 años de esclavitud” es basada en un hecho real ocurrido en 1850, narra la historia de Solomon Northup un hombre negro pero libre que vivía con su familia en Nueva York. Solomon ha sido engañado por un par de hombres que lo drogan y secuestran para ser después vendido como esclavo en el Sur en una plantación de Louisiana. Sin abandonar la esperanza, Solomon es testigo de un mundo cruel y violento, en donde la única ley es el abuso físico y emocional.
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