La moda

Siempre se ha considerado que la moda es un placer frívolo y egoísta que reafirma la vanidad del ser humano y divide las clases sociales según su vestimenta. Pero la moda es mucho más que eso. Al igual que miles de otras costumbres, la moda habla de la sociedad y su idiologia, muestra qué elementos son de importancia en una cultura y de qué manera su gente vive y se desarrolla en un contexto histórico determinado, que a su vez, éste influye en el qué y cómo sea esta vestimenta.

La moda ha unido relaciones personales y colectivas, ha levantado mitos, ha creado historias, ha movilizado voluntades y ha construido paraísos casi imposibles. El fenómeno moda lleva con ella algunas condiciones básicas: como su sentido de la fugacidad, su interés radical por el cambio espectacular, y las variaciones que llevan a su amor incondicional por todo lo que signifique novedad. Todo lo que es moda, pasa de moda, y esa facilidad para no permanecer es lo que define a su auténtico proceso.

La característica principal de la moda que nos es contemporánea, y observada desde el punto de vista del profesional, es que se encuentra ya totalmente industrializada y vinculada a otras organizaciones de empresas de diversos sectores industriales, comerciales, de servicios, de finanzas, por lo menos en lo que se refiere a las firmas de moda más importantes. Únicamente la casa Chanel conserva su independencia. La verdadera moda en el mundo entero la marcan, cada temporada, no más de media docena de poderosas firmas que se apoyan en un gigantesco potencial económico.

Las personas preocupadas porque su calidad de vida traspase a su ámbito social no dependen sólo de su ropa, sino toda su apariencia, su cuerpo y su comportamiento. La moda tradicional del vestido, en vez de adaptarse sólo a él, este se ha adueñado de todo el cuerpo y constituye el look personal. Los jóvenes hacen suya la moda hasta el punto de que no tienen una vida sin moda. La moda ahorra el pensamiento, la elección. El enorme éxito, popular y mercantil, de su sistema de imposición de modelos y conductas en el terreno de la indumentaria y las costumbres, se hizo indispensable en la emergente industria de los medios comunicación, la economía y la divulgación de modelos políticos y de convivencia. La moda se encuentra en medio del arte y la industria.

La actualidad, las noticias, la fama, y la posibilidad de negocio han acabado siendo obviamente sinónimos de moda. El sistema de la moda y su lenguaje definen toda la cultura de una imagen simbolizada por el cine, las noticias y el espectáculo en general. Lo que está de moda es noticia y recibe así el derecho a ser divulgado por los medios de comunicación más influyentes del mundo, que son los que se sitúan al servicio de la moda.

Por lo general, los grandes diseñadores crean estilos de moda muy sofisticados para un público que puede pagar precios altos por ropa de diseño, aunque la tendencia actual es confeccionar prendas más accesibles, inspiradas en la alta gama, dirigidas a un público totalmente juvenil. También se utilizan firmas famosas para comercializar otro tipo de productos para la mujer y para el hombre, como perfumes, pañuelos , bolsos y maletas. Las compañías mayoristas de moda poseen a un diseñador o un grupo de diseñadores en la creación de nuevas colecciones para cada temporada.

En la Unión Europea existen industrias de moda de fama mundial. Ciertos países son muy conocidos por un tipo particular de productos: Italia por los artículos de tejido y calzado, Alemania

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