La obesidad en México

INTRODUCCION

La obesidad es una enfermedad crónica que se caracteriza por la acumulación excesiva de tejido adiposo en el organismo y estructuralmente es el resultado del incremento total de adipositos y/o el incremento en la cantidad de grasa en éstas células. Se define como sobrepeso cuando el índice de masa corporal (IMC) es de 25.0 a 29.9 Kg/m2 y obesidad cuando este es mayor de 30 Kg/m2. Datos epidemiológicos previos han demostrado que la mortalidad se incrementa cuando el IMC es mayor de 25 Kg/m2.

La prevalencia de la obesidad es muy alta, por ejemplo en Estados Unidos de América, 97 millones de adultos tienen un sobrepeso o algún grado de obesidad. El estudio de Nacional de investigación de Nutrición y salud (NHANES III) estimó que un 54.9% de la población por arriba de 20 años se encuentran con sobrepeso u obesidad (32.6% sobrepeso y 22.3% obesos). En este mismo estudio, 59.4 % de hombres y 50.7% de las mujeres tienen sobrepeso o son obesos y la frecuencia es más alta en mujeres Negras (66.0 %), mujeres Mexicoamericanas (65.9 %) y hombres Mexicoamericanos (63.9%). La frecuencia de la obesidad es mayor en poblaciones étnicas que en anglosajones denotando que en las mujeres este fenómeno es más frecuente.

En EUA, el costo total atribuible a obesidad es de 9.2 mil millones, que representa el 5.7% del gasto para la salud. En la Habana Cuba encontraron que la población adulta de 20 a 59 años tanto hombres como mujeres tienden a incrementar su IMC y los valores de índice cintura/cadera (Ci/Ca) conforme la edad aumenta, encontrando un ligero aumento en mujeres, por la tanto un aumento en la morbilidad.

En México la obesidad constituye una causa importante en la morbilidad, ocupa el 4to lugar encontrando la distribución de la obesidad por tipo zona se distribuye de la siguiente manera; zonas rurales es un 10%, en suburbanas 12% y áreas urbanas 30 %. En relación a la distribución por grupos de edades, la obesidad se reportó la frecuencia fue la siguiente: 20 a 24 años 10.2% son hombres y 14.1 son mujeres; y de 30 a 34 años 27.2 son mujeres y 14.1 son hombres. Los estados mas afectados son Coahuila (32.9%), Baja California Sur y Tamaulipas 30% y con menor índice Oaxaca (12.4%), Chiapas (17%). Por otra parte, la obesidad es un factor de riesgo para patologías como hipertensión, diabetes tipo 2, enfermedad cerebrovascular, enfermedad de la vesícula, osteoartritis, alteraciones en el sueño o cánceres de colon, endometrial, mama, próstata, complicaciones en el embarazo, irregularidades menstruales, hirsutismo, incontinencia por estrés y depresión.

La obesidad se asocia a hipertensión cuando existen aumentos en el IMC tanto en hombres como mujeres. En adultos el IMC igual o mayor de 30 se presentó en 38.4% en hombres y 32.2% en mujeres, mientras que un IMC entre 25 y 29 se presentó en el 18.2% y 16.5% de hombres y mujeres respectivamente. Por otra parte, es bien sabido que si existe un incremento de 10 Kg. de peso este se asocia a un aumento de 3 y 2.3 mmHg en las presiones sistólica y diastólica respectivamente; aunque no son importantes estos incrementos se ha observado que el riesgo para enfermedad coronaria es de 12%, mientras que enfermedad cerebrovascular es de 24%.

Por otra parte, existen evidencias que el incremento paralelo de sobrepeso u obesidad más hipercolesterolemia se correlaciona con la distribución de la grasa corporal, dicho fenómeno es observado más frecuentemente en mujeres. Publicaciones previas han demostrado que en un periodo de 5 a 10 años, la elevación de 10 mg/dl de colesterol LDL se correlaciona en un porcentaje igual en relación de riesgo coronario. Además se ha comprobado que el colesterol normal o ligeramente disminuido tanto en hombres como mujeres puede existir en un IMC alto.

Otra de las complicaciones de la obesidad es la diabetes mellitus tipo 2 (DM 2). Se sabe que un IMC elevado de 22 kg/m2, es un riesgo para DM 2, sobretodo la obesidad de tipo abdominal. También se ha demostrado que la asociación de sobrepeso/obesidad, hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia, hipertensión y resistencia a la insulina aumentan la morbilidad y mortalidad de enfermedad cardiovascular o coronaria. Está demostrado que un IMC de 22 kg/m2 el riesgo a padecer un infarto al corazón es significativamente menor, mientras que un IMC 25 a 28.9 kg/m2 o mayor de 29 el riesgo se incrementa 2 y 3 veces respectivamente.

La asociación de sobrepeso y enfermedad cerebro vascular (EVC) no ha sido bien estudiada, sin embargo, hay reportes que la relacionan a la primera como un factor de riesgo mayor para EVC isquémico sobre todo cuando el IMC es mayor de 27 kg/m2. La obesidad también se ha asociado a enfermedad vesicular, ya que el porcentaje de colecistectomia asociada con obesidad se presenta en 20 por 1000 mujeres en un año cuando el IMC es superior de 40 kg/m2 comparada con 3 en 1000 con IMC menor de 24 kg/m2.

Así mismo, existen evidencias clínicas que el sobrepeso, incrementa la probabilidad presentar osteoartritis sobre todo en mujeres. Otra de las alteraciones frecuentes en el paciente obeso son los trastornos del sueño el cual es debido a la hipoxemia. Se sabe que un IMC mayor de 30 kg/m2 incrementa la probabilidad de producir apnea del sueño. También existe una relación entre obesidad y cáncer, dicho fenómeno es más frecuente en hombres que en mujeres. El riesgo de los obesos para desarrollar cáncer es 2 veces más en frecuente cuando el IMC es mayor 29 kg/m2. La mujer postmenopáusica obesa tiene un riesgo más elevado para presentar cáncer de mama o endometrio cuando el IMC es mayor de 30 kg/m2. Además, la obesidad sobre todo la del tipo abdominal se asocia con alteraciones menstruales, amenorrea o problemas de fertilidad. La obesidad además la encontramos relacionada con factores emocionales, afectando más a las mujeres quienes manejan baja autoestima por ser obesas.

Fundamentos Teóricos

La obesidad es una enfermedad crónica que se caracteriza por la acumulación excesiva de tejido adiposo en el organismo y estructuralmente es el resultado del incremento total de adipositos y/o el incremento en la cantidad de grasa en éstas células. Se define como sobrepeso cuando el índice de masa corporal (IMC) es de 25.0 a 29.9 Kg/m2 y obesidad cuando este es mayor de 30 Kg/m2. Datos epidemiológicos previos han demostrado que la mortalidad se incrementa cuando el IMC es mayor de 25 Kg/m2.

La prevalencia de la obesidad es muy alta, por ejemplo en Estados Unidos de América, 97 millones de adultos tienen un sobrepeso o algún grado de obesidad. El estudio Nacional de investigación de Nutrición y salud (NHANES III) estimó que un 54.9% de la población por arriba de 20 años se encuentran con sobrepeso u obesidad (32.6% sobrepeso y 22.3% obesos). En este mismo estudio, 59.4 % de hombres y 50.7% de las mujeres tienen sobrepeso o son obesos y la frecuencia es más alta en mujeres Negras (66.0 %), mujeres Mexicoamericanas (65.9 %) y hombres Mexicoamericanos (63.9%). La frecuencia de la obesidad es mayor en poblaciones étnicas que en anglosajones denotando que en las mujeres este fenómeno es más frecuente. (1)

La obesidad se asocia a hipertensión cuando existen aumentos en el IMC tanto en hombres como mujeres. En adultos el IMC igual o mayor de 30 se presentó en 38.4% en hombres y 32.2% en mujeres, mientras que un IMC entre 25 y 29 se presentó en el 18.2% y 16.5% de hombres y mujeres respectivamente. Por otra parte, es bien sabido que si existe un incremento de 10 Kg. de peso este se asocia a un aumento de 3 y 2.3 mmHg en las presiones sistólica y diastólica respectivamente; aunque no son importantes estos incrementos se ha observado que el riesgo para enfermedad coronaria es de 12%, mientras que enfermedad cerebrovascular es de 24%.

Así mismo, existen evidencias clínicas que el sobrepeso, incrementa la probabilidad presentar osteoartritis sobre todo en mujeres. Otra de las alteraciones frecuentes en el paciente obeso son los trastornos del sueño el cual es debido a la hipoxemia. Se sabe que un IMC mayor de 30 kg/m2 incrementa la probabilidad de producir apnea del sueño.

         También existe una relación entre obesidad y cáncer, dicho fenómeno es más frecuente en hombres que en mujeres. El riesgo de los obesos para desarrollar cáncer es 2 veces más en frecuente cuando el IMC es mayor 29 kg/m2. La mujer postmenopáusica obesa tiene un riesgo más elevado para presentar cáncer de mama o endometrio cuando el IMC es mayor de 30 kg/m2. Además, la obesidad sobre todo la del tipo abdominal se asocia con alteraciones menstruales, amenorrea o problemas de fertilidad. La obesidad además la encontramos relacionada con factores emocionales, afectando más a las mujeres quienes manejan baja autoestima por ser obesas.

Factores asociados a obesidad

Susceptibilidad Genética:

Los factores genéticos pueden desempeñar un papel importante en la patogenia de la obesidad o bien aumentar la susceptibilidad para su desarrollo. Se ha clonado cuatro genes cuyas mutaciones producen obesidad en los animales, y algunos de ellos parecen ser importantes en biología humana.

El gen de la leptina clonado en 1994, que se expresa únicamente en el tejido adiposo y en la obesidad ob/ob de herencia recesiva de los ratones, copias ambas del gen que son defectuosas debido a la existencia de un codón de interrupción que corta la síntesis de la proteina en el aminoácido 105, la proteina leptina es secretada normalmente por la células adiposas y los niveles de ARNm de la leptina en las células adiposas y la concentración de leptina circulante se encuentra elevadas tanto en al obesidad animal como en la humana, leptina puede regular directamente el metabolismo de la grasa independientemente del sistema nervioso central (SNC), el tratamiento de los ratones obesos con leptina disminuye la ingestión de alimentos y la grasa corporal, los defectos del corte y empalme del receptor de leptina son los responsables de la obesidad en el ratón db/db, que es fenotípicamente similar al ratón ob/ob.

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