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MODERNIDAD Y VANGUARDIAS DEL SIGLO XX EL MONUMENTO DE LA TERCERA INTERNACIONAL


Enviado por   •  18 de Enero de 2019  •  Ensayos  •  1.568 Palabras (7 Páginas)  •  113 Visitas

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UNIVERSIDAD DE LAS ARTES

MODERNIDAD Y VANGUARDIAS

DEL SIGLO XX

EL MONUMENTO DE LA

TERCERA INTERNACIONAL

PROFR. EUDORO FONSECA YERENA

FLAVIO FIDEL BÁEZ JUÁREZ


INTRODUCCIÓN

El constructivismo ruso fue un movimiento artístico muy influyente que floreció en Rusia en el siglo XX y evolucionó cuando los bolcheviques llegaron al poder en la Revolución de octubre de 1917. A través de este movimiento de arte moderno, se expresaron muchos de los avanzados artistas soviéticos que apoyaban los objetivos de la revolución.

El constructivismo contó con dos manifiestos, el primero elaborado por los escultores rusos Anton Pevsner y su hermano Naum Gabo, y el segundo elaborado por el grupo de artistas cercanos a Vladimir Tatlin: Gabo y Pevsner. El manifiesto del grupo de Tatlin incidía más en los aspectos productivistas y terminaba de manera apasionada con las consignas:

“¡Abajo el arte! ¡Viva la técnica!”

“No hay más arte colectivo que el de la vida constructiva”.

MONUMENTO A LA TERCERA INTERNACIONAL

La Gran Guerra interrumpió la continuidad lineal y evolutiva del siglo XIX, y la acción revolucionaria reapareció en 1917. Pero esta aceleración no puso en tela de juicio el avance de la historia, el cual cambiaba de velocidad, pero no de dirección ni de finalidad.

Tras la Revolución de Octubre, la utopía dejó de ser la representación abstracta de una sociedad liberada proyectada a un futuro lejano y desconocido, para convertirse en el imaginario desenfrenado de un mundo por construir en el presente.

En 1919, en medio de la guerra civil rusa y de una ola de levantamientos revolucionarios en Europa Central, se realizaría en Petrogrado, por iniciativa de Lenin y el Partido Comunista de Rusia, el I Congreso Mundial de la Internacional Comunista[1].

En ese contexto, Vladímir Yevgráfovich Tatlin (Владимир Евграфович Татлин), uno de los más importantes constructivistas rusos, inició el proyectó de una torre de más de 400 metros de altura, con estructura de acero soportando en su interior tres cuerpos acristalados destinados a edificios públicos. Estos cuerpos eran figuras geométricas que realizaban un giro sobre sí mismas con diferentes períodos. [pic 1]

Inspirada en el mito de la Torre de Babel y diseñada desde el constructivismo, fue pensada como un Monumento a la Tercera Internacional que no solo debía ser admirado sino también utilizado para demostrar que el arte era un instrumento necesario para la construcción del socialismo. Además, que no solo se trataba de crear un símbolo sino la demostración concreta de que en la nueva sociedad podía surgir la fusión entre la estética y la política.[pic 2]

Este proyecto arquitectónico difería profundamente de todos sus predecesores. No tenía nada que ver con la verticalidad lineal de la Torre Eiffel, que se limitaba a celebrar la modernidad industrial, ni con el simbolismo convencional de la Estatua de la Libertad, ni tampoco con la Torre del Trabajo de Auguste Rodin, con el que tanto se le quiso comparar. Porque Tatlin rompía con la concepción tradicional del arte y la cultura.

El proyecto estaba destinado a ser la construcción más grande de Petrogrado y de la Unión Soviética, dejando atrás a la Torre Eiffel como la construcción más alta del mundo, marcando así su poderío económico y tecnológico.

Pretendía materializar con el monumento un símbolo del socialismo, manifestando que era el resultado de “unir formas puramente artísticas con finalidades puramente utilitarias”; pues eran “modelos que estimulan las invenciones en la tarea de crear un mundo nuevo e invitar a los productores para que tomen el control sobre las formas de la nueva vida cotidiana”.

El proyecto que se diseñó para ser construido en Petrogrado como monumento y sede de la Tercera Internacional debía incluir una oficina de telégrafos y varios restaurantes, igualmente de una serie de gigantescas pantallas en las cuales se mostrarían las últimas noticias del mundo, del movimiento obrero internacional y del Partido Comunista de Rusia.

Consistía en una torre de acero rojo que ascendía en una doble espiral más de cuatrocientos metros hacia el cielo, como una representación de la dialéctica hegeliana; inclinada hacia un lado en el ángulo del eje terrestre, conteniendo en su interior cuatro estructuras de vidrio de diferentes formas, las cuales rotarían a distintas velocidades: el Cubo, albergaría al gobierno soviético (Sovnarkom) y su rotación duraría un año; la Pirámide, alojaría a la Internacional Comunista (Komintern) y giraría sobre sí misma en el curso de un mes; el Cilindro, con una rotación diaria, se convertiría en sede de un órgano de propaganda publicado simultáneamente en varios idiomas, con una sala de conferencias, una imprenta, un telégrafo, una radio y un poderoso proyector capaz de iluminar la noche con eslóganes revolucionarios; por último la media Esfera rotaría en una hora.

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