Marketing Politico

El Candidato/Julio Cesar Herrero

La primera pregunta que se hace la dirección inconscientemente al invitar a un político al programa de televisión es:

La televisión está compuesta por una sucesión de programas que ya sea un debate o una entrevista de su de contenido solo espectáculo y debe estar producido, escrito y realizado para despertar el interés del espectador. Por eso es importante ver el programa al que se le ha invitado para saber cómo funciona quien interviene y cuánto dura.

Por eso es importante saber lo siguientes aspectos:

Tipo de programa

• ¿Es una entrevista cerrada?

• ¿Quién pregunta?

• ¿Con quién debatiré?

• ¿Sobre qué?

• ¿Cuál es el tono del espacio?

El equipo del programa tiene el contenido y los datos necesarios para hacerlo, sólo les faltan las personas que hablen de los temas propuestos, es ahí cuando invitan al político. Si decide asistir debe hacerse dos preguntas:

 ¿Puedo aportar algo nuevo en mi intervención?

La respuesta es afirmativa, su intervención en la agradecerá el equipo del programa espectadores.

Si no es así debe hacerse otra pregunta:

 ¿Por qué no busco algún dato nuevo que aportar al debate?

En la televisión existen distintas herramientas para dar ritmo al programa los cuales el colaborador de desahogar:

1. Pieza o VTR: video cerrado, esto es, con un principio y fin, con voz en off, y que puede incluir declaraciones de protagonistas y gráficos para apoyar la información que se da en el mismo, suelen ser de 50-60 segundos.

2. Total o declaración: se le llama “total” a la declaración una persona ante cámara. En el radio se la da el nombre de “corte” sirve para hacer avanzar un espacio así otro tema apoyo para el que se trata en ese momento.

3. Colas: imágenes que aparecen mientras los colaboradores o presentadores hablan. Sirven para apoyar el tema que está tratando en cada momento y suelen repetirse.

4. Crawlls: Rótulos con información que aparecen cruzando la pantalla de derecha a izquierda con texto informativo sobre lo que se está hablando o sobre lo que se va a hablar en el espacio.

5. Rótulo: Sirve para identificar a la persona que aparece en pantalla en ese momento con su nombre y cargo, también se utiliza para destacar declaraciones del invitado. Las cámaras median la intervención y condicionan el mensaje. Es recomendable tener algunas cuestiones claras aunque parezcan triviales, pueden alterar el mensaje condiciona su interpretación en un sentido distinto al deseado.

 Las camisas de rayas, más que nada, cuando son delgadas y está muy próximas unas a otras, o de cuadros distorsionan la imagen, cuando la cámara se fija en este tipo de formas da la sensación de que la imagen “baila” lo que resulta muy desagradable para la audiencia.

Todas las personas que trabajan ante las cámaras deben maquillarse, porque el efecto de las potentes luces crea sombras y potencia pequeñas manchas que todas las personas tienen en la cara, también ojeras e imperfecciones que a simple vista no se ven, pero no pasan la prueba de la cámara y los focos.

La cámara es un “ser vivo” y como tal ama y odia. Se puede ser la persona más atractiva y mejor vestida del planeta, pero no significa que pueda encandilar al objetivo. La única herramienta para encandilar a la cámara, independientemente del aspecto físico, es el discurso, la facilidad de palabra, la claridad de oratoria, sabe proyectar la voz y una buena educación.

Una vez que el político se encuentra en el programa de televisión, es aconsejable mirar al periodista, no a la cámara. El mirar directamente a la cámara cuando se es entrevistado, convierte al entrevistador en un oyente de su discurso, no lo hace sentir partícipe de una conversación.

Sólo en dos circunstancias el político puede ver directo a la cámara:

1. Cuando el periodista está impidiendo que el político desarrolle su discurso con normalidad o esté tensionando la situación

2. Cuando el político desee lanzar un mensaje concreto a los televidentes.

En televisión hay que hablar con frases sencillas, fáciles de entender y empleando un lenguaje al alcance de la inmensa mayoría.

Para la preparación de una entrevista, es importante que el político se haga algunas preguntas. Por así decirlo “botiquín de primeros auxilios” en una entrevista no pactada. Sobre todo si se trata de una intervención amplia. Es recomendable tener claras las respuestas para las cuestiones que se detallan a continuación:

1.- ¿Cuál es la pregunta que podría ocasionar un mayor daño al partido?

2.- ¿Qué pregunta podría plantear un mayor reto a la hora de responder?

3.- ¿Cuál es el tema que me gustaría evitar y por qué?

4.- ¿Cuál es la pregunta más previsible?

5.- ¿Cuál es la pregunta más complicada referida a la opinión personal?

Una vez aceptada la entrevista el político debe considerar llegar con tiempo suficiente al estudio de radio o cadena de televisión para adecuarse al ambiente de tensión. Son dos medios de comunicación, que no invitan al diálogo, a la discusión, a la reflexión tranquila. Un comportamiento habitual de los políticos es saludar exclusivamente al periodista que va a entrevistar, siempre ser educado para mantener buenas relaciones.

El periodista busca la declaración del protagonista de la noticia. Una de las primeras cuestiones que el político debe conocer es qué tipo de declaraciones existen, al menos para el periodista, como lo son:

Onthe record.-Cuando que el político

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