Orígenes y evolución de la criminología . Política criminal

[pic 1] República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación

Universidad Nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora

Táriba, Municipio Cárdenas, Estado Táchira, Venezuela.

ORÍGENES Y EVOLUCIÓN DE LA CRIMINOLOGÍA

POLÍTICA CRIMINAL.

(Ensayo).

[pic 2]

INTEGRANTES:

BELLO OVIEDO BLEYLLERY MARIEL C.I.V- 28.285.008

GONZÁLEZ MEDINA GABRIEL ALEJANDRO C.I.V- 27.567.248

HENÁNDEZ YEPEZ ISNEDY ALEJANDRA C.I.V- 32.071.659

MARIN VILLAMIZAR YULIANA ESTEFANIA C.I.V- 25.633.202

VEGA ORTIZ JAIRO ALONSO C.I.V- 30.818.167

SÁNCHEZ MORA KLUIVERT STEVEN C.I.V- 29.830.571

ABOG. DOCENTE: CLEMIN COLMENARES.

Carrera: Derecho año:2 sección:2

Introducción:

Entre las metas de la sociedad se encuentra la armonía en común, fundada en el bienestar social, apoyada en el derecho de los hombres; tristemente la situación real es lo contrario, ya que cada día aumentan las conductas desviadas y delictuosas, descritas como dañinas, porque afectan claramente a la sociedad y son motivadas por factores que se encuentran implícitos en el ambiente donde brota y se desarrolla la persona. La delincuencia es un problema social que ha acompañado al ser humano desde tiempos ancestrales, con el paso de los años esta ha evolucionado con el humano mismo y las formas de delinquir, siendo entonces la delincuencia un problema que atañe a la sociedad en toda su estructura es de lógica pensar que se estudiaría, se analizaría y buscaría en cualquier medida la corrección o la cura para este mal. De ahí que nazca la criminología y que a este se le acoplen en su estudio muchas otras ramas, haciendo en este trabajo especial énfasis a la sociología; y como no si es de competencia general. Pero ahí viene entonces la pregunta que se ha formulado más de una persona en la vida ¿Por qué el hombre delinque? ¿que determina su inclinación a la criminalidad? ¿Podrá la ciencia y la evolución alcanzar la cura para esta enfermedad social? Tratando de responder a estas interrogantes se han creado hipótesis y diversos saberes sobre la razón o motivos que llevan al ser humano a cometer actos delictivos, de ahí que nace entonces esta ciencia que se denomina criminología; con el fin de responder a todas esas incógnitas y prevenirla. El término “Criminología” ha sido definido por prácticamente todos los autores clásicos en Criminología, encontrando una variedad enorme de definiciones desde el siglo XVIII hasta la actualidad. Sin embargo, pese a las discrepancias existentes en la definición del concepto, existe considerable consenso acerca de la definición de Criminología como ciencia que aplica el método empírico al estudio del comportamiento antisocial y las formas de reacción social ante la desviación. El autor Rafael Garófalo describe a la Criminología como “la ciencia del delito”. En este escrito se abordarán diferentes temas de la criminología, tales como su nacimiento, concepto, evolución, escuelas, división analítica, fundamentos, tendencias, y la política criminal entre otros…

La Criminología tiene como objeto de estudio el análisis del delito, el delincuente, la víctima, el control social, la inclusión de la víctima, el control social y procesos de reinserción son los más recientes para ser estudiados. Su función está dirigida esencialmente a explicar y prevenir el crimen e intervenir en la persona del infractor, se interesa más en prevenir el delito que castigarlo, es decir, tiene orientación prevencionista. Hace acercamientos al fenómeno delictivo sin prejuicio, procurando obtener una información directa de éste. Su carácter interdisciplinario se encuentra en la utilización del saber científico de otras ciencias que ayudan a comprender esa realidad y la nutren, ejemplo: biología, sociología, psicología, es decir, disciplinas que estudian al hombre y la sociedad. Formando una síntesis de los conocimientos aportados por estas disciplinas, ya que el delito es un fenómeno que trasciende estas ciencias. La Criminología toma el conocimiento que aportan esas ciencias, lo amplía y modifica, buscando formular probabilidades. Coordina e integra la información que obtiene de aquéllas que se interesan por el fenómeno delictivo, retroalimentándose y se enriquece con el resultado de su propio saber.

Nacimiento:

La lucha contra el delito y el estudio de los delincuentes y del castigo data de la antigüedad, filósofos como Sócrates, Platón o Aristóteles ya conversaron sobre este tema, atribuyendo los delitos a deficiencias físicas o mentales e incluso a la herencia. A mediados del siglo XIII, Santo Tomás de Aquino intentó también sentar las bases de la filosofía del derecho penal en su obra “Escolástica”, y en la Edad Media se realizaron algunos estudios médicos para investigar crímenes aislados. Probablemente el abogado Tomás Moro “1516” fue el primero en destacar la vinculación del crimen con los factores socioeconómicos y con la estructura social. Para este autor el crimen responde a una diversidad de factores, pero de todos ellos son más relevantes los socioeconómicos, por ejemplo, la desigual en la distribución de la riqueza.

Los positivistas bautizaron con el nombre de Escuela Clásica, a todo lo anterior a ellos a las doctrinas que no se adaptaban a las nuevas ideas, a los recientes sistemas. El mundo clásico partió de una imagen excelsa, ideal, del ser humano como centro del universo, como dueño y señor absoluto de sí mismo y de sus actos. El dogma de la libertad que hace iguales a todos los hombres (sin diferencias entre el hombre delincuente y no delincuente) y fundamenta la responsabilidad como consecuencia del mal uso de la libertad en una situación concreta, no a pulsiones internas ni a influencias externas. Para los clásicos, el delincuente es más que un pecador que optó por el mal, pudiendo y debiendo haber respetado la ley.

Para esta escuela, los hombres viven en sociedad de acuerdo a un contrato social por el cual cada sujeto suscribe libremente su adhesión a la comunidad que le provee orden y seguridad. Este ente social castigara aquellos que realicen conductas inversas a ese orden establecido, que da equilibrio y estabilidad al grupo humano. El delito, para esta escuela, no es un simple hecho, sino un ente jurídico, según la fórmula sacramental de Carrara, concebida como principio razonable de toda su construcción. Dice Carrara no es más que una idea de relación: la relación contradictoria entre el hecho de hombre y la ley.

...