Practicas Y Consumos Culturales - Voto A Los 16 años En Argentina

JUSTIFICACION

La importancia de nuestro informe radica en que a lo largo de los últimos años los jóvenes han empezado a ganar un mayor protagonismo en la vida política de nuestro país. En las épocas que corren, podemos observar con entusiasmo como la juventud ha cambiado su manera de vivir y pensar a la sociedad y sus problemas, tomando diversas posturas frente a los asuntos públicos, y debatiendo temas tales como un proyecto de nación, de estado, economía y políticas sociales, etc. Es notable como los jóvenes muestran un mayor interés por cambiar las cosas que los afectan de manera directa. De esta manera consideramos que la opción de votar a los 16 años amplía las posibilidades de los jóvenes de debatir y modificar aquellas cuestiones que le competen.

El informe está incluido dentro del núcleo temático PRACTICAS Y CONSUMOS CULTURALES porque entendemos que la política y la comunicación son prácticas de la vida cotidiana que todos los ciudadanos ejercemos día a día.

Todo va de la mano con los cambios que los jóvenes, como dijimos anteriormente, han manifestado en los últimos años, los cuales han mostrado tener conciencia política mucho antes de la edad permitida anteriormente para votar; como protagonistas activos. Arendt en ese sentido sostiene que lo que debe caracterizar al mundo político es la presencia de numerosas perspectivas y pluralidad, las cuales deben lograr integrarse y así constituir una verdadera cultura política. Sin la participación activa por parte de la sociedad en general y, dentro de esta, de los jóvenes en particular, no habría forma de conservar el carácter democrático de la cultura política, y así de las instituciones sociales y políticas. Se dieron debates, se escucharon opiniones, hubo acuerdos y desacuerdos; dirimiendo diferencias. En fin, algo riquísimo y saludable para nuestra democracia.

El derecho a votar desde los 16 años, sin duda abrirá nuevos espacios de participación política y consolidará otros. Es por ello que queremos interiorizarnos sobre la manera en que esos espacios se desarrollaran, ya que tendrán como protagonistas a un sector de la sociedad, los jóvenes, que comenzara a jugar un rol activo a través del ejercicio del derecho a elegir a sus representantes. Antes, desde los 18 años se permitía votar; un sector de la ciudadanía podía ejercer ese derecho; solo el hombre podía hacerlo, luego se le dio ese derecho a la mujer, y sin duda significo un cambio de época en nuestra historia. La mujer se hizo oír, hoy el joven también lo ha logrado (a través de acciones) y es por ello que también es algo importante que se lo haya incorporado a esta responsabilidad que implica el votar.

Todo no sería posible sin la comunicación. El joven se ha ido desempeñando como agente activo, como sujeto de cambio, de la política. Pensar a la misma no sería posible sin ese sujeto (de iniciativa), que también es un sujeto de comunicación. La comunicación constituye una condición de posibilidad de la política, ya que supone siempre una relación entre los hombres por la puesta en común de ideas a través de la palabra y la acción.

Para llegar a conocer la manera en que el acceso al voto desde los 16 años constituirá los espacios de participación política, desarrollaremos una encuesta a jóvenes de 16 y 17 años de edad (ver anexo) desde la cual obtendremos datos objetivos sobre el tema, además de la articulación con aportes de teóricos en la materia. El acceso al voto a los jóvenes desde los 16 años, no solo beneficiara a los mismos, sino que les dará una nueva herramienta desde la cual participaran como sujetos de iniciativa. Lo político implica acción colectiva por parte de todos, de nosotros antes que yo, una idea de lo público e intervención activa.

Sostenemos fuertemente que los jóvenes son una característica vital y una forma importante de participación ciudadana en la vida pública, se verán favorecidos en la expansión de sus derechos y contribuirán, sin duda a mantener viva nuestra cultura política democrática.

MARCO TEORICO

El marco teórico que a nuestro criterio ofrecerá respuestas al problema en cuestión y de alguna manera fundamentará nuestro objeto de investigación comprende a teóricos, autores que ven reflejadas en sus obras y reflexiones a temas como la comunicación, la política (vínculos entre ambas), la lengua, la importancia de lo colectivo, la democracia, participación y los derechos.

Para establecer la relación entre comunicación y política se considera que esta se encuentra mediada por los intercambios, las construcciones y la puesta en común de ciudadanos que de alguna manera comparten el mismo espacio donde conviven con sus experiencias, organizaciones e instituciones.

El espacio donde se genera la participación según Calleti , son los ámbitos educativos (escuelas, Universidades), ya que en ellos se favorecen las discusiones, análisis, como practicas político – sociales a partir de las cuales se vehiculizarán las transformaciones en la realidad; cambios políticos a través de la comunicación. De esta manera se va configurando nuestra historia social, política y cultural.

Otro aspecto es el que Héctor Schmucler y María Cristina Mata resaltan al sostener que los medios de comunicación en la actualidad plantean nuevos espacios físicos y simbólicos que actúan como lugares de producción del sentido político y estrategias propias de tales espacios, articuladas por la mediación tecnológica y el consumo cultural.

Nada de lo antes mencionado sería posible si el sujeto no fuese parte de una comunidad. La misma, configura al sujeto a través de la lengua. El hombre se vale de ella para integrarse al mundo y conocerlo, adquiriendo modelos compartidos por otros individuos. En lo que nos atañe a nosotros en cuanto a los fines que perseguimos con el presente informe, es de suma relevancia aclarar que el hombre mismo (podemos poner al joven de 16 años en particular como ejemplo) va forjando una cultura, la cual es relevante para la vida política, constituyendo nuestra cultura política. Esta última tiene como antecedente para su nacimiento, a la acción política, que además debe ser pública, colectiva y sobre todo intencional. No debemos dejar pasar por alto el discurso político, dentro del cual están todas las aspiraciones, deseos y metas de los individuos. Este discurso es una parte de la vida de los sujetos, utilizado por ellos. Las cuestiones políticas tienen un mayor alcance y dimensión al dirigirlas a una audiencia mayor de modo impersonal y general;

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