Eric Hobsbawn, capitulo dos, La revolución mundial, historia del siglo XX, critica, Buenos Aires, 1998, págs. 62-91.
Enviado por Kamila Del Toro • 12 de Junio de 2016 • Apuntes • 1.339 Palabras (6 Páginas) • 506 Visitas
Eric Hobsbawn, capitulo dos, La revolución mundial, historia del siglo XX, critica, Buenos Aires, 1998, págs. 62-91.
Adriana Hernández Ponce – cód. 0391420049
Cuarto semestre de comunicación social
11 de mayo 2016- Cartagena
El capítulo número dos del libro historia del siglo XX denominado la revolución mundial inicia abordando el tema de la revolución como constante en la historia del pasado siglo y centra su atención en la revolución Rusa de 1917, presentando a esta como el acontecimiento crucial del siglo y las pautas que estableció para las revoluciones posteriores, para esto Hobsbawn divide este capítulo en siete aspectos fundamentales.
El primer punto del texto inicia contextualizándonos y dando datos importantes sobre aspectos que marcaron la historia de Rusia. Acontecimientos como la revolución de octubre[1] y sus pretensiones, la oleada de descontentos sociales tras los regímenes zaristas y el marco de pobreza, ignorancia y retraso en que se encontraba este país son algunos de los aspectos que dividían las opiniones sobre la posible revolución que podría darse y de esta manera sacar o liberar a Rusia. Por un lado estaban los revolucionarios marxistas que veían en el derrocamiento del zar y del sistema feudal una posible revolución burguesa y otros por el lado de los espíritus románticos como los llama Eric que veían la revolución socialista proletarizada como camino a la reconstrucción del estado, pero si algo se tenía claro era que las condiciones en que se encontraba Rusia no eran las adecuadas para la realización de ninguna de las revoluciones mencionadas anteriormente.
El peso de la guerra sobre los estados los llevo al borde del abismo, solo algunos pudieron salir intactos y hasta más fuertes, como es el caso de los Estados Unidos, pero infortunadamente la suerte para muchos no fue la misma, por el contrario el fin de los conflictos desencadeno agitación en la mayor parte de estos estados y como esperanza para contrastar los hechos mencionados con anterioridad se encontraban los partidos socialistas que encarnaban la alternativa para cambiar el viejo sistema. Hasta este punto lo último que faltaba era una señal para que los pueblos cambiaran estos viejos sistemas y recogieran o se integraran en unos nuevos, estas señales las origino la Revolución Rusa[2].
El régimen zarista se vio obligado a abdicar tras los múltiples sucesos como las manifestaciones de las mujeres trabajadoras y el gran descontento de la población, una vez abdicado el zar el poder fue tomado o sustituido por un gobierno provisional que gozo de la simpatía e incluso de la ayuda de los aliados occidentales de Rusia y al mismo tiempo surgieron en todas partes los soviets (consejos de trabajadores) que tenían el poder en la vida local, pero que no sabían qué hacer con él, ni siquiera como debían actuar y que fueron dirigidos por grupos socialistas más radicales que un principio permitieron al gobierno provisional gobernar, pero insistían en integrarse en asambleas para influir en el gobierno y controlar algunas milicias. El gran problema hasta este punto en Rusia era que muchos de los habitantes ya no aceptaban la autoridad, ni siquiera la de los revolucionarios, por el contrario exigían de acuerdo a los grupos a los que pertenecían, es decir los obreros, agricultores y población que les cubrieran las necesidades que cada uno padecía y que buscaban saciar a como dé lugar.
De los partidos y organizaciones revolucionarios, los bolcheviques fueron los más importantes pues entendían y conocían las necesidades de las masas, lo que les indicaba como debían actuar y proceder y de esta forma se fueron ganando el respaldo y el apoyo de la población, lo que no paso con el gobierno provisional que fracaso en su intento de que los rusos obedecieran y cumplieran las leyes instauradas por estos.
La rápida aceptación de los bolcheviques que se instauraron como partido obrero propicio la disolución del gobierno provisional y la “toma del poder” por parte de estos que estaban bajo el mando Lenin, pero lo que se venía para Rusia puso a tambalear a este nuevo gobierno que aun con minorías supo sobrevivir de los ataques de los aliados y a las encrucijadas que estos tendieron. Posteriormente a estos acontecimientos y los hechos que llevo a Rusia a sufrir de pobreza y un gran atraso fueron contrarrestadas con la creciente ola revolucionario que barrió el planeta en los siguientes años a la revolución de octubre, lo más importante de la revolución rusa fue que no solo se quedó con crear revolucionarios, si no con crear revoluciones y su impacto fue tan grande que penetro no solo en Europa si no en América: Cuba con los trabajadores de tabaco, España con su “benio bolchevique”, Argentina y sus movimientos estudiantiles y México con su revolución mexicana que inicio su fase más radical en 1917, entre otros países que apoyaron a los bolcheviques y formaron soviets.
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