Historia De Virgen De Loreto

10 de Diciembre La Virgen de Loreto.

Patrona de los aviadores.

Loreto significa: rodeado de árboles de laurel.

En el norte de Italia hay un santuario mariano sumamente famoso, visitado continuamente por millares de peregrinos. Se llama la Casita de Nazaret en Loreto.

A este santuario han ido en peregrinación famosos santos. Por ej. San Carlos Borromeo, San Luis Gonzaga, Santa Teresita, San José Cuperttino, San Juan Bosco, los Pontífices Juan XXIII, Pablo VI, y Juan Pablo II, y muchos más. Es un templo muy amado por los católicos de Europa.

Empezó a existir este santuario cuando los Cruzados tomaron a Jerusalén y hacia el año 1200 empezaron a llevar a Italia materiales de la Tierra Santa para construir una réplica o imitación de lo que pudo ser la casita de Jesús, José y María de Nazaret.

Cuando después de muchos viajes portando materiales lograron hacer una edificación parecida a la que pudo habitar la Sagrada Familia, comenzaron a invitar a los devotos a visitar aquel lugar sagrado y a honrar en él a la Madre de Dios.

Y, como sucede en los santuarios de todo el mundo, comenzaron a obrarse allí admirables milagros. Los santuarios son precisamente lugares donde Dios, misteriosamente, sin saber por qué, concede impresionantes favores a los que van allí a pedirle su ayuda. Quizás porque la fe del peregrino es muy viva y se aumenta con el contagio del fervor de los demás orantes en ese lugar, en cada santuario se consiguen gracias que en otras partes no se habían logrado obtener. Y esto sucede en Loreto continuamente.

Algunos, para darle más poesía a la existencia de la Casa de Loreto, llegaron a afirmar que esa construcción había sido llevada por los ángeles, volando por los aires, desde Nazaret. Por eso la Virgen de Loreto es Patrona de los aviadores. Esa narración es sólo una bella leyenda, pero a la gente le gustó y algunos hasta la creyeron.

Nosotros al recordar hoy en esta fiesta la Vida de María, José y el Divino Niño en Nazaret, nos alegramos de ser amigos y devotos de tan santas y amables personas, y pedimos a Jesús, José y María que sigan bendiciendo cada día más y más a nuestras familias y a nuestras casas. Quiera Dios que cada uno de nuestros hogares sea una réplica o imitación fiel del santo Hogar de Nazaret.

La Virgen de Loreto

Patrona de la Aviación Argentina

En nuestro país existen dos santuarios públicos para el culto de Nuestra Señora de Loreto: uno en la provincia de Santiago del Estero, situado en el lugar que lleva el nombre de la Virgen, a unos 50 kilómetros de la capital, en donde se la venera desde fines del siglo XVII, sin que se haya podido establecer documentalmente cómo fue‚ llevada a dicho lugar o cómo apareció en él; el otro en la ciudad de Mendoza, al pie de los Andes. Ante la imagen de este último, los aeronavegantes argentinos elevamos nuestras preces por la grandeza de las alas de la patria el 10 de diciembre de 1920, fecha desde la cual las autoridades eclesiásticas cobijan a la gente del aire bajo su manto protector. El espíritu profundamente cristiano de nuestros aviadores se ha traducido en hechos elocuentes y significativos, al erigirse en las bases aéreas militares y en aeródromos civiles pequeños altares para veneración de la Santísima Virgen de Loreto, a quien la Iglesia consagró como patrona de nuestra aviación en 1920. El primero en construirse fué el de la base aérea militar de El Palomar, entre dos hangares, en 1932, costeado por la señora María Florinda Martínez de Zuloaga; pero la ampliación de los edificios y la necesidad de un lugar de mayor recogimiento impusieron el traslado a su sitio actual, en el parquecito que rodea la sede del comando en dicha base. La devoción de nuestro mundo aeronáutico trascendió al civil, repercutiendo simpáticamente en el alma sensible de las personas que interpretan y comparten estos sentimientos. El 28 de noviembre de 1933 tuvo manifestación concreta cuando la gentil señorita María Alaide Foppa, hija del cónsul argentino en Ancona, señor Tito Libio Foppa, hizo entrega al director de la Escuela de Aviación, capitán Pedro Castex Lainfor, en acto sencillo y emotivo, de una graciosa escultura en madera que representaba a la Virgen de Loreto. En la ceremonia de recepción de la imagen estuvieron presentes todos los jefes y oficiales y la tropa formada en cuadro, siéndole presentada también al capitán Castex una fotografía del Santuario de Loreto, en Italia, con la siguiente dedicatoria del ilustrísimo obispo de esa diócesis:

"A la Escuela Militar de Aviación de la República Argentina, la celestial patrona y madre de todos los aviadores envía una bendición especial desde la Santa Casa de Loreto".

Los delicados sentimientos de la señorita Foppa la habían llevado a hacer consagrar la imagen en el propio santuario, antes de emprender viaje a la Argentina. Esta es la misma que hoy se venera en la Escuela Militar de Aviación, en Córdoba, adonde fue trasladada en vuelo en 1937, al cambiar de asiento el instituto. Allí se la colocó en 1941 en un altar, donación también de la señora de Zuloaga, quien en nota dirigida al director, comodoro D. Justo J. Ossorio Arana, se expresó así:

"La debida solicitud que Ud. dedica a la realización de esta evocación espiritual dentro de la Escuela, halaga lo más profundo de mis sentimientos cristianos, al comprobar que los hijos predilectos de nuestra amada aviación, que han consagrado su vida al lado de mi esposo para alistar las alas argentinas que defender n el cielo de la patria, confían ante Dios, en el amparo y protección de la Virgen de Loreto, para brindarle a cada instante el riesgo permanente del deber, con la firme convicción y absoluta tranquilidad de espíritu que los hace merecedores de su gran misericordia y de su infinita bondad.

"Que la bendición del cielo acompañe siempre a nuestros valientes aviadores"

Por S. D. de fecha 16 de julio de 1942 fue‚ aceptada y agradecida esta donación. El 10 de diciembre de 1933 elevóse en la Fábrica Militar de Aviones, en Córdoba, un artístico templete, debido a la piadosa munificencia de la señora Mercedes Lacalle de De la Colina. Al año siguiente se consagro, en la base aérea militar de El Plumerillo, ofrecido por la señora de Zuloaga al celebrarse el primer aniversario de la inauguración de esta base, el 28 de mayo. Los jefes y oficiales aviadores han tenido igual iniciativa al erigir por su cuenta en la base aérea militar "General Urquiza", un templete más en homenaje a la Patrona de la Aviación. En estos altares, cuya bóveda es el cielo de nuestra bandera, pues son erigidos al aire libre, se ofician ceremonias religiosas por los compañeros caídos en el cumplimiento de su deber, o en acción dé gracias con motivo de las faustas recordaciones de la patria. Ellos son también sitios de recogimiento del personal, y al pie de la imagen de la venerada Patrona nunca faltan flores que las manos piadosas de esposas e hijas que las depositan en muda plegaria. El ilustre sacerdote argentino reverendo P. Andrés Calcagno nos da con su autorizada palabra algunos detalles interesantes, que pudiéramos presentar como reseña histórica sobre la Virgen. Dice así: Por que la Virgen de Loreto es Patrona de los aviadores: "La razón que podría llamar disciplinaria por la cual la Virgen de Loreto ejerce el patronazgo de todos los navegantes del aire, es que por tal la constituyó y declaró la Santa Sede por medio de la Sagrada Congregación de Ritos, a la cual est n reservados los asuntos de esta naturaleza. El decreto correspondiente, que lleva fecha 24 de marzo de 1920, dice textualmente: Sagrada congregación de Ritos: "Declárase Patrona de los aviadores a Nuestra Señora de Loreto. DECRETO: Nuestro santísimo padre Benedicto Papa XV, oyendo benignamente las súplicas que por intermedio del infrascripto cardenal prefecto de la Sagrada Congregación de Ritos, le dirigieron muchos obispos y fieles, instituyó y declaró con su suprema autoridad Patrona de los navegantes del aire a la Santísima Virgen de Loreto, sin que nada pueda oponerse a dicha declaración.

Roma, marzo 24 de 1920, CARDENAL Vico, Obispo de Puerto y Santa Rufina, Prefecto de la S. C. de Ritos".

"La razón ocasional, como puede verse en el texto del decreto transcripto, fueron las súplicas que elevaron al Papa infinidad de obispos y fieles pidiendo dicha declaración. Y la razón fundamental de estas peticiones estriba en el hecho histórico de la traslación milagrosa de la casa de Nazaret donde se hizo carne el Verbo de Dios y donde Jesucristo pasó la mayor parte de su vida en compañía de la Virgen y San José. Dicha casa, humilde como todas las casas de familias modestas, apareció en Dalmacia primero, cerca de Recanati después y, finalmente, en Loreto, donde sé halla actualmente, encerrada en la gran Basílica que da su nombre a la ciudad. El hecho histórico de esta traslación, aunque ha sido combatido por algunos historiadores del campo católico, es, a nuestro entender, rigurosamente histórico. Y aunque no es este el lugar de dilucidarlo, basta enunciar el hecho de que la casa, tal cual se ve en la Basílica de Loreto, no tiene cimientos. Estos se hallan en Nazareth y responden exactamente por su configuración a la casa de referencia. El hecho de haber sido trasladada por los aires al lugar en que se halla ha sugerido al pueblo cristiano la idea de dar por patrona a los navegantes del aire a la Virgen en su advocación de Loreto, cuya estatua decora el nicho principal erigido en el interior de la casa de Loreto para la celebración de los divinos oficios".

"Quien esto escribe estuvo en dicha casita

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