Beneficios Para La Salud Del Consumo De Frutos Secos

Beneficios para la salud del consumo de frutos secos, con especial referencia al control del peso corporal

Abstract

Los frutos secos son una parte integral de los patrones alimentarios mediterráneos, y se cree que su incorporación en las dietas regulares de los seres humanos para proporcionar muchos beneficios para la salud. El reciente reconocimiento de los frutos secos como alimentos" saludables para el corazón" por la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU. ha dado un gran impulso a la imagen positiva de los frutos secos. Consumo de frutos secos se ha asociado con varios beneficios para la salud, tales como antioxidante , beneficios hipocolesterolémicos, cardioprotectores, contra el cáncer, anti - inflamatorios, y antidiabético, entre otras propiedades funcionales . Sin embargo, aunque las nueces poseen todos estos beneficios para la salud, su consumo se ha visto obstaculizada por la falta de información adecuada sobre los beneficios. Además, dado que los frutos secos son alimentos de alta densidad energética con alto contenido en grasa, hay un malentendido entre los consumidores de que el aumento del consumo puede conducir a un aumento no deseado del peso corporal con el riesgo de desarrollar sobrepeso / obesida . Sin embargo, los estudios epidemiológicos disponibles y los ensayos controlados de alimentación a corto plazo han apoyado la teoría de que la inclusión de frutos secos en la dieta típica no induce el aumento de peso, a pesar de un aumento previsto en el consumo total de calorías. Para hacer frente a la percepción errónea sobre las nueces y el aumento de peso corporal, la presente revisión se centra principalmente en la relación entre el consumo de frutos secos y la ganancia de peso corporal, en el contexto de los muchos beneficios de los frutos secos.

Introducción

Los frutos secos son recomendados como un componente importante de una dieta saludable en las poblaciones humanas en todo el mundo. Diversos tipos de frutos secos como las almendras, nueces de Brasil, avellanas, nueces de macadamia, maní, pecanas, piñones, pistachos, nueces de cola, nueces y anacardos son comúnmente consumidos por los seres humanos, a pesar de la ingesta individual varía notablemente. En general, los frutos secos son densa energía y proporcionan 23,4 a 26,8 kJ / g de alimento con un alto contenido en grasa (45-75% de peso), pero principalmente grasa insaturada [1]. Las nueces también son fuentes ricas en proteínas, ácidos grasos insaturados ácidos, fibra, vitamina s (vitaminas E y B6, ácido fólico, y niacina), minerales (magnesio, potasio, y cobre), fitoesteroles (estigmasterol, campesterol, y sitosterol), y polifenoles (catequinas, el resveratrol, etc) [ 2]. Los frutos secos son una parte integral del modelo de comida mediterránea y constituyen un aporte sustancial de grasa en la dieta (hasta un 35-40% de la ingesta total de energía) [3]. La adherencia a la dieta mediterránea se ha traducido en againstmortality protección por causas tales como el desarrollo de la enfermedad cardiaca coronaria (CHD), apoplejía, hipertensión y cáncer [4-11].

Los resultados de varios estudios epidemiológicos han sugerido que puede haber una conexión entre el consumo frecuente de frutos secos y la disminución de la incidencia de varias enfermedades crónicas [12]. Recientes pruebas científicas emergentes han demostrado que los constituyentes bioactivos de nueces enteras tienen cardioprotector, antiobesidad, contra el cáncer, y los efectos antioxidantes mediadas por varios mecanismos diferentes [13]. Los estudios epidemiológicos e intervenciones clínicas han demostrado claramente que el consumo de nueces se asocia con aumento estables o de bajo peso corporal [14-19].

Sin embargo, los frutos secos han sido percibidos por el público en general, engorde debido a su alto contenido en grasa . En Europa, las tasas de obesidad son más altas en los países mediterráneos en comparación con los países nórdicos [20] . Por lo tanto, existe una idea errónea de que los frutos secos exacerban la tendencia de la obesidad en la región del Mediterráneo [21] . Profesionales de la salud también han adquirido la impresión de que el consumo de nueces por los pacientes hipercolesterolémicos conduce a una mayor ganancia de peso [ 22 ] . Sin embargo , la hipótesis de que una dieta alta en grasa siempre aumenta el peso corporal es controvertido [ 23 ] .

Hay más mala interpretación de la noción de que la grasa provoca aumento de peso en comparación con otras fuentes de calorías [ 23-25 ​​] . Esta noción ha llegado a la vanguardia del debate después de la publicación de los resultados de la Iniciativa de Ensayo de Modificación Dietética Salud de la Mujer , que no mostró ninguna pérdida sustancial de peso después adherirse a una dieta baja en grasa [ 26 ] . McManus et al . [ 27 ] informó también que los sujetos obesos que siguieron una dieta moderada en grasa mostraron un mayor

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