EL MALESTAR DE LOS PROFESIONALES QUE DESARROLLAN SU PRÁCTICA EN EQUIPOS DE ORIENTACIÓN ESCOLAR
koalito29Tesis21 de Agosto de 2014
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EL MALESTAR DE LOS PROFESIONALES QUE DESARROLLAN SU PRÁCTICA EN EQUIPOS DE ORIENTACIÓN ESCOLAR.
Autora: Lic. Yesica Molina
RESUMEN
Bajo la línea de investigación “Figuras y Formaciones del Malestar en la Cultura Educativa Actual” expondremos los hallazgos encontrados en el malestar de los equipos de orientación escolar. Desplegaremos algunas recurrencias encontradas en los modos de abordaje de dicho malestar: la fragmentación de las intervenciones entre los actores intervinientes, el desdibujamiento del sujeto de la intervención y la derivación como automatismo de repetición. Y concluiremos con reflexiones orientadas a situar herramientas de lectura y de trabajo sobre estos malestares educativos.
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo se inscribe en una línea de investigación que el Programa de Psicoanálisis y Prácticas Socioeducativas en el área de educación de FLACSO, bajo la dirección de Perla Zelmanovich, viene desarrollando acerca de las “Figuras y Formaciones del Malestar en la Cultura Educativa Actual” , cuyos objetivos específicos –dirigidos a alcanzar el propósito general de actualizar el malestar en la cultura educativa– son: Delimitar las insistencias y particularidades en los modos de nombrar los obstáculos que los profesionales encuentran en sus prácticas; Definir objetos de investigación orientados a cernir figuras paradigmáticas del malestar educativo, a partir de las cuales los profesionales leen y construyen los obstáculos que se les presentan; Producir conocimiento sobre los procesos de formación de las figuras paradigmáticas del malestar y delimitar los puntos ciegos (Freud, S. 1910, 1912; Cevasco R. 1996) en la posición de los profesionales.
La unidad de análisis seleccionada son los enunciados con los que son presentados los obstáculos que, bajo la forma de “nombres del malestar”, enuncian los profesionales en un espacio de formación orientado a “abordar el malestar educativo actual.” Nos detuvimos en la narración de los profesionales, porque ésta si es la forma en que se recupera de qué manera las personas entienden y ordenan el mundo que configura su campo de prácticas (Zelmanovich, P. 2011), donde hay indicios de lo que hace obstáculo al acto educativo.
La investigación inició con una delimitación y exploración de una muestra conformada por 369 producciones escritas, elaboradas por igual número de profesionales que se inscribieron en la instancia de formación mencionada. Se sistematizaron los enunciados (llamados “nombres del malestar”) que dicen sobre los obstáculos, las dificultades, lo que no anda en sus prácticas. Se clasificaron las recurrencias, se precisaron los lugares de procedencia y los perfiles en cuanto a la formación y actividad laboral de quienes los enunciaron, y se inició un proceso de diferenciación de algunas figuras paradigmáticas del malestar. En lo que concierne a la formación profesional, la muestra se distribuyó de la siguiente manera : un 51,49% de profesionales del campo de la psicología y afines (psicólogos, psicopedagogos), un 26,56% de docentes, un 13,01% de licenciados en ciencias de la educación, un 1,36% de licenciados en sociología, un 3,79% de licenciados en trabajo social y un 3,79% conformado por otras profesiones. Por otra parte, en cuanto al lugar donde desarrollan su actividad laboral se puede apreciar que el 76,15% trabaja en una institución educativa, el 13,82% son agentes educativos externos y el 8,13% si bien trabaja con problemáticas educativas, lo hace por fuera del sistema educativo.
Dentro de los agentes educativos que desarrollan su actividad en instituciones educativas –representando el 76,15 % de la muestra– los profesionales que desempeñan tareas en equipos de orientación, conformados mayoritariamente por psicólogos, psicopedagogos y en menor medida por trabajadores sociales y licenciados en ciencias de la educación, son el grupo más numeroso –conformando el 21,95%–, le sigue el grupo de docentes de nivel medio (15,18 %). Se trata de dos poblaciones que enuncian problemas actuales del malestar educativos desde dos lugares diferentes.
En el presente trabajo expondremos algunos de los hallazgos encontrados en los obstáculos de los integrantes de equipos de orientación. Nos detendremos en dos recurrencias sobre los modos de abordaje de dichos obstáculos: por un lado, la fragmentación de las intervenciones entre los diferentes actores y la derivación como automatismo de repetición; por otro, la dificultad para lidiar con un exceso y una multiplicidad de demandas con la consecuente pérdida del objeto de intervención.
DESARROLLO
Los Equipos de Orientación Escolar (EOE) están conformados por equipos interdisciplinarios integrados por psicólogos, psicopedagogos, trabajadores sociales, docentes, licenciados en ciencias de la educación, entre otros. De la información relevada de documentos gubernamentales sobre la función de dichos equipos, se delimita en términos generales la de brindar atención y asesoramiento a los actores del sistema educativo, la prevención y promoción de problemáticas pedagógicas, sociales y de la salud que salen a la luz en el ámbito educativo. Los EOE surgen como respuesta al desafío de superar la desigualdad, la marginación y la exclusión presentes en el sistema educativo, promoviendo una escuela integradora, atenta a la diversidad, la convivencia, trabajando a la vez sobre condiciones de salud, trabajo y capacitación de sus docentes. Frente a este escenario nos preguntamos: ¿cuáles son los obstáculos o problemáticas por los que es convocado un profesional del equipo de orientación? ¿Cuál es el malestar de los profesionales que trabajan en los EOE?
Del análisis cuantitativo de una muestra de 123 trabajos del mismo número de profesionales que trabajan en EOE, hemos constatado que el 63,41% de la muestra narra el malestar a partir de una escena determinada que ha encontrado en su práctica; y también que la mayoría de los enunciados no refieren a un malestar propio sino que reflejan el de otros actores del escenario educativo, en especial de los docentes.
Nombre del malestar: La soledad del trabajo con estos chicos.
Breve descripción: La escena se repite. Niños que no se acomodan al formato escolar fácilmente, que irrumpen en el aula y no dejan trabajar ni al docente ni a sus pares. Chicos imposibles y maestros desgastados, que se sienten frustrados y enojados ante la exigencia de sostener y acompañar. Docentes desbordados que piden una solución “mágica” a quienes trabajamos cotidianamente en la escuela “fuera del aula”.
Respecto de los obstáculos, los EOE refieren que la mayor problemática se centra en los “problemas de conducta” y/o de adaptación al dispositivo escolar de los estudiantes que no ingresan en las regulaciones estándar. La frase que se repite con mayor énfasis es la queja de los docentes “con este/os chico/s no se puede”, que se deriva en la queja “con esta/s familia/s no se puede”. La primer frase se refiere por lo general a: la “agresión entre compañeros”, “dificultades en el control de los impulsos”, el “no registro de límites”, y/o la “falta de respeto a las autoridades escolares”. A estas problemáticas se le suman la denuncia de docentes y directivos sobre la “falta de apoyo” de las familias de los alumnos, que son convocadas cuando se detecta el problema, representada en la segunda frase que hemos destacado por su insistencia. Esta “falta de apoyo”, se enuncia en los siguientes términos: “si los padres no nos ayudan, nosotros solos no podemos”, “si los padres no se ocupan, nosotros qué podemos hacer”, “los padres no me acompañan ni me respaldan”, “los padres no acuden a las reuniones, no contestan las notas enviadas”. En general estas conflictivas aparecen presentadas en frases cortas, asertivas, muchas veces citadas de otros profesionales, escuchadas en reuniones de equipo, en pasillos o en decisiones que algún integrante del equipo fue tomando. Al mismo tiempo, los EOE recuperan las réplicas de las familias: “yo las entiendo a ustedes, pero ustedes entiéndanme a mí. ¡Qué hago con mi hijo sin ir a la escuela!” “¡Ustedes no entienden que yo no puedo!”. De esta manera, estos profesionales ponen de manifiesto un desencuentro entre diversos actores del escenario educativo, a la vez que visibilizan múltiples demandas desde distintos lugares y posiciones que con carácter de urgencia llegan a éstos.
Frente a este tipo de dificultades, demandas y desencuentros, los profesionales señalan que muchos docentes actúan derivando al EOE a aquellos alumnos que se constituyen en “el problema”, desvinculándose de él. Esta desvinculación promueve una fragmentación de las intervenciones entre los diferentes actores, la cual tiende a dificultar muchas veces la asunción de responsabilidades por las tareas específicas de cada integrante del sistema educativo, quedando, por otro lado, diluida la posibilidad del trabajo en conjunto, como puede observarse en el enunciado que hemos citado: "La dificultad o la soledad del trabajo con estos chicos”.
La educación como un trabajo de lazo y su obstáculo: la desvinculación entre los diversos actores del escenario educativo.
Repasemos la secuencia que encontramos repetida en las narraciones: la escena suele comenzar con la adjudicación y centralización del problema en un alumno, al que se le asocia un malestar recogido de los docentes. A partir de dicho desencadenante se desarrolla un conflicto y un desencuentro entre diferentes actores, por lo que se convoca al EOE al cual se
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