ESTUDIO SOBRE EL COMPORTAMIENTO DE LOS ESTUDIANTES DE PROGRAMAS ONLINE.

1.Introducción.

La educación a distancia, aquella conocida y comercializada como cursos online, se ha masificado enormemente. Una explicación a este acelerado crecimiento se funda en la necesidad de certificar competencias en un mundo altamente competitivo. Lo anterior, ha presentado una enorme oportunidad a todo tipo de organizaciones educativas y, al mismo tiempo, les ha traído un enorme y complejo problema, vale decir, el fácil acceso al engaño. En efecto, tal como lo constatan los autores Guyete y Piotrowski, el engaño, eso que se define como: “la transgresión contra la integridad académica, que implica tomar una ventaja injusta tergiversando la capacidad del estudiante y la real comprensión del conocimiento”, se ha permeado intensamente en esta forma de educar y certificar el conocimiento.

Estudios realizados por investigadores como Raines y Brown para determinar el significado del engaño académico desde la perspectiva del estudiante, concluyeron, entre otras cosas, que, para algunos estudiantes, los actos de infidelidad no eran considerados como engaño, a no ser que los sospechosos fueran capturados incurriendo en tales acciones.

Scanlon reconoce que a pesar de los engaños asociados a la educación online, la manera de enfrentar este problema es que los profesores asuman inicialmente el papel de educadores en casos deshonestos, a objeto de producir un cambio de comportamiento. Posteriormente, es necesario potenciar el uso de software y otras herramientas; sin embargo, estas medidas sólo resultan efectivas para los estudiantes que engañan por primera vez, teniendo que aplicar, para los reincidentes, medidas distintas. En este sentido, la falta de interacción y cercanía, como se da en un cara a cara, tiene como efecto, en el estudiante que engaña, la sensación de que sus acciones no son negativas.

Contrario a lo comentado más arriba, estudios efectuados por Stuber –McEwen, Wisley y Hoggatt, sostienen que la educación online presenta menos riesgos de trampa que la modalidad de educación tradicional. La principal explicación que justifica la determinación de engañar, conforme a la evidencia, es: el deseo de salir adelante (Simkin y McLeod).

Resulta interesante también lo que señala Cramer, en cuanto a los dos factores que inciden en la decisión de hacer trampa, la motivación (tanto intrínseca como extrínseca) y los factores situacionales como los ambientes contaminados de tramposos que invitan a engañar para cumplir con éxito los objetivos impuestos.

En fin, se sigue constatando que, a pesar de que los cursos online llevan más de 10 años en funcionamiento, perviven y se incrementan las prácticas de engaño por parte de la comunidad de estudiantes.

2. Breve revisión de la literatura de la e-trampa en los casos universitarios.

La evidencia presentada por los estudios, avala la idea que en los cursos online las posibilidades de engaño son más fáciles. Al mismo tiempo, los estudios señalan que la existencia de políticas claras contra el fraude o deshonestidad, reducen considerablemente los incentivos a los alumnos en pensar como válidas este tipo de prácticas.

Otra evidencia relevante, que constata la literatura, está en que el mayor grado de deshonestidad, por parte de los alumnos de cursos online, se debe fundamentalmente a que éstos se sienten lejos de sus compañeros y profesores. Esto es así ya que esta modalidad de estudio genera una sensación de aislamiento y desconexión del ambiente de aprendizaje, como también un fuerte sentimiento de frustración, todo lo cual es caldo de cultivoque propicia un ambiente para el fraude.

Es interesante constatar que las justificaciones que invitan a hacer trampa son fundamentalmente: el fácil acceso a la información, la restricción de tiempo y, finalmente, la presión dada la alta exigencia de los compromisos académicos. También se establece evidencia en cuanto a las razones adoptadas para no caer en el plagio, la menos efectiva es aquélla que se supedita a la coacción, contrariamente, las que han mostrado mayor poder persuasivo son aquéllas centradas en los valores e integridad, por lo que es necesario crear ambientes en donde el deseo por aprender y aplicar los conocimientos sea lo más relevante.

3. hacer trampa en el ambiente online desfasado en el tiempo (oportunidades por la temporalidad asíncrona).

Esta forma de engaño se basa fundamentalmente en aprovechar el desfase de tiempo, que existe en las plataformas online (entre evaluador y estudiante), para que el alumno no vea dificultades en obtener ayuda-no autorizada- para dar respuesta a la evaluación.

4. Métodos de engaño online.

Existe una amplia gama de trampas identificables en los cursos online, que sin lugar a dudas superan a las posibilidades que existen en los cursos tradicionales.

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