El Cuerpo Mas Alla De La Mente

Sí nos remontamos al pasado, nos podremos dar cuenta de que nuestros ancestros ya concebían una idea sobre la muerte. Los neardertales enterraban a sus muertos e inclusive les colocaban flores, como la mayoría lo hacemos en la actualidad; se pueden notar en ellos los principales seguimientos de una religión además de una preferencia por las mujeres rubias que eran plasmadas en las paredes de sus cuevas.

A pesar de ciertas similitudes que podríamos encontrar con ellos, existen diferencias considerables entre sus cerebros y los nuestros. Se afirma que los primeros en desarrollar un cerebro fueron organismos marinos, posteriormente los reptiles y finalmente los mamíferos, entre los cuales destaca el hombre primitivo: Homo habilis, Homo erectus, Homo sapiens; éste ultimo poseía un cerebro más grande que el de sus antecesores, formado por más pliegues. Asimismo se sostiene que el medio ambiente es capaz de cambiar físicamente el cerebro, el cual con el pasar del tiempo se deshace de conexiones innecesarias.

Nuestro cerebro no sólo involucra estructuras sino también una gran variedad de neurotransmisores, los cuales influyen en nuestro comportamiento.

Los chamanes son conocidos por su gran capacidad para modificar la realidad, esto lo logran a través de la manipulación del sistema de la serotonina.

La serotonina es la encargada de controlar el estado de ánimo apetito y aprendizaje, un aumento de ésta provoca una sensación de bienestar, de relajación y de concentración; en niveles bajos sucede todo lo contario, pudiendo causar desde depresión hasta el suicidio.

La psilocibina, manejada por los chamanes por medio de hongos, es una sustancia alucinógena que toma el lugar de la serotonina, abre el tálamo (puerta de acceso de toda la información) y provoca las alucinaciones que permiten ese “estado espiritual” del que tanto habla ésta cultura.

Otro neurotransmisor importante es la dopamina, la dopamina es una de las “drogas del amor” en conjunto con la noradrenalina y la feniletilamina (se cree que produce sentimientos de felicidad), la liberación de ésta mantiene unidos los lazos de amor. Se ha demostrado que una cantidad excesiva de dopamina en los lóbulos frontales provoca la esquizofrenia y la falta de ella el mal de Parkinson, el cual implica temblores corporales incontrolables.

Las drogas como la cocaína, el opio, la heroína y el alcohol promueven la liberación de dopamina, al igual que lo hace la nicotina; algunos artistas consumen estas drogas sólo por el simple hecho de inspirarse para sus siguientes obras.

Como es notable los neurotransmisores juegan un papel muy importante en nuestra vida cotidiana y el tratar de manipularlos nos podría traer consecuencias muy graves.

Órganos de los sentidos.

Oído: Estructuras que forman el

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