El Uso De Intervenciones Cerebrales En Los Programas De Rehabilitación De Delincuentes

El uso de intervenciones cerebrales en los programas de rehabilitación de delincuentes: Debe ser obligatorio, voluntario o Prohibido?

A medida que nuestra comprensión del cerebro aumenta, parece probable que se desarrollen nuevas técnicas biomédicas para alterar el comportamiento humano. Una aplicación potencial de estas técnicas es en el contexto de la rehabilitación de los delincuentes. Esta perspectiva puede parecer atractiva, teniendo en cuenta los costos sociales y económicos de la delincuencia y la eficacia limitada de las penas tradicionales a reducir la reincidencia. Por otro lado, el hecho de que el cerebro está íntimamente conectado con la identidad, la personalidad y la capacidad del individuo para tomar decisiones autónomas, surgen cuestionamientos a la idea de intervenir el funcionamiento del cerebro.

Actualmente, los medios farmacológicos y quirúrgicos que afectan la función cerebral, se utilizan principalmente para el tratamiento de trastornos mentales y neurológicos. Sin embargo, a medida que la neurociencia progresa, se adquiere mayor conocimiento para ser utilizado en intervenciones cerebrales que modifican la conducta. Por ejemplo, las intervenciones cerebrales podrían ser empleadas como parte de los programas de rehabilitación a delincuentes y así anticipar su libertad de la cárcel. Esta perspectiva puede parecer atractiva, teniendo en cuenta los costos sociales y económicos de la delincuencia y la limitada eficacia de las penas tradicionales en reducir la reincidencia.

Los descubrimientos de las neurociencias permiten intervenir en el cerebro humano para mejorar su estado o sus capacidades sin indicación médica. Este fenómeno es conocido como “Neuroenhancement” y está sujeto a un amplio debate ético. Como “Neuroenhancement” es un fenómeno evolutivo, el debate de aspectos éticos está necesariamente orientado al futuro y depende de la información sobre el posible desarrollo de la tecnología y sus consecuencias para la sociedad. Sin embargo, hay que establecer límites para la formulación de previsiones especulativas en argumentos éticos y justificaciones políticas.

Algunos posibles ejemplos de aplicar Neuroenhancement, serian:

• Aumentar la empatía; es clave para entender las reglas y normas morales

• Disminuir los impulsos violentos: Algunos delincuentes experimentan poderosas oleadas de ira que se tornan difícil de controlar. Esto puede afectar la capacidad de los delincuentes de pensar con claridad acerca de cómo deben actuar y puede distorsionar sus juicios morales.

• Medicamentos anti – libidinal: Ayuda a reducir el pensamiento y deseo sexual desviado (violación, pedofilia, etc.)

• La disminución de los sentimientos racistas: Algunas personas experimentan una fuerte reacción emocional negativa hacia otras razas. Estas reacciones alimentan los delitos por motivos raciales e interfieren en la capacidad de ver el racismo como malo.

Debería la Neuroenhancement estar prohibida en delincuentes?

El uso bien intencionado de intervenciones biomédicas está sujeto a riesgos y puede haber consecuencias indeseables, por ejemplo: puede inhibir un comportamiento que bajo ciertas circunstancias es deseable, como la agresividad, que serviría para defenderse ante un ataque violento. También se amenaza la autonomía del individuo, si la incapacidad del delincuente de cometer ciertos actos es el resultado de su elección autónoma para recibir intervención cerebral (a sabiendas de que tendría ese efecto), entonces su incapacidad no necesariamente debe ser vista como una injerencia en su autonomía.

Algunos penalistas podrían oponerse a implementar este procedimiento, como condición de la libertad anticipada de la cárcel, sobre la base que las sentencias deben basarse únicamente en un justo castigo. Hay que señalar que muchos teóricos creen que una función legítima del sistema de justicia penal es la protección del público y la rehabilitación de los delincuentes. Ciertamente, en la práctica, la mayoría de los sistemas de justicia penal dan poco de peso a tales objetivos, ya que no están relacionadas exclusivamente con una condena justa.

Argumentos a favor del uso obligatorio de

...