INVESTIGACIÓN: FOTOGRAFÍA MEXICANA EN EL S. XXI A COMPARACIÓN DE LA DE 1950.

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales  

INVESTIGACIÓN: FOTOGRAFÍA MEXICANA EN EL S. XXI A COMPARACIÓN DE LA DE 1950

Tema: Fotografía Mexicana

Problema: Estereotipos de la mujer en la fotografía.

Pregunta: ¿Cómo se construye el estereotipo de la belleza femenina como atractivo visual desde la fotografía mexicana del S. XXI a comparación de la década de 1950?

Hipótesis:

Se espera que la fotografía mexicana sirva como atractivo visual para la construcción del estereotipo de la belleza femenina en el siglo XXI a comparación de la década de 1950.

Objetivo general: Conocer cómo se construye el estereotipo de la belleza en un medio visual (fotografía) y que factores determinan la creación de dichos estereotipos.

Objetivo específico: Comparar la fotografía de mujeres de la década de los cincuenta con fotografías de mujeres de la actualidad, encontrar diferencias y similitudes y percatarnos si realmente los estereotipos han cambiado a lo largo de estos años o se han mantenido como una constante.

INTRODUCCIÓN

Daremos apertura a nuestro proyecto, definiendo en el Estado del Arte nuestro argumento y dando a conocer nuestras fuentes de apoyo y sustento para la realización de la pregunta de investigación. Partimos por realizar el cuestionamiento a partir de la lectura de dos artículos: Estereotipos y medios de comunicación: un círculo vicioso, y Análisis de los estereotipos estéticos sobre la mujer en nueve revistas de moda y belleza mexicanas. Estos nos dieron pauta a cuestionar a la fotografía como puente de comunicación, producción y transmisión del discurso de los estereotipos y su uso como atractivo visual para que nazcan los últimos mencionados. Fue suficiente al leer el artículo Marilyn Monroe y los estereotipos de género. (Belmonte, Ana María. (2011).) para saber que ambos discursos de belleza femenina en cuanto a estereotipos se refiere, podían ser comparados para los fines de la fotografía al construir el atractivo visual.

Para dar inicio a nuestros extractos que nos sirvieron como fuente de conceptos de variables, empezaremos por aportar el concepto de estereotipo. Según Jahoda, estereotipo se conceptualiza como ”Creencias que conciernen a las clases de individuos, de grupos o de objetos que son preconcebidos; es decir, que no provienen de una nueva apreciación de cada fenómeno, sino de hábitos de juicio y de expectativas de rutina” (Machillot, 2013: 117). Adherimos este concepto de estereotipo a nuestra forma de concebir una idea que va más apegada a los juicios sociales y que es por ello que la fotografía mexicana ha tomado partido a exhibir el discurso de la formación del cuerpo y rostro de la mujer como indicador de servicio al hombre y siendo enfático en señales psicológicas. Para dar continuidad lógica se dará el concepto de belleza y femineidad. Al referirnos desde el ojo social, entendemos por belleza “de que en el ritual contemporáneo de la belleza, el cuerpo constituye un espectáculo, en consecuencia éste se convierte en pura corporeidad, escenario para la aplicación fetichista de toda la tecnología contemporánea de la belleza(…)” (Finol, 1999) Por otro lado como femineidad o lo femenino, según Irigaray “Lo femenino es lo que no es, o lo que no se debe ser, un lugar proscrito que convoca el horror, el rechazo, el escarnio y la vergüenza. De hecho, al rival se le deshonra asemejándolo a una mujer. La feminidad se erige así, como un antivalor determinado por la exclusión y no como un valor intrínseco a partir de sus propias características y naturaleza. De lo anterior se concluye que el sexo femenino es un no sexo o dicho en otras palabras, es un sexo que no le pertenece a la mujer” (Irigaray, 1977).

Por último para dar por terminada la parte de conceptos y  señalar cual es la relación de la sociología y la fotografía, como justificación de la visión en la investigación. “La fotografía fija es una mezcla de arte y técnica (mecánica y química) que consiste en congelar un instante del tiempo. En este sentido, el análisis de momento decisivo se puede convertir en un instrumento excelente de análisis de la realidad social. A menudo se transforma también en una construcción de esa realidad social, distinta pero comparable a lo que es capaz de producir un texto escrito.” (De Miguel y Ponce, 2016)

La fuente de De Miguel y Ponce, Para una sociología de la fotografía, nos da todo el sustento de la relación que le damos al tema de fotografía con la disciplina de visualización del tema que es la sociología. A continuación una breve cita. “La Fotografía se inventa en 1839, la misma fecha en que Augusto Comte empieza a escribir sobre la nueva ciencia de la Sociología. El famoso Discours sur léspirit positif  se publica un lustro después. Es interesante recordar que ese <> es en realidad un prólogo, largo (de unas 40 páginas), a su Tratado filosófico de astronomía popular. La visión del mundo a través del anteojo o del teleobjetivo es, pues, iniciada por el nuevo espíritu positivo de la Sociología. Fotografía y Sociología son dos disciplinas hermanas, francesa por nacimiento, relacionadas desde su inicio. Ambas nacen en Europa, se exportan a América, y se reimportan a finales del Siglo XX desde Estados Unidos a Europa. Vienen entonces con ropajes y temas nuevos pero conservan un sabor antiguo. En esta migración de retorno, o en su naufragio, muchos europeos/as perdieron el interés por las ciencias sociales lo mismo que por la fotografía.” (De Miguel y Ponce, 2016)

FOTOGRAFÍA MÉXICANA DE LOS AÑOS 50´S

“En los años 50, la máxima meta que debía alcanzar la mujer era aquella de casarse, tener hijos y vivir felizmente en una casa agradable y con el mismo hombre hasta el final de la vida. El matrimonio, como las joyas, era para siempre. Y aunque se consideraba bien que las chicas estudiaran, o incluso que disfrutaran brevemente de una carrera profesional, un vistazo a las revistas femeninas de los años 50 bastaba para constatar que las prioridades eran definitivamente el hogar, estar guapa y guisarle buenas comidas a marido…” (Mulvey & Richards 1998)

Esta frase hace una síntesis de la vida que en los años cincuenta era común que llevara una mujer, no solo en México si no en el resto del mundo, además que el cine y la fotografía  de Hollywood fue una gran influencia para marcar los cánones que debían seguir o cumplir las mujeres en la sociedad, si alguna salía de este “molde” simplemente era juzgada o mal vista por todos.

Según la autora Ana María Belmonte, existen varios recursos importantes que ayudan a la sociedad a crear los estereotipos de los diferentes grupos existentes en ella, en la década de los 50 lo fue el cine y por supuesto la fotografía. En estos dos medios de comunicación masivos podíamos ver que las mujeres que aparecían en ellos eran mujeres bellas, de cara delgada, cintura marcada, cadera ancha que representaba el papel de fertilidad. Ante todo la mujer tenía que lucir sexy y a disposición del hombre que se encontraba a su lado. Además se nota en casi todas las fotografías de esa época, a una mujer feliz de laborar en el hogar y cuidar de los hijos, eso también ayudo a vender millones de productos domésticos. Y es aquí cuando la imagen de la mujer se ve ocupada por la economía, es decir se trata de vender una imagen totalmente distorsionada construida a partir de objetos (perfumes, electrodomésticos, ropa, calzado jabones, muebles etc.), y se empieza a contemplar a las féminas ya no como un sujeto sino más bien como el objeto de la fotografía para cumplir con ciertas funciones.

La investigación de Inmaculada Alcalá, la fotografía, el cine y la televisión servían para vender a las mujeres productos o situaciones que les dieran felicidad y estilo, llenando de estereotipos a uno de los grupos más vulnerables de la sociedad. A partir de estas investigaciones, podemos decir que la fotografía Mexicana de los años 50 fungía un papel más publicitario que artístico. Además de que era evidente la inmensa sumisión que vivían las mujeres en esa época y que quizá jamás ha desaparecido. Se veían por todos lados mujeres que eran muy felices de servirles a una familia y un marido pero sin perder el toque sensual, que es algo que las caracterizaba.

El cuerpo es algo que siempre se va construyendo a partir de varios estándares que dicte cada sociedad, es decir, la belleza es subjetiva y se construye a través de varias percepciones, pero es muy notable que en cada época de la historia la belleza vaya teniendo ciertas modificaciones. En este caso nuestra investigación, se dedicará a conocer más a fondo los grandes aspectos que hicieron que ciertos tipos de mujeres fueran fotografiadas para transmitir al resto del país el único icono de belleza femenina.

FOTOGRAFIA ACTUAL.

El siglo XXI trajo consigo una nueva Era, la Era digital. Desde sus comienzos, las nuevas tecnologías de la información y comunicación han provocado la adaptación del hombre a todo su universo; la fotografía ha sido un factor dentro de todo esto, hoy en día toda persona cuenta con una cámara para capturar todo momento de su vida y subirlo a las aclamadas redes sociales; es ahí donde los estereotipos de belleza femenina comienzan a actuar. Desde las revistas de alta gama hasta las personas afamadas tienen una fuerte influencia en las féminas, es por esto que el cuerpo ideal de la mayoría de las mujeres actuales es con caderas anchas, cintura pequeña y busto pronunciado, acompañado claro de maquillaje y ropa “de moda”. Y todo esto se puede observar simplemente dando un click que abre todo un mundo de imágenes y palabras digitales.

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